Capítulo 12

1.9K 198 11
                                    

(Pov Freen)

Es martes y ayer por la tarde salió junto a Becky a tomar un helado y a patinar un poco, Becky estuvo con su ceño fruncido y cara de preocupación durante todo el tiempo, la tomaba de la cintura cada que subía al skate y cada que se tiraba por la rampa podía ver en los ojos de la alfa como se le escapaba el alma. Freen solo se limitó a reírse y a decirle a la alfa que esto era algo que hacía muy a menudo.

Freen se enamoró un poco más por eso y la tailandesa dejó que Becky se escondiera en su cuello para que la olfateara y supiera que todo estaba bien, nadie tenía que saberlo.

Sonríe y lleva otra cucharada de su cereal con leche a su boca. Becky también la invitó al partido del jueves y nunca admitirá que esta vez sí iría encantada por ir a ver a la alfa. En estos últimos días pudo notar el cambio drástico que tuvo Becky con ella y con todos a su alrededor en general, es como si ahora se hubiera convertido en la alfa perfecta, el tipo de alfa que Freen siempre quiso.

—Buenos días cachorrita. —Nicha, su madre le deja un beso en su coronilla y camina hacia los estantes para servirse el desayuno. —¿Qué haces despierta más temprano de lo normal, cariño?

—Anoche me quedé dormida temprano y hoy me desperté antes de la alarma y ya no pude volver a dormir. —hace un puchero y su madre la arrulla mientras la abraza.

—Oww, mi pobre cachorrita. ¿Hay algo mal o es tu colchón? —ella pregunta con sincera preocupación y vuelve a lo suyo, se sirve café.

—No mami, solo llegué algo cansada ayer y luego de la cena caí muerta en la cama.— Sonríe para tranquilizar a su madre y la alfa asiente en entendimiento.

—¿Y cómo te la pasaste con Becky? —ella tiene esta mirada de madre curiosa y de alfa posesiva a la vez. Intenta no rodar sus ojos ante el tono de voz.

—Muy bien en realidad, paseamos un rato y la llevé a la pista de skate. Ella estuvo toda asustada y preocupada porque pensó que me iba a lastimar. —se encoge de hombros y sonríe.

—Pero tiene razón en eso, podrías caerte y lastimarte. Ya te lo había advertido. —Freen rueda sus ojos y sonríe cálidamente ante el ceño fruncido de su madre y su mirada de preocupación.

Estos alfas y su tonta sobreprotección. Recuerda la primera vez que decidió usar un skate frente a sus padres, muy mala idea. No era la primera vez que usaba uno, había estado practicando con el skate de Babe y ya había encontrado la forma correcta de mantener el equilibrio y estaba comenzando a hacer trucos, pero el destino decidió poner una pequeña piedra delante de la rueda y no supo mantener el equilibrio a tiempo. Seis alfas la rodearon, todos con cara de preocupación y quemando con la mirada al skate y a Babe.

—Tienes que ser más cuidadosa con esas cosas, cachorra. —Su papá Brandon estaba en la entrada de la cocina con todo su cabello despeinado y con sus manos apoyadas a los costados de su ancha y marcada cintura.

—¡Papá! —se queja y se echa para atrás en la silla, hace un puchero y su padre suspira en negación.— Ya tuvimos esta charla y ya me compraron el skate, saben que sé usarlo correctamente.

—Pero aún así puedes lastimarte. —Fern está arreglada para ir al colegio y Jeff la sigue por detrás con el cepillo de dientes en su boca.

—¿Papi, me haces el desayuno? —Jeff habla con espuma de pasta y su padre se levanta de la silla para preparar el desayuno. —Casi me quedo dormido y voy tarde a entrenar.

La puerta sonando hace que todos detengan sus movimientos y dejen de regañarlo por usar una tonta skate, todos se miran curiosos y Freen solo se permite achicarse en su lugar y enrojecer silenciosamente.

Put me in the sky, my love「 Freenbecky 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora