Cap 2

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Mag,

Simplemente, no puedo quedarme aún en pie aunque yo quiera, recuerdo todo lo horrible que pasé cada que me enfrento a ellos.

¿Una persona que es el salvador para unos, siendo inseguro de sus propias capacidades? Ni yo me lo creo, siéndote completamente sincero.

No solamente de tener a alguien abusivo como figura paterna, incluso, me hierve la sangre ser consciente del hecho que tú hayas sido una esclava que fue vendida a él por ser "la más hermosa de todas las indígenas habidas y por haber".

Y mira... Admitiré algo; tengo miedo de varias cosas, pero dos principales son:

No ser el padre que deseo ser para mis hijos y la capacidad humana para realizar cosas a costa de usar personas

...

Es que, no puedo creerlo, simplemente no puedo analizarlo sin que me de miedo la humanidad.

Te cuento,

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Me encontraba junto a algunos soldados en el campamento a las horas de la mañana, un poco antes de que 'cante el gallo'.

Seguimos en el Virreinato del Perú, ayudando a que obtengan su independencia de las manos españolas, pero ha sido difícil... Los realistas no solo del Imperio Español, incluso del Ejército Real del Perú han dado demasiada oposición al asunto.

Estaba medio dormido en una de las carpas, conciliando el sueño ya que había llegado demasiado cansado el día anterior a este; estuve tranquilo hasta que fui despertado por un ruido que puedo asemejar al sonido de un látigo golpea a algo de forma agresiva, lo cual me dejó muy intranquilo si puedo serte sincero.

Salí de mi carpa, sintiéndome aún cansado a pesar que había dormido lo suficiente, pero eso no me detuvo en estar alerta, si es que ese sonido provenga de alguna trampa o algo así.

Con mi espada en mi mano izquierda, caminé un poco por los silenciosos suelos del lugar que nos mantenía "seguros" de la guerra, puedo suponer que en pocos minutos el "gallo" cantaría las 6 primeras horas para despertar a todos los voluntarios.

En pocos segundos volví a escuchar, y para colmo, cerca mío; lo cual simplemente me hizo sentirme aún más nervioso de lo que ya estaba en dicho momento.

Haciendo que tomara con aún más fuerza la empuñadura de mi espada, como si mi vida e incluso mi integridad dependiera de eso.

Con cada paso que daba, el ambiente se volvía más tenso y una especie de alboroto y la bulla en ella se intensificaba pero aún no se escuchaba con claridad la razón; algunos soldados que despertaban me siguieron, curiosos al haber oído también el mismo ruido.

El grito de un hombre apareció, haciendo que nos alarmáramos, dejando el sigilo, procedimos a correr en dirección al ruido de alguien desesperado; nos detuvimos en seco al presenciar que tres hombres de nuestras tropas, intimidaban e incluso lastimaban a un joven que se notaba de lejos que no tenía más de 30 años, se veía tan asustado y nervioso que daba pena solo de verlo.

(Luego podrás entender el porqué de las acciones de mis soldados.)

De todos lo que habíamos visto la escena, fui el primero en dar el primer paso, me acerqué junto a otro soldado y demandé:

—¿¡Qué animal les ha picado para molestar a este hombre!? —Pregunté a aquellos tres hombres con un atisbo de enojo, a mis ojos en ese momento... No era exactamente correcto lo que estaban haciendo.

—General, este hombre no aparenta ser lo que es realmente— Dice uno de mis hombres mientras daba un paso adelante hacia mí, hablando con una voz firme.

El eco del silencio ¡🇨🇴🌿x 🇧🇷👑!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora