Aquella noche

The Baddest

La emoción palpaba en el aire mientras el equipo de K/DA se preparaba para grabar su nueva canción "The Baddest", con la maknae liderando el camino con su estilo audaz y su actitud imponente. La peli-rosada se sentía inspirada por la interpretación de Akali, admirando su confianza, autenticidad y carisma en el estudio mientras daba vida a la letra con su voz poderosa.

A medida que la última toma de la grabación avanzaba, un sentimiento desganado se apropio del ánimo de Seraphine. Recordaba que a pesar de sus esfuerzos por impresionarla con su propio solo, no lograba captar su atención de la misma manera que le impactaba a ella. Cada intento por grabar su parte parecería caer en oídos sordos, y comenzaba a preguntarse si alguna vez sería capaz de llegar a ella.

[Aunque la protagonista aún no supiera qué canción le dedicaría después, ¿verdad?]

Aún así, el espíritu del ambiente seguía en su punto, intacto, decidiendo celebrar el éxito de la canción con una salida nocturna juntas. Solo que la sugerencia fue rechazada, pues Akali ya tenía previsto otro plan.

— Chicas, sé que debemos celebrar juntas, pero hoy tengo cita con True Damage. Ya había quedado con ellos hace un mes y pues... ¿les parece si nos encontramos otro día? —. Sonreía con duda de que afectara el ambiente que traían.

—Podemos festejarlo mañana, pero sé que no vas a llegar al departamento, ¿o, sí? —. Comentó la líder del equipo.

—Hah, me atrapaste—. Levantó las manos como culpable.

— Incluso se puede ver que Rogue se sabe divertir—. Mencionó la diva.

— ¿Yasuo irá contigo? —. preguntó Bookie.

— Lo veo más muerto que cuando juega Valorant y queda 0/17/3–. Reía Akali señalándolo. — Además, hoy hizo un gran trabajo... Yasuo, ¿quieres ir con la gang?—.

—¿Huh? Ya quisieras verme a mí manquear, te daré tus clases algún día minion—. Suspiro cansado tratando de zafarse del estudio y de la ninja para así ir a su karaoke favorito y apreciar la música de las guardianas estelares.

—¡Oh, vamos, ven! —.

— No, quiero descansar. Adiós, se divierten—.

— Bueno, me temo que no irá—. ¿Por qué Kai'sa preguntaba si iba? ¿Estaba interesado en él? Ahri se cuestionaba mentalmente para así partir a abrazarla atrás de su espalda.

— ¡Bookiee! —Exclamó. —¿Quieres tener una noche de pelis?... Solo tú y yo—. Susurró percibiendo el cuerpo tenso de Kai'sa ante tal acción tan inesperada, haciéndola sonreír. Sabía que podía aprovecharse de la amabilidad y generosidad de su bailarina.

— Claro que si, no es como que tenga algo importante que hacer —. Giró hacia ella para abrazarla de vuelta sonrojada y con cierta incertidumbre. — Además, si estoy contigo, puedo hacer cualquier cosa, ¿quieres algo para cenar? —.

— ¡Sundae! Quiero un enorme sundae —. La miró con ojos brillosos, como una niña pidiéndole a su mamá comer su plato favorito.

— Me temo que solo será uno pequeño, es muy noche y tienes que cuidar tus cuerdas vocales. Mañana toca practicar tu canción —. Señaló con el dedo índice, viendo como Ahri hacía puchero.

— ¡Bookie! No me puedes hacer esto —. Desobedecía negando.

— ¡No quiero! Un sundae no me puede afectar tanto —. Aleteaba sus brazos en signo de manifestación.

—Ahri...—.

—Además, n-no... —. Se escondió en su hombro.— No planeaba que el sundae fuera el que agotara todas mis cuerdas vocales...—. La tomaba de la manga para que así, tal vez captará su mensaje.