Tik Tok Tae! [kth + jjk]

Capítulo 39

Taehyung se puso una bata para ir al baño a por toallas húmedas mientras dejaba a Jungkook en el cuarto.

El chico estaba exhausto,º apenas podía mantenerse en pie de lo mucho que temblaba y no podía sentir apenas las piernas por la intensa sesión previa.

—¿Te duele? —preguntó el pelinegro cuando regresó, cerrando bien la puerta.

—Un poco —admitió con un mohín avergonzado—. Mañana me dolerá más.

Taehyung soltó una risita, acercándose a él para limpiarle los muslos con una toalla mojada: —Perdón, quizás me he emocionado.

—No, me ha gustado —aseguró—. Lo he disfrutado.

—Me alegro —sonrió, mordiendo su labio inferior mientras limpiaba la entrada de Jungkook y su estómago, eliminando los restos de semen de Jungkook y el lubricante que habían usado—. Levanta los brazos, anda.

El peliazul obedeció sin rechistar, disfrutando del cuidado minucioso de su novio. Estaba tan cansado y desgastado por el sexo que ser limpiado le parecía un lujo. Después, cuando pudiera descansar al menos quince minutos, iría al baño para terminar de asearse, pero por el momento eso era suficiente para no sentirse pegajoso.

Se había vuelto costumbre ya esos tratos cuidadosos tras su relaciones; a Taehyung le gustaba cuidarlo después del sexo y Jungkook estaba apendiendo a dejarse cuidar.

Le gustaba, le hacía poder disfrutar de sus encuentros sin tener que preocuparse en el después, en tener que limpiarse porque alguien lo haría para él.

Taehyung limpió su sudor de su frente y axilas con otra toalla mojada, dejando un rastro frío por todo su cuerpo.

—¿Te vas a dormir? —preguntó en un susurro el mayor, dejando tiernos besos en sus mejillas.

—Mmm... —murmuró—. No. Tengo que ir al baño.

—Entonces ve ahora. Vas a quedarte dormido sino. Puedes ducharte, si quieres.

—Pero es tarde —protestó—. No quiero molestar a tus padres o a Hye.

—Están dormidos, no van a despertarse por la ducha —le aseguró, rodando los ojos—. Anda, ve.

Jungkook se levantó con un par de quejidos, buscando su ropa interior sucia y su pijama para cubrirse en el camino, sólo por si acaso. Taehyung aprovechó cuando se agachó a por su boxer para darle una nalgada que lo hizo dar un salto.

—¡OYE! —le chilló, sintiendo su rostro enrojecer por lo inesperado que fue.

Taehyung se carcajeó, escabulléndose al otro lado de la cama, su bata arrugandose y dejando parte de su desnudez al descubierto.

—¿Quieres que te traiga unas toallas para que te limpies? —preguntó el menor, vistiéndose rápidamente.

—No. Voy ahora al baño también, adelante —el otro asintió y se acercó a la puerta, pero Taehyung le detuvo antes de que abriera la puerta—, ¡espera! Llévate los condones y tirarlos, ya que vas —le pidió, entregándose los dos envases envueltos en un clinex.

Jungkook finalmente salió, cerrando la puerta a sus espaldas. El pasillo estaba oscuro y silencioso, en unas tinieblas que lo consumían todo.

Se asomó al cuarto de su hijo, viéndolo dormir con el monitor en la mesilla. Se quedó más tranquilo sabiendo que no habían sido tan ruidosos como para despertarlo.

Al encender la luz del baño, tiró los condones y se aseguró de que no se vieran entre el papel, sólo por vergüenza de que los señores Kim los vieran. Una cosa era saber que tener sexo era natural y sano en las relaciones de pareja, y otra era que los padres de tu novio sean conscientes de cúando ocurre.