Ella pensaba que era una sombra, pero el siempre la noto, detrás de las cámaras, detrás de la gente, como podía ella querer ocultarse? Verla era como ver al sol directamente, cálido y brillante.
Era un idiota no encontraba la excusa perfecta para llamarla o enviarle un mensaje. No sabía siquiera que decirle y no entendía porque tan de repente todo lo que tenía que ver con ella le causaba pena.
Dos semanas pasaron y la siguiente carrera tenía esperanza de verla, pero era una probabilidad muy baja, tomando en cuenta que solo había ido a muy pocas carreras a lo largo de los años. Pero ahí estaba caminando por el paddock, con Charles... CON CHARLES?! Pero solo son amigos, ella se lo dijo, pero el quería salir con ella! Y Carlos como siempre siendo tan idiota para no llamarla. Aquel vestido azul le iba tan bien, como es que cualquier color le iba tan bien?. Mientras caminaba parecía que el sol se ponía de su lado, su cabello brillaba y se movía suavemente, podía ver sus pecas desde la distancia mientras se acercaban a él. A ÉL. Cálmate Carlos obviamente se acercan a ti para saludar, Charles fue el primero en hablar -Te sientes bien?- le preguntó el monegasco algo confundido y ella se giró a ver a Carlos -Te vez algo pálido- mencionó algo preocupada ahora ella.
No podía sentirse tan mal de repente, que pasaba por su cabeza? Hace unos instantes estaba bien o eso pensaba el -Carlos- lo llamaron ambos algo preocupados -Estoy bien- murmuró débilmente y después de eso su vista se nubló.
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Cuando se despertó estaba en lo que parecía una pequeña oficina y tenía una aguja en su brazo -No te muevas- le dijo una voz y la vio a ella sentada en un pequeño sofá -Al parecer eres poco inteligente y no habías comido nada, ni tomado nada- exclamó ella caminando hacia el y este sentía como su corazón se aceleraba -Donde está Charles?- le preguntó confundido -Fue por tu padre- explicó suavemente mientras lo miraba y acariciaba su frente, su mano contra su piel se sentía tan bien, como si una corriente eléctrica recorriera todo su cuerpo con el simple tacto de su parte -Te sientes mejor?- le preguntó ella y este asintió -Bien- murmuró ella alejándose nuevamente y se sintió como una frialdad se apoderaba en su ser. Quería que siguiera tocándolo de esa manera, cada vez que se acercaba a él sentía su corazón se aceleraba y no entendía el porqué de esto.
Cuando estaba por hablarle la puerta se abrió dejando entrar al padre de Carlos preocupado por el y Charles se colocó a lado de ella -Los dejamos solos- dijo el monegasco mientras ella tomaba su bolso -Gracias Charles- le dijo su padre mientras Charles tomaba suavemente del brazo a Lucy y el corazón de Carlos sintió algo que nunca había sentido antes. Solo los vio salir de la habitación y después miró a su padre que comenzaba a sermonearlo por no haber comido nada.
Lucero
Camino del lado de Charles para regresar al paddock, su corazón preocupado por el español el cual estaba siendo hidratado por intravenosa -Estará bien- le dijo Charles con una sonrisa que la calmó, tenía razón, además solo era día de prácticas y todavía faltaba para eso -Lo sé, pero viste como se desplomó- exclamó ella ante el recuerdo de él cayendo frente a sus ojo, si no fuera por Charles, Carlos se hubiera golpeado la cabeza tan fuerte que no sabría si estaría tan lúcido como ahora -Si, muy raro de Carlos- le dijo el monegasco mientras ambos caminaban al garage de Ferrari. Esta vez estaba ahí como invitada de Charles, era su primera vez en el hospitality de Ferrari y no sabía que esperar a decir verdad.
