Detrás de una sonrisa pueden esconderse miles de lágrimas
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POV CALEB
Quisiera entender nuevamente cuáles eran los motivos por los cuales me estaba sintiendo tan incompleto, como si verdaderamente mi existencia hubiese sido el mayor de los errores.
-¿Cuántas veces tengo que decírtelo?.- habló Bianca.- ¿Quieres que te lo explique con dibujitos?. ¡Pues no lo voy a hacer!.
Cada día que pasaba, Bianca se daba la tarea de preguntarme cómo estaba. Claro estaba que debía decirle la verdad, y esta era que no, no me encontraba bien.
-Nuevamente te digo que no debes prestar atención a las cosas que te envía tu familia paterna.- siguió.- ¿Te han dado algo alguna vez?.
¿Lo han echo? ¿Me han dado algo?.
Claro que no estúpido.- habló mi subconsciente.
-No.-dije en tonó neutro.
-¿No?, ¿Eso es todo lo que piensas decirme?.- dijo Bianca.- Muchas veces de verdad quisiera entrar en tu cabeza y ver qué es lo que tienes allí.
-¿Que quieres que te diga entonces?. dije.- Si te digo que no estoy bien sales con tus sermones. Entonces no me preguntes.
-Te estás portando muy inmaduro.
-¿Cual es tu concepto de inmaduro?.-hablé un poco fuerte.- ¿Que te diga que no estoy bien?, pues si no te lo digo, es porque no lo estoy.
-Pues no, mi concepto es que no te dejas ayudar.
-Por Dios Bianca, ¿Cómo pretendes ayudarme, si mi problema, es un problema interno.- concluí.
-Pues no lo sé, pero queremos ayudarte.
-¿Queremos?.-dudé.
-si, queremos. Will y yo queremos ayudarte.
No supe que decir, pues no veía cuales eran los motivos por los cuales esos dos querian verse involucrados en mi problema.
-Los amigos no solo estamos en las buenas Caleb, también nos comprometemos a estar en las malas.
-Entiendo, y, de verdad estoy agradecido con ustedes.-decia mientras una lágrima rodaba por mis mejillas.- Y la verdad, sería un ignorante si dijera que no los necesito.
Esas palabras por parte de Bianca, marcaron un sinfín de emociones dentro de mi, pues la verdad era que muchas veces habia escuchado esas palabras de diferentes personas, las cuales en mis peores momentos se alejaron de mi. Por esas razones no le tomaba importancia a las palabras, Pero tanto Bianca como Will, me habían demostrado lo contrario. me enseñaron lo que es la verdadera amistad.
-Quiero que sepas Caleb, que aquí voy a estar siempre.- Musitó, mientras tomaba mis manos.- Creeme que no siempre es como pensamos.
-No quiero que piensen que soy débil.-dije.- Entendería de verdad si deciden alejarse de mi.
-Nosotros no pensamos que seas débil, al contrario, creo que eres una de las personas más fuertes que conozco.-habló.- No tener una infancia como la de los otros niños debió ser duro para ti, y eso ya te hace fuerte.
Sus ojos reflejaban sinceridad al momento de hablar.
-No creas que por llorar eres débil.-siguió.- Cuando nacemos, lo hacemos llorando, y eso no significa debilidad, significa tomar aire, significa sacar lo que por mucho tiempo hemos tenido allí dentro.-dijo tocando mi pecho.- Eres fuerte Caleb, te lo diría una y mil veces más.
