Capitulo 2

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𝑪𝒂𝒕𝒂𝒍𝒊𝒏𝒂

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𝑪𝒂𝒕𝒂𝒍𝒊𝒏𝒂. 

— Si pa, como voy a bajarme pa estoy en el medio del océano—. Rei ante las palabras de mi papá.

— Y bueno, vos sos capaz de todo hasta de tirarte del avión Catu—. 

— Bueno bueno eh, pa te dejo voy a ver si me veo algo acá en la pantallita esta—. Prendí la Tablet buscando una serie.

— Te quedan menos de 3 horitas Catu, llámame cuando llegues y cuando estés con martu ya—. Dijo como todo un padre preocupado.

— Che pa, ¿vos decís que Nico lo va a tomar bien? Tipo esto de caerle de sorpresa después de tanto tiempo—. 

— Por que de la nada le tenes tanto miedo a Occhiato, es tu hermano, no te va a comer—. 

— No es miedo Antonio, simplemente es raro que le caiga de la nada sabiendo que no llamo ni una sola vez desde que nos mudamos, solo nos damos likes en Instagram y ya esta, pero ni una llamada ni un mensaje nada, y mira que Yo intento comunicarme con el, pero no se igual agradezco no tener que quédarme en su casa—.

— Y no se catu, vas a tener que averiguar por que tan resentido tu hermano, aparte la gente no lo sabe, vos tenes puesto el apellido de tu mamá, no el mío—. Rei ante su escondido reclamo por el apellido.

— Buueno nos vemos mas tarde pa, ya vas a empezar con tu divino reclamo pero no tengo tiempo encontré tremenda pelicula que me va a salvar hasta que llegue. Te amo pa besos—.

Me puse los auriculares dándole play a la pantalla, tapando mi cuerpo hasta el cuello, Vicky mi representante estaba durmiendo al lado mío, pobre no durmió nada por estar organizando todo esto, mas allá de ser mi representante es mi mejor amiga, desde que llegue a Italia siguiendo mis locuras, la quiero tanto. 

Sentí un golpe en la cabeza y abre mis ojos apenas, logrando ver a la colorada ya levantada bajando las cosas del cajón de arriba, recién ahí me di cuenta de que me había dormido sin ver la pelicula y que ya habíamos llegado, mire a la chica enfrente de mi tentada por mi cara y por el tremendo golpe que me dio.

—Que te reis tarada, me dolió—. Sobe mi cabeza y me levante con el cuerpo adolorido comenzando a cargar la mochila y valija de mano. 

una vez ya en suelo firme, nos dirigimos a la cinta donde podíamos agarrar las valijas mas grandes, mientras trataba de despertarme seguía a Vicky caminar entre toda la gente me gusta pasar desapercibida es mas fácil moverse. Termine de despertarme con el tremendo choque de aire frío al salir del aeropuerto, puede visualizar a la colorada en llamada así que me acerque a ella como un perrito de la calle, quedándome en silencio refregando mis ojos, mi tranquilidad no duro mucho cuando siento un Choque contra mi cuerpo.

—boludaa no puedo creer que ya estas acá—. abraza a la rubia con fuerza.

—Martina nos vas a matar tarada—. Nos separamos y apreciamos la mirada de la contraria halagándola como siempre.

almas gemelas (Gian Odoguardi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora