Deseo tenerte

Cap 4 (ella es mi caos)

Héctor.

Todo va bien, no estoy forzando nada, dejo que todo fluya pero haré hasta lo imposible para que ella se enamore de mí.

En eso recibo una llamada de Fermín, agarro mi teléfono y contesto

Llamada

—Hola hermano —habla el primero

—¿como va todo?

—Me siento destrozado, no hemos podido localizar a mi hermana

—Lo siento mucho —y enserio lo sentía

—No es tu culpa tío

—¿Y qué has echo? —si supiera que si es mi culpa...

—Hoy le compré sus flores favoritas esperando para volver a verla

—¿Cuáles son sus flores favoritas?

—Los tulipanes.

—Que lindo

—Si, bro te dejo que tengo que ir a entrenar, nos vemos en el partido

Fin de la llamada

Suspire aliviado, me alegra saber que no tienen rastro de Isabella.

Escucho el sonido de mi teléfono, era un mensaje de Carlos que decía

"Tu esposa quiere unas zapatillas de punta para ballet"

Sonreí por su mensaje, le escribí a uno de mis hombres que comprara las mejores zapatillas para ella, también muchas flores de tulipanes, las más hermosas para la mujer más hermosa, luego bajé las escaleras y me dirigí al jardín

—Don Esteban —llame la atención de mi jardinero

—Dígame patrón —responde

—Hombre llámame Héctor

—Está bien joven Héctor

Sonrío.

—necesito que plante los mejores tulipanes y todo el jardín trasero sea de un camino de tulipanes, ¿entendiste? —comenté

—Claro joven Héctor ya nos ponemos a trabajar

—Espero sea lo más rápido posible

Me despedí de él y volví adentro, mi mirada se poza en Isabella, estaba en ropa interior y me doy cuenta que Carlos no la mira, me acerco y escucho su conversación

—¿qué pasa? —ella le pregunta a Carlos

—El jefe se enoja si la veo en ropa interior o en traje de baño, nadie la puede ver solo el
—responde el con los ojos tapados

Ella suelta una risita burlona

—Carlos eso es una tontería, yo no soy nada de él
—habla Isabella

Me acerco con cuidado —En realidad eres mi futura esposa y madre de mis hijos —le sonreí

—Sigue soñando —respondió

Me encogí de hombros y la miré de arriba a bajo

—Carlos, trae una botella de vino —ordeno

Carlos asiente y se retira, me quito la camisa y luego el pantalón y pude notar como Isabella se me quedaba mirando ya que solo estaba en boxer, sonreí y me quité mi reloj colocándolo en una de las sillas, me acerco y entro a la piscina

—Me encantaría que me acompañaras —hable

Ella suspira y entra a la piscina sujetándose del borde, ella se mantiene alejada, como q dos metros de distancia, la pongo nerviosa, eso lo sé y me encanta.