30 Días Otp. - SiriVene.

Día 4: De pinic/En el campo.⚘️

¿Quién no ama el aire libre?

La frescura del aire, la cálida temperatura, los lindos y relajantes sonidos de ciertos animalitos que andan por allí.

Alejado de la sociedad y la tecnología.

Los amantes de la naturaleza, de manera inconsciente, dejan el teléfono de lado y se concentran en la belleza que ese lugar tiene para ofrecer.

Estos mismos amantes nunca comprenderán porqué el resto de las personas prefieren quedarse en casa enfrente de una pantalla.

Siria invitó a salir a Venezuela. Una salida de amigos en el campo. Solo ellos dos, ¿Dónde están los demás amigos si se supone que es una salida de amigos?

Ese árabe solo planea acercarse más a él latino. Fortalecer primero su amistad antes de estar listo para saber si el corazón del sirio está en lo correcto o si solo es un capricho.

Mientras está sentado sobre el mantel en el pastoso y verde suelo, con una sonrisa miraba a él latino que corría entre las margaritas que adornaban varias partes del lugar, pero sin tocarlas ni lastimarlas. Algunas mariposas volaban al alrededor de el latino. Los ojos del árabe veían una escena muy linda protagonizada por ese latino.

Ya no sabía cuánto rato llevaba sonriente. Forzó su rostro a cambiar al semblante serio que caracteriza a Siria, aunque la sonrisa amenazaba en salir otra vez y más grande que antes.

Mordió su labio inferior con fuerza, teniendo como consecuencia el sangrado. Limpio aquellas gotas de esa sangre carmesí. Sacó su vieja libreta de dibujo y se puso a dibujar aquel amplió campo en el que ambos se encuentran. Allí se entretuvo dibujando por más de media hora.

Unas gotas de agua cayeron sobre el mantel y algunos en las piernas de Siria. Alzó la ceja algo incrédulo, todavía no es temporada de lluvia. Se supone que hoy es un día despejado y caluroso.

━━━ ¿Qué dibujas?

Gaddiel elevó su rostro, y, halló a Angel mojado de pies a cabeza; mostró una sonrisa agradable al árabe.

━━━ ¡¿Qué te pasó?! ━━━obligó saber el árabe. Dejó su libreta de lado, y tomó de los hombros a su contrario.

Examinó al venezolano. Sus brazos estaban sangrando y con algunos moretones. Su labio, nariz, y un poco de su frente también sangran.

Los pantalones están algo rotos en la rodillas, pero su sangre traspasa el jeans que carga puesto el venezolano.

¡¿En que momento pasó esto?! Se preguntó Gaddiel en su propia mente. Si tan solo el rubio estaba corriendo entre las flores enfrente de sus ojos verdes.

Siria soltó el agarre de sus hombros, tomó su bolso de allí sacó un pequeño maletín de primero auxilios.

━━━ Na'a. ━━━comentó el rubio con su dulce manera de ser.━━━ Solo vi un venado y pensé "¡Oh, es Colombia!" Traté de acercarme, resbalé y caí en un lago... Al final no era un venado real, era una estatua. Pero sigue siendo Colombia.

Siria escuchó todo su cuento, y se lo creyó porque de Venezuela todo es posible, incluso lo más estúpido.

━━━ Al menos no te pasó algo más grave aún. ━━━suspiró y volvió a sentarse.━━━ Deberías tener más cuidado. No eres un niño.

Angel se lanzó al pasto de manera intensional. Sus carcajadas leves se hicieron presentes.

━━━ Una vez me caí de un caballo en plena guerra, llevaba espada en mano. No me pidas que "sea cuidadoso" cuando es algo difícil para mi... Bueno, fue dos veces en la misma batalla.

El venezolano alzó su mano izquierda hacía su propia vista. Viendo la cicatriz que recorre desde su palma hasta más abajo de la muñeca. Hace tanto tiempo que había pasado eso.

Siria, en su parte, rodó los ojos. Tomó su libreta, cambió de página a una blanca sin usar. Tomó su lápiz, le sacó punta y volvió a trazar en aquella hoja. Dibujó otra vez el mismo campo, pero con Venezuela acostado en el suelo, así como está en ese momento.

El silencio reinó rápidamente, solo se oían los pequeños bichos presentes. Venezuela no tenía nada que comentarle a Siria, y Siria nada a Venezuela.

Gaddiel se sentía más lejos de él, que cerca. Aunque estuviesen en el mismo lugar. Además de que el árabe está sentado sobre el mantel y el sudamericano en el pasto; de una manera daba a entender que siguen siendo diferentes, y que siguen siendo lejanos. ¿Por qué no se sentó Venezuela a su lado? El corazón sensible de Siria se encogió al creer que tal vez está fallando en todo.

Tampoco tuvo el valor de comentarlo, de preguntarle a Venezuela.

Continuó dibujando, sin embargo su mano temblaba un poco provocando que el dibujo salga imperfecto y feo a la vista del pintor.

━━━ Este lugar me recuerda a mi niñez.

Susurró Venezuela, observando a una mariposa posar sobre una margarita. Su bella sonrisa captó la atención del árabe.

━━━ ¿Cómo fue tu infancia? ━━━preguntó en voz alta, sin despegar la vista de su contrario. La mariposa se alejó de allí. Venezuela mostró un rostro neutro.━━━ ¿Quieres hablar sobre eso?

━━━ No. ━━━ojalá le pagaran a Siria por todas las veces que Venezuela le dice, que, no.

Si nos ponemos en los zapatos de el rubio: aún desconfía del pelinegro y al comienzo de todo Siria no trataba de la mejor manera a él, entonces, ¿Por qué hablaría de algo personal? Su desconfianza es de un nivel medio-alto.

Venezuela es extrovertido, pero no significa que confiará en ti.

━━━ Mi infancia no fue tan sencilla. ━━━narra Siria.━━━ La crianza que obtuve me formaron lo que soy hoy en día. Pero estoy cambiando lo que siento que debe cambiar para bien. Pero siento que debo cambiar más ahora. Dejar de ser tan "culero" como dice México.

Los ojos de Venezuela abrieron al instante por esas palabras pronunciadas por el más alto de los dos. Se sentó, aún en el pasto, y miró fijamente los ojos verdes de Gaddiel.

━━━ ¿Qué estás cambiando? ¿Por quién cambias? ━━━su curiosidad iba creciendo dentro de él.

━━━ Solo estoy cambiando lo malo en mi. No trato de ser perfecto, trato de ser más "humano" ━━━miró a otro lados por los nervios de tener los ojos azules sobre él.━━━ Estoy cambiando por mi, y por...

Regresó su vista al rostro aún curioso del americano del sur. Sonrió completamente enganchado al amor, bajó su rostro en vergüenza.

━━━ Estoy cambiando por ti, Angel.