Cap 20

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–¡Cállate maldito asqueroso!—grité molesta y agarré con todas mis fuerzas el auto de Lucas y se lo arrojé.

El lanzamiento del auto fue tan fuerte que viajó a una velocidad impresionante y calló encima de Asmodeo

–JaJa.Joder—exclamó Asmodeo–¿Crees que un puto auto puede detenerme?.

Asmodeo se quitó el auto de encima y se abalanzó sobre mi con la velocidad de un meteorito no había tiempo para esquivar solamente podía enfrentar su ataque.

–¿¡Crees que puedes conmigo.Eh!?—exclamó Asmodeo mientras me agarraba por el cuello tratando de ahorcarme.

–Ojalá te pudras—contesté con enojo.

–Maldita niña—dijo Asmodeo y sacó sus garras.

Asmodeo con sus garras me araño fuertemente el abdomen casi atravesando mi piel.Los gritos llenaron el aire, un coro de dolor y furia que resonaba en la noche.

Con cada fibra de mi ser gritando en agonía, reuní la fuerza que me quedaba y golpeé su rostro. Mi puño conectó con un sonido sordo, y por un breve momento, vi una chispa de sorpresa en sus ojos. La agonía que consumía mi ser se convirtió en el catalizador de un cambio profundo. Con un grito que desgarró la noche, mi humanidad se desvaneció, dando paso a una forma más oscura y poderosa. Mi piel se endureció en escamas impenetrables, mis dedos se alargaron en garras capaces de cortar el acero, y dos cuernos retorcidos brotaron de mi frente, anunciando mi nueva identidad.

–Ahora si comenzó el juego—dijo Asmodeo con una sonrisa malévola.

Mis ojos, ahora dos pozos de fuego abisal, se clavaron en él con una promesa de venganza. Mis alas se desplegaron con un estallido de poder, oscureciendo el cielo con su envergadura.Asmodeo y yo comenzamos a luchar.

Lucas:
–¿Qué diablos pasa y que hago aquí?—pregunté confundido mientras me levantaba lentamente.

«¿Dónde está Elisa?»me pregunté.

Miré hacia al frente y Elisa estaba luchando con una extraña criatura o demonio.Tengo que ayudarla.¿Pero cómo?.Ya sé.

–¡Hey demonio horrible!—le grité a el dominio.

–¿¡Lucas!?—se sorprendió Elisa.

–Pero mira quien despertó—exclamó Asmodeo mientras se acercaba a mi rápidamente.

–¡No lo toques!—gritó Elisa tratando de detenerlo.

Asmodeo se detuvo en seco, una sonrisa burlona adornando su rostro. Parecía disfrutar del desafío que Elisa representaba.

–Interesante—murmuró.

Fin de Lucas:

Me pareció un poco extraño esa reacción de Asmodeo,está tramando algo lo presiento.De la nada Asmodeo agarró mi amuleto y se fue volando.Sin perder un segundo, extendí mis alas demoníacas y me lancé al cielo tras Asmodeo.La persecución nos llevó a través de nubes tormentosas y vientos aullantes, pero nada nos detendría.

–Está siempre fue la pieza faltante del rompecabezas—dijo Asmodeo y rompió el amuleto.

–¡Noooooo!—un grito salió profundamente de mi pecho.

De pronto se abrió un portal,que oscureció todo el cielo provocando una fuerte brisa.Era el mismo portal que había del infierno al mundo humano.

–¡Por fin!—exclamó Asmodeo.

Mi corazón latía rápidamente parecía que se me iba a salir del pecho y dentro de mi cabeza sonaba"Esto no puede acabar aquí "..."Esto no puede acabar aquí".Asmodeo me agarró de las manos y quiso meterme con él dentro del portal.

–¿Espera a dónde vas con ella?—preguntó Lucas preocupado.

–Llevarla al lugar de dónde vino—respondió Asmodeo.

–No lo harás—dijo Lucas en un tono desafiante.

–No me hagas reír,eres un maldito mortal jamás pero jamás podrás detenerme—contestó Asmodeo.

De repente Lucas le arrojó una roca a Asmodeo ,dándole un fuerte golpe en la cabeza.Asmodeo se dio la vuelta lentamente y miró a Lucas con ojos de furia.

–¿Sabes qué Elisa?—respiró Asmodeo–Hagamos un trato—dijo.

–¿Qué tipo de trato?—interrogué.

–Ya que estás tan enamorada de Lucas te dire algo.Si te quedas en el mundo terrícola lo haré explotar y tendrás que irte al infierno por obligación al infierno,sin embargo si te vas conmigo,tendrás que darle un último beso a Lucas...pero ese beso hará que se duerma y cuando despierte ya no estarás junto a el—explicó Asmodeo.

–Bueno...yo—contesté dudosa.

–Mi paciencia se agota.Decide rápido—dijo Asmodeo intranquilo.

«Si me quedó el mundo se destruirá y hay muchas personas indefensas que se merecen esto...pero por otro lado si me voy y le doy un último beso a Lucas el vivirá al igual que todas las personas.Esto lo haré por ti Lucas»pensé.

–Está bien.Que este sea el último beso—dije.

Me acerqué a Lucas, sus ojos llenos de lágrimas que no quería dejar caer. Con cada paso que daba, sentía el peso de su decisión, como si cada grano de arena del reloj de nuestro destino se deslizara a través de sus dedos.

–Lucas, hay algo que debo decirte—susurró Elisa, su voz apenas audible sobre el viento que comenzaba a levantarse.

Lucas me miró, con confusión y preocupación en su rostro.

–¿Qué sucede, Elisa? ¿Estás bien?

Ella asintió, forzando una sonrisa.
–Sí, pero hay algo que debo hacer, y necesito que sepas que siempre te amaré, pase lo que pase.

Lucas extendió su mano, pero yo retrocedí ligeramente.

–Es solo un beso—dije, intentando convencerse a sí misma tanto como a él.

Cerré los ojos y me incliné hacia Lucas, nuestros labios se encontraron en un beso que era a la vez una despedida y una promesa. Un beso que sellaba su destino y el de todos los que amaba.

Cuando nuestros labios se separaron, Lucas cayó en un sueño profundo, su cuerpo inmóvil en el suelo. Me arrodillé junto a él, con mi corazón roto en mil pedazos.

–Lo siento, Lucas. Esto es por el bien de todos—susurró, antes de volverse hacia Asmodeo, quien la esperaba con una sonrisa triunfante.

–Vamos, Elisa. Es hora de cumplir tu parte del trato—dijo Asmodeo, extendiendo su mano hacia ella.

Con una última mirada hacia Lucas, Elisa tomó la mano de Asmodeo y juntos desaparecieron en la oscuridad, dejando atrás un mundo que, gracias a su sacrificio, seguiría girando.

En el infierno:

–¡Señor por favor cálmese!—exclamó un guardia del diablo.

–¿Dónde carajos está mi hija?—gritó el diablo.

De pronto me interrumpió uno de mis guardias.

La hija del diablo se enamoró?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora