La corona Danesa ha sido puesta en Jaque por culpa de Federico. Una Reina tomando decisiones drásticas y una futura Reina queriendo huir, el príncipe heredero tendrá que demostrar que es capaz de hacerlo bien por una vez en su vida.
"At elske dig er den smukkeste følelse, jeg nogensinde har oplevet. Et liv ville ikke være nok for mig til at kunne bevise det for dig." Federico a Mary (Amarte es el sentimiento mas bonito que he experimentado nunca. No me bastará una vida para demostrártelo)
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Anteriormente:
Ella que hacía presencia en su despacho y lo miraba alzando la ceja, se levanto del asiento y con una de las fotografías la arrincono contra la puerta.
F: ¿Qué demonios significa esto?
Ella miro la foto y sonrió con autosuficiencia- un recuerdo muy bonito, casi tanto, como el que me llego a mi al movil casi un mes atrás- golpeo la puerta y la beso, mordiendo sus labios, ella tiro del pelo de él y le devolvió los mordiscos....
En la actualidad:
Puso las manos en el pecho de Federico y lo separo de ella, ambos se miraban con rabia y deseo, sobretodo, deseo. Sus respiraciones erráticas por los besos y mordiscos, la adrenalina en sus venas, la rabia de él y ese atisbo de victoria en la mirada de ella.
F: Esto ha sido cosa tuya, ¿no es así? M: Y si lo fuera, ¿qué te importa? F: Eres mi mujer, miiii- imprimió intensidad en aquella posesión- mujer, cosa que se te está olvidando, por lo que parece
Mary soltó una carcajada irónica y alzo la ceja mirándole- ohhh querido, no quieres tener está conversación, no te conviene-, Federico sintió aún más rabia y la volvió a arrinconar contra la puerta, besándola con lujuria, deseo, pasión, toda una explosión de sentimientos, deslizo las manos hacia la parte trasera del vestido de Mary, bajando se cremallera y está a su vez, en un arranque pasional, le abría la camisa de Federico haciendo saltar todos los botones, llegaron dando tumbos hasta el sofá del despacho, sin dejar de besarse y morderse los labios, completamente envueltos en la pasión y el deseo.
Federico entro dentro de ella de una sola vez y ella clavo las uñas en la espalda de su marido- muévete-, fue casi una orden lo que salió de los labios de ella pero él negó, se quedo clavado dentro de ella, queriendo notar aquella sensación de sentirse, Mary no buscaba aquello, no buscaba amor, solo sexo, no podía perdonar aunque lo amara y en su cabeza solo estaba el sentimiento de venganza, lo empujo para quedar encima y comenzó a moverse a un ritmo frenético encima de su marido, dando pequeños saltitos que a ambos los hacían enloquecer.
Acabo derramándose en su interior después de hacerla llegar a ella a dos orgasmos previos y cuando fue a besarla, ella giro el rostro y se separó de su cuerpo, sin poder evitar el gemido del abandono.
M: Es solo sexo, no lo olvides
Casi se arrepintió de sus palabras al notar la sombra de dolor en aquellos ojos azul grisáceo que amaba con locura pero no iba a flaquear. Se levantó con las piernas temblándole y se puso el vestido. Él se quedo en el sofá, contemplando como la mujer de su vida, cada día, estaba mas lejos de él.
