Tanjiro sin esperarlo recibe una propuesta indecente de la pilar del amor, Mitsuri.
Ocultara por siempre sus sentimientos o se los revelara.
Solo hay una cosa segura...
Su vida se hizo más complicada
Mitsuri y Tanjiro compartían un delicioso Sakuramochi mientras conversaban animadamente bajo la sombra de un cerezo en flor. La suave brisa primaveral mecía sus cabellos mientras el sol filtraba sus rayos dorados a través de las flores rosadas que bailaban sobre sus cabezas.
A pesar de la incomodidad inicial, habían logrado relajarse y disfrutar de su tiempo juntos como "novios de práctica". Se reían de anécdotas, hablaban sobre sus misiones recientes y compartían sus gustos personales, creando una atmósfera cálida y amigable a su alrededor.
Kanroji observó al joven detenidamente, sus ojos ámbar brillaban con curiosidad mientras seguía el movimiento de los palillos de Tanjiro. Al verlo comer con gusto, se le ocurrió una idea. Aunque dudó un poco en hacerlo, algo ruborizada volteó a ver al pelirrojo.
-"Tanjiro-kun." —Habló llamando la atención del chico con voz suave y melodiosa.
-"¿Pasa algo, Mitsuri-san?" —Preguntó Tanjiro, mostrando una sonrisa amable.
La vio algo nerviosa y ruborizada, al mismo tiempo jugando con su cabello. Finalmente, ella lo miró a los ojos decidida, tomó sus palillos y tomó un trozo de Sakuramochi, acercándolo al ojirojo con un gesto delicado y femenino.
-"Di ahh." —Le dijo ella, su tono de voz revelando su ligera timidez y emoción.
Tanjiro quedó con los ojos ligeramente sorprendidos y una sonrisa más amplia, su cerebro finalmente procesó la situación y su corazón latió un poco más rápido ante la cercanía de Mitsuri.
Abrió la boca y aceptó el bocado que Mitsuri le ofrecía con elegancia. El dulce sabor del Sakuramochi llenó su boca, y el gesto de la chica hizo que su corazón latiera aún más rápido, sintiendo una conexión especial en ese momento.
Mitsuri también sonrió al ver la reacción de Tanjiro y se sintió un poco más relajada al ver que él aceptaba su gesto con alegría. Compartieron más bocados de Sakuramochi de esa manera, disfrutando de la comida y de la compañía del otro bajo la sombra de los cerezos en flor, creando una imagen idílica y tranquila.
-"¡¿QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ?!" —Gritó alguien, rompiendo la paz del momento.
Hace 10 minutos...
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Zenitsu había vuelto recién de una misión, que por suerte fue corta y sin sobresaltos. Decidió dar un paseo por un pueblo cercano para disfrutar del ambiente tranquilo y alejarse un poco del ajetreo de la vida como cazador de demonios.
Después de hacer algunas compras innecesarias, gracias a su buen sentido de audición, logró escuchar una voz familiar entre el bullicio del mercado. Intrigado, se dirigió hacia la fuente de esa voz, siguiendo el sonido como un gato curioso.
Sigilosamente se acercó, moviéndose entre la multitud con agilidad. Cuando llegó lo suficientemente cerca, sus ojos se abrieron como platos al ver la escena ante él. Una sonrisa de asombro y confusión se formó en su rostro, mientras su mente intentaba procesar lo que veía.
