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Capítulo 29.1 - Reunión (4)

¿Cuáles son algunos ejemplos de cuando el tiempo parece pasar rápidamente? Cada persona tiene un criterio diferente, pero hay dos casos principales.

El primero es cuando haces algo que te gusta o te divierte. El dicho "el tiempo vuela cuando te diviertes" es cierto en el sentido de que la gente pierde la noción del tiempo cuando está absorta en algo. Más tarde pueden arrepentirse y culpar a la falta de tiempo.

El segundo caso es cuando alguien está atrapado en una rutina diaria. Este caso es ligeramente diferente. El proceso es tedioso, pero cuando miras atrás, te das cuenta de lo rápido que ha pasado el tiempo.

Y yo estoy experimentando los dos fenómenos mencionados. Las clases que me apetecía escuchar eran amenas y el tiempo se me pasaba volando, mientras que las aburridas se me pasaban volando porque estaba demasiado aturdido.

Como resultado, parece que fue ayer cuando me compré el traje con mi hermana, pero ya era viernes. No tomé economía, la última clase del viernes, así que todas mis clases terminaron a las 3 en punto.

"La clase de hoy termina aquí. Espero que lo paséis bien en la reunión de mañana".

Cuando el profesor de pelo corto se inclinó cortésmente, la clase estalló en aplausos. Yo también respondí con un fuerte aplauso a su excelente conferencia.

La clase que acababa de escuchar, "Estudios militares", no era más que una clase para obtener créditos, pero el profesor la explicaba tan bien que, naturalmente, me interesé por ella. Cuando hice preguntas basadas en mis conocimientos previos de historia de la vida, el profesor explicó las cosas de una manera que yo podía entender.

"¿Y el alumno Isaac?"

"¿Sí?"

Cuando los aplausos se hicieron más fuertes, el profesor pronunció mi nombre. En ese momento dejé de aplaudir e hice una pausa.

El profesor mantuvo su singular expresión severa y habló con un tono que parecía enfatizar: "Como dije antes, las batallas navales en el mar son completamente diferentes de la guerra terrestre. Como dijo el estudiante, incluso si hay una "encarnación" involucrada en la batalla, el poder que proviene de la abrumadora diferencia en el físico no puede ser superado."

"Ah, sí."

"Pero era una pregunta bastante buena. Cómo utilizar únicamente la estrategia de mando para dar la vuelta a una situación de batalla desfavorable en ausencia de tropas armadas con una fuerza notable. Sin embargo, un comandante sabio no habría ido a esa batalla en primer lugar. Pues bien..."

El profesor de ciencias militares dio una explicación concisa y abandonó el aula. Incluso después de que abandonara el aula, no pude evitar sentirme aturdido.

¿Cómo ganaron la batalla de Myeongnyang?[1]", me preguntaba.

El tema sobre el que pregunté durante la clase estaba relacionado con la "Batalla de Myeongnyang". Era la hazaña del almirante Yi Sun-sin y un hecho histórico que nadie en Corea podía desconocer. Por supuesto, no expliqué el contexto histórico en detalle, me limité a adaptar una versión de la historia para que encajara en este mundo. Incluso en la batalla de Myeongnyang, la armada de Joseon tenía poco personal, pero las especificaciones eran excelentes, así que no omití nada. Para esta clase, me senté en silencio a escuchar las conferencias durante dos semanas antes de finalmente hacer esta pregunta hoy.

El profesor de ciencia militar, sin embargo, la cortó en seco y concluyó Es posible causar un daño significativo al oponente, pero es 'imposible' ganar, incluso si el comandante es una 'encarnación' elegida de Dios.

¿Hice una analogía demasiado extraña? Si no es así...'

Aunque la Tierra y este mundo sean diferentes, es imposible discernir si la victoria de la armada de Joseon fue una casualidad o si la existencia del propio almirante Yi Sun-sin estaba más allá del sentido común.

La situación original según los historiadores de la Tierra era incluso peor que la situación de las fuerzas navales que describí al profesor. Aunque mejoré un poco los antecedentes y la situación por si acaso, el profesor seguía concluyendo que era imposible.

"¿Por qué estás tan serio? Una batalla naval como la que has descrito ni siquiera tiene sentido para mí".

Mientras yo agonizaba pensando en cómo representarlo de una forma más realista para que lo entendieran los expertos de este mundo, Marie, que estaba sentada a mi lado, soltó una risita. Dejé a un lado mis pensamientos y la miré. Marie levantó una comisura de los labios, poniendo una cara que me decía que quería que dijera algo más sensato.

"...¿Tú también lo crees?".

"Por supuesto. Con sólo 12 barcos, ¿cómo se puede derrotar a una armada de más de 100 barcos? Si fuera yo, le habría cortado la cabeza al comandante que planeaba luchar así. Es mejor conservar esa fuerza y combinarla con otras. En ese caso, no habrá muertes inútiles".

Y sin embargo, según la historia coreana, el almirante Yi Sun-sin salió victorioso. Fue medio abandonado por el Rey y Won-gyun arruinó el ejército que había construido con sus propias manos. Pero estas palabras nunca salieron de mi boca. Simplemente me reí como un idiota y le di la razón.

"Jajaja... Como era de esperar, ¿verdad? No tiene sentido, ¿verdad?".

"A veces tienes un lado friki". Marie se levantó de su asiento al decirlo. Yo también me levanté de mi asiento para volver al dormitorio.

"¿Vas a volver?" Rina, que estaba sentada detrás de nosotras, preguntó en voz baja mientras nos levantábamos de nuestros asientos. También, Cecily, por cierto, estaba sentada al lado de Rina.

Originalmente, Cecily había planeado sentarse lejos de Rina hasta que terminara de leer el 8º volumen de la Saga de Xenon, pero ya no era así. Creo que ya leyó el 8º volumen.

"Vamos, ya sabes que Isaac y yo no estudiamos economía. ¿Para qué molestarse en preguntar?". Mientras tanto, Marie respondió a Rina con un tono áspero. Ya lo había notado antes, pero Marie se sentía cada vez más incómoda con Rina con el paso del tiempo. Antes se mostraba recelosa, pero ahora era abiertamente dura.

Rina, en cambio, se limitó a encogerse de hombros. La pequeña sonrisa en sus labios indicaba que no le preocupaba el comportamiento de Marie.

"Sólo estoy decepcionada. Quería hablar un poco más con vosotras".

"¿Puedes dejar de decir cosas que no sientes? Vámonos, Isaac".

"Eh... sí."

"Los veo mañana en la reunión". Antes de que pudiera continuar, Cecily sonrió alegremente y me saludó. Como hechizado por su saludo, le devolví el saludo y me apresuré a seguir a Marie. No olvidé saludar a Rina mientras seguía a Marie. La sonrisa de Rina se ensanchó cuando la saludé con una inclinación de cabeza.

Esa sonrisa me inquietó, pero conseguí quitármela de encima.

[1] En la batalla de Myeongnyang, el 26 de octubre de 1597, la armada del reino coreano de Joseon, dirigida por el almirante Yi Sun-sin, luchó contra la armada japonesa en el estrecho de Myeongnyang, cerca de la isla de Jindo, en el extremo suroeste de la península coreana.

Con sólo 13 barcos tras la desastrosa derrota del almirante Won Gyun en la batalla de Chilchonryang, el almirante Yi mantuvo el estrecho como "última batalla" contra la armada japonesa, que navegaba para apoyar el avance de su ejército terrestre hacia la capital de Joseon, Hanyang (la actual Seúl).

- Fin de la Parte 1

Cómo Vivir Como Escritor En Un Mundo De FantasíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora