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(Teniendo sexo)
- Harry es un hombre el cuál no ha tenido contacto con ninguna mujer por un largo tiempo. Por lo que estar dentro de alguien de nuevo hará que él pierda todos sus sentidos de inmediato.
- Si eres una chica virgen olvídate de la gentilidad con él, no le va a importar en lo absoluto.
- Siempre es brusco cuando folla, los sonidos de sus embestidas resuenan en cada lugar de la mina. A veces suele pellizcar tus pezones para causarte dolor, eso le encanta, pero siempre se mueve de la forma correcta para hacerte gritar su nombre.
- No es acostumbrado a quitarse la máscara frente a ninguna persona, pero si tú misma se lo pides Harry lo hará encantado. Suele morderte o dejarte chupones por el cuello, en esas cosas siempre es agresivo. Esta vez no es para causarte dolor, si no para dejarte marcada y que otros las vean.
- Te ha follado en cada lugar de la mina, pero su sitio favorito para hacerlo es el subsuelo dónde llevan la mercancía de la mina. Un lugar solitario, con poca luz. El lugar más alejado para que nadie pueda escuchar tus gritos.
- Le fascina que tomes el control y que lo montes, rara vez te deja tomar el control, normalmente él es el que manda. Pero tampoco pienses en negarle el orgasmo, si lo llegases a hacer Harry no dudaría en follarte hasta el punto en el que te desmayes.
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(Celos)
- A veces no demuestra sus celos, simplemente se aguanta. Cualquier chico que se acerque a ti o te dirija la palabra, inmediatamente sería objetivo de Harry.
- No te sorprendas si algún día tus amigos te llaman asustados diciendo que en la entrada de su casa encontraron una caja de bombones con un corazón humano adentro. Esa sería la primera advertencia de Harry para que se alejen de ti.
- El día que te conoció hizo de todo para poder conquistarte. Pasó mucho tiempo hasta que le dejaste de tener miedo y lo aceptaste. Estaba claro que no iba a permitir que ningún idiota se te acerque y te aleje de su lado.
- ¿Deseas estar un rato a solas y tener tiempo para ti misma? Adelante, pero acostúmbrate a que Harry te persiga a todas partes para asegurarse de que nadie se pueda acercar a ti.
- Si llegas a desobedecerlo en verte con otro hombre que no sea él, prepárate para soportar todos los orgasmos que puedas tener en toda la noche.
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(Obsequios)
- El día en el que te volviste su novia tu vida se llenó de regalos constantes por parte de él. Siempre que lo ibas a visitar en la mina ya te tenía preparadas muchas piedras preciosas que él mismo había extraído de lo más profundo de la mina.
- No era muy bueno haciendo regalos a mano, las pulseras hechas de piedritas brillantes que él te daba siempre se les deshacian el torpe nudo que Harry había hecho. Pero no era problema, tú simplemente las arreglabas y las volvías a colocar en tu muñeca con mucho cariño.
- A la hora de irte a dormir siempre escuchabas la puerta de tu casa siendo golpeada. Cuando bajabas a ver quién era simplemente encontrabas una caja de bombones, y no contenía chocolates exactamente. Siempre era lo mismo de siempre, corazones humanos con una notita que decía "te amo". Harry te sacaba unos buenos sustos con sus regalos, con suerte y a veces te tocaba una caja de bombones normales.
- Cómo vivías sola y Harry siempre se la pasaba en la mina él se sentía mal por hacerte pasar momentos de soledad. Por lo que una noche al volver a tu casa después de un duro día te llevaste la sorpresa de ver una rata en tu cama, con un lazo alrededor de ella y una pequeña carta que decía: " La encontré en la mina, es para tí, te amo."
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(Si estuvieras embarazada)
- Gracias a todas esas innumerables sesiones de sexo que ustedes dos tenían en la mina, Harry te dejó embarazada. Cuando le diste la noticia no hubo reacción por parte de él, pero te diste cuenta que estaba feliz cuando tomó tu mano suavemente y la entrelazó con la suya.
- Harry estaba tan feliz y emocionado, siempre te acariciaba la pancita con cuidado. En algunas ocasiones se quitaba la máscara y acercaba su oído a tu vientre para escuchar al bebé moviéndose dentro de tí, simplemente lo ponía de buen humor.
- Estaría cuidándote las 24 horas del día, asegurándose que no te hicieras daño en la mina, cada vez que querías ir a pasear en los subsuelos de la mina él no lo permitía. Te ponía a dormir junto a él o te daba piedras cubiertas de tierra para que las limpiaras, con tal de tenerte ocupada o distraída..
- Chico o chica que entrara a la mina terminaría con un pico enterrado en su cráneo. Nadie podía entrar a molestar mientras pasabas tiempo con él. Harry no quería que te estresaras por culpa de otras personas, él sabía que eso no le haría bien al bebé.
- Extrañamente Harry siempre llegaba con ositos de peluche o con juguetes para bebé. Te preguntabas de dónde sacaba tanto juguete, era extraño. Pronto lo supiste cuando estabas en tu casa y en las noticias decían: "Extraño hombre vestido de minero roba jueguetes de los bebés de madres indefensas."
