𝟐𝟓

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Por la mañana, Yeonjun despertó con algo de fiebre, y por más que Soobin le dio la medicina que necesitaba, no le hizo mucho efecto.

El Beta suspiró de forma cansada, y comenzó a sentirse mal, estaba sentado en el borde de la cama, y con Yeonjun recostado en esta.

— Hey...— El Omega alzó su manito hacia él hasta que Soobin la tomó.— No estoy tan mal, Bin.—dijo, con una sonrisa.

El pelirrojo sonrió mínimamente y tomó su mano, entrelazando sus dedos.

— Vas a estar mejor pronto, Junnie.

— Lo dudo. — murmuró el pelinegro.

Escucharon el sonido de la puerta al ser golpeada y Soobin se levantó a abrir, dejando a Yeonjun acurrucado en su nido.

Beomgyu entró a la casa ni bien el pelirrojo abrió la puerta.

— Buenos días, señor Choi, ¿Qué tal?— dijo, con una sonrisa amplia que a Soobin le pareció algo sospechosa, e hizo que el rubor subiera a sus mejillas de forma furiosa.

En verdad, Beomgyu parecía que sabía todos sus secretos, que leía la mente o algo, y el asentimiento que le dedicó, como de aprobación lo puso aún más incómodo.

El castaño rio un poco y fue directo al cuarto de Yeonjun.

— ¿Qué le hiciste al bebé para que esté así? — le preguntó.— Mamá me llamó temprano para decirme algo de ti.— dijo, sentándose en el sillón de la ventana, Yeonjun lo miró con una sonrisa y un ligero rubor.

La madre de Beomgyu era una "Bruja" como ella prefería ser llamada, leía las manos y el tarot, solía tener sueños premonitorios y a veces podía leer tu futuro con verte a los ojos, lejos de dar miedo, era muy amorosa y siempre había sido muy buena con él, lista para dar consejos siempre que necesitara una guía, le tenía mucha confianza.

— Dime qué dijo.— pidió Yeonjun.

— Dijo que "Un suave pájaro está revoloteando en el corazón de Yeonjun"— Beomgyu sonrió ampliamente. ¿Es el pájaro que estoy pensando?

—No... Es un conejito.— dijo su sonrisa era tonta y el rubor en sus mejillas era fuerte.

Beomgyu actuó sorprendido, pero ya lo sabía.

— Gyu... Es mucho, es mucho más de lo que jamás pensé que podría pasarme. — dijo, estaba emocionado, se sentó en la cama, para expresarse mejor con todos los gestos de sus manos.— Empezó con los sueños, porque soñábamos lo mismo, todas las noche... No, no, empezó antes, cuando me di cuenta que.... No, no, en realidad pasó... Cuando nos vimos por primera vez y mi lobo lo reconoció y de ahí todo fue más y más grande y... Hay unos tipos que se llaman Neul y Bich-

— Bitch.— dijo Beomgyu, para molestar, alzando una ceja.

— Bitch, perra, sí, como tu madre.

— ¡Yeonjun!

— Mis respetos a la señora Choi. —dijo, llevando una mano sobre su corazón, ambos rieron.

— Continua contando, vamos. — Beomgyu quería que lo dijera en voz alta todo eso que él ya sabía, de nuevo, todo lo que sentía y creía de hacia realidad y eso le encantaba.

— Bueno, bueno... Y estos dos somos nosotros, pero del pasado, son nuestras vidas pasadas y también sus vidas eran los sueños, los sueños eran sus memorias, nuestras memorias.... Ahhh, ¿Me hago entender? — El castaño asintió.

Beomgyu quería gritar un gran "Te lo dije", pero tenía que ser para Soobin, Yeonjun no.

— Y somos predestinados, y... Mi destino es muy... Feo, y en él está Soobin y también HueningKai... Y siguiendo el destino yo por fin me uniría a él, a mi destino y viviría.

𝐎𝐮𝐫 𝐋𝐚𝐬𝐭 𝐝𝐚𝐲𝐬 || 𝐒𝐨𝐨𝐣𝐮𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora