Transmigre a la ex del protagonista

007

Era mejor de lo que creía, fue fácil ganar los primeros 1000 seguidores en Youtube sin siquiera haber revelado su identidad como una Moretti.

Suspiro, mirando el piano frente a ella.

Antes le encantaba la música sí, pero solo escucharla.

Por lo menos recuerdo muchas canciones buenas que seguro me ayudarán aquí.

_Tía Gwen.

La más pequeña de la casa asomo su cabeza por la puerta con una sonrisa tímida.

_Hola Calista.
_Te escuché... Y me preguntaba si... ¿Podrías tocar algo para mí?

Hizo la pregunta tan rápido que terminó trabandose

_Ven aquí.

La niña corrió hasta estar al lado de Gwen la pelinegra la ayudo a sentarse en sus piernas.

_¿Porqué no estás en el colegio?
_Yo... Le dije a mis papás que me dolía la panza, lo siento.

Gwen dejo escapar una risa, eso era un clásico en la vida de cada niño.

_no te preocupes, soy tu tía genial después de todo.
_¿De verdad?
_claro, tus secretos estarán a salvo conmigo. ¿Qué canción quieres escuchar?
_um, el abuelo Henri dijo que tú haces música muy linda... ¿Puedo escuchar?
_supongo que tengo una que te gustaría princesa.

La niña se sonrojo y apartó su mirada de la mayor con timidez, prefirió mirar las manos de esta juguetear con las teclas.

Gwen empezó a cantar Heavenly Kind Of State Of Mind de Lewis Capaldi.

La niña escuchaba fascinada por la letra y la música.

Cuando Gwen terminó Calista se giro a abrazarla.

_esta genial tía, me encanta ¿Es mía?
_Claro enana, para tí.

Le dijo con una pequeña sonrisa.

_Eres la mejor, le diré a mi papá Mar

Salió corriendo de la habitación saludando a Lorenzo que al parecer llevaba rato en la puerta.

_Gwendolyn ¿Porqué no ha habido avances en tu recuperación?
_¿Qué?
_Tienes dos meses para pararte de esa estúpida silla Gwendolyn.
_no sé si lo notaste pero no es algo que controlo.
_Más te vale que lo empieces a controlar.

El mayor se fue de la habitación ocultando una pequeña sonrisa por haber escuchado la música de su hija.

_Maldito capullo de mierda.

✨

_hija, Gwen, basta cariño.
_esta bien.

Respiro calmandose.

_quiero que preparen mi viaje para USA.
_¿Qué? Chiquita, aún no puedes caminar, no irás a ningún lado, deja que mamá te cuide.
_no soy una niña, Nana, alista mis cosas, quiero irme en la mañana.
_¿Quieres ir tras el?
_no, el idiota no tiene nada que ver Madre, necesito salir de esta casa me estoy asfixiando.

_¿Es por tu papá? Puedo hablar con el amor, no te vayas.
_Mamá... Está es mi decisión, no se trata de nadie más. Prometo llamarte ¿Vale? Además Nana vendrá conmigo.
_Santa
_La cuidare señora.
_Por favor, que coma bien y despierte temprano.
_Como diga señora.

El viaje a USA fue tranquilo, la pelinegra quería hacer lo que iba a hacer rápido para quitarse a Lorenzo de encima.

El chófer la ayudo a bajar del auto dejándola sobre la silla de ruedas estaban dentro de la los terrenos de la casa que tenía en USA.

_Nana toca para que te abran la puerta, quiero comer.

La mayor se acercó y tocó el timbre minutos después una mujer con ropa de empleada doméstica abrió la puerta con una sonrisa que se borró al ver a Gwen algo que la Nana de la misma no pasó por alto.

_S-Señora, volvió.
_Sal del caminó.

Hablo simplemente mientras el chófer empujaba su silla ayudándola a entrar.

_pe-ro señora, el señor y la señorita están en una comida importante con sus familiares y usted...
_¿Enserio? No me importa, está es mi casa.

Y no era mentira, se aseguro de que todo estaba a su nombre antes de siquiera pensar en acercarse, investigo la vida de Gwen antes de que ella tomara control de su cuerpo.

Al parecer  ese tipo no era más que el chófer de Gwen al principio y la chica aunque enamorada no fue tan estúpida como para casarse sin firmar un acuerdo de separación de bienes.

Muy bien por ella.

_Marco, pídeles que se vallan al terminar, no sé porque sigue viviendo aquí el muy idiota.