Cada día que pasaba parecía peor. Si no fue por Aoom, fue por ella. Hace días, la doctora la invito a un baile que el hospital celebra cada año y seria en unas pocas semanas, y sinceramente, ella no estaba muy entusiasmada con eso. Parecía una trampa, y Meena no quería quedarse para averiguar si tenía razón o no. Sin embargo sabía que Aoom debía estar allí y, como era su deber, debía estar presente. Y como prometió, la protegería hasta que ya no pudiera hacerlo. Pero Signal y Lawan tenían otros planes para ella con respecto al evento.
♫ 'Entonces, si estás sola, sabes que estoy aquí esperándote...' ♫
Y allí estaba un vez más frente a las puertas de la oficina de Aoom, quien se reunió con otros colegas médicos de otros hospitales. Era normal en este punto que Aoom estuviera bastante ocupada, incluso para retirarse tarde en la noche, pero no importaba, cuanto más erráticas eran las horas de trabajo, más difícil era que alguien la rastreara. Después de casi una hora, todos se fueron y solo la doctora permaneció en la oficina. Sin embargo, Meena nunca entro hasta que la medico la invito a entrar, y duro poco más de veinte minutos en espera.
♫...No me iré de aquí sin ti...♫
Para pasar el tiempo, tomo sus auriculares y coloco música en su teléfono, moviendo el pie al ritmo de la canción y cantando para sí misma en voz baja o tarareando la letra. No podía esperar a que fuera domingo, el cumpleaños de Tia estaba cerca y decidieron celebrarlo junto con Nawat esa misma noche. Y tenía que pensar en algo para darle a su amiga, pero sus gustos eran un poco excéntricos, tal vez iría a una tienda electrónica para encontrar algo que se adaptara a la personalidad de su amiga.
♫...¿Escuchas lo que digo? Aun no soy tan valiente... una vez más, en silencio me voy...♫
Una mano pálida se deslizo hasta su oreja, tomando uno de los auriculares y susurrando. El aliento caliente chocando con su piel.
"¿Que estas escuchando?"
"¡Pero-! ¡Mierda!" Meena cerro la boca con ambas manos, y Aoom se rio cuando tomó por sorpresa a ser guardaespaldas. Afortunadamente, no había nadie cerca para escuchar su maldición. "Dios! ¡Doctora, no vuelva a hacer eso nunca más!"
"Aw, vamos. ¡Tenia curiosidad por saber lo que estas escuchando!" Se estaba riendo, e incluso cuando no era divertido para Meena quien estaba un poco asustada, escuchar a Aoom reír y ver su sonrisa valía la pena tener un ataque al corazón. "¿Que estas escuchando?"
"Uhm... Es Loona..."
"¿De verdad? Pensé que solo escuchabas rock pesado" Otra ronda de risas adictivas que Meena estaba dispuesta a disfrutar.
"No siempre es así, me gusta Loona. Es agradable..."
"Entra. Estoy arreglando algunas cosas antes de que podamos irnos a casa"
"Por supuesto"
Meena entro cuidadosamente, se quitó los auriculares y los guardo en el bolsillo interior de su chaqueta. Oyó que la puerta se cerraba detrás de ella y que la cerradura hacia clic. Sorprendida, se volvió hacia la puerta, y la sonrisa cómplice de Aoom lo dijo todo. La medico se acercó a ella, haciendo que retrocediera hasta que las piernas de Meena golpearon el borde del escritorio. Aoom se echó a reír, antes de tomar las solapas de dos botones y acercar a la chica para que se derritiera en un beso férvido. Su mejor parte del día.
Meena respondió de la misma manera, tomando a Aoom por los muslos, levantándola hasta que la sentó en el amplio escritorio de madera. Ambas sabían que lo que estaban haciendo estaba más que prohibido, tanto del lado de Meena como del de Aoom. Pero aun así, tomarla en sus brazos, acariciar cada parte de su cuerpo, besar sus tentadores labios, era la cosa más adictiva del mundo. Aoom parecía sentir lo mismo, y Meena no estaba dispuesta a perdérselo.
ESTÁS LEYENDO
Uno, Bodyguard [MeenBabe]
FanfictionAoom Thaweeporn es una reconocida doctora, ganadora de dos premios nobel de medicina y propietaria de varios procedimientos médicos, tratamientos y medicamentos patentados a la edad de 27 años. Cuando alguien envía a matarla, su esposo contrata a un...