Introvertido | Carlos Zambrano X Luis Abram

C6| Saliendo contigo

- ¡Luis! - exclamó Carlos llamando a su amigo bajando la ventana del conductor

Al oír su nombre se detuvo en seco, creyendo inicialmente que se trataba a de él, pero creyendo que estaba equivocado decidió continuar con su trayecto, aunque luego escucho lo que definitivamente haría voltear su mirada.

- ¡Luti! 

Ese apodo era único para él, como el "Paolin-lin", no habría alguien en otro lado del mundo que se refiriera a otra persona con ese apelativo. Giro su mirada para ver de quién se trataba y no pudo ser más que la única persona que dijera eso.

- ¡Carlos! ¡Qué sorpresa verte aquí! - respondió Luis al verlo directamente y acercarse a su auto

- Sí, qué coincidencia encontrarte por aquí - se sentía el nerviosismo en Carlos como algo tangible cada vez más que Luis se asomaba a su ventana

La niña no entendía a detalle lo que estaba pasando en ese momento, si bien conocía a diversos amigos de su papá, los cuales aludía como "tío", no reconocía quién era Abram. Así que como una forma de interferir decidió preguntar a su progenitor.

- ¿Papá, quién es él? - Ursula

Para Carlos, que su hija le pregunte eso, tenía una fuerte interpretación, pues tanto ella y Luis representaban las dos cosas que él deseaba infinitamente, aunque no podía estar junto a los dos.

- Ursula, este es un viejo amigo mío, se llama Luis - respondió Zambrano a la duda de su hija

- ¡Hola, Luis! Soy Ursula, la princesa de papá  - saludo la niña con una sonrisa simpática ida ininterrumpidamente a Luis

- ¡Hola, princesa Ursula! Es un placer conocerte, creo que no son mis modales - respondió Abram

Zambrano sentía una oleada de nervios tenerlos a ambos juntos en una situación tan repentina, no sabía como quebrar esa situación. Hasta que una idea ilumino su mente.

- Chicos ¿Qué tal si vamos a un Starbucks juntos? Para comenzar este día tan gris - sugirió Carlos

- ¡Por supuesto! Sería genial - siguió Luis a la idea de Carlos

- No estaría mal - también estuvo conforme Ursula 

Carlos sonríe al ver la aceptación de su hija, invita a Luis a subir a su auto, aunque este estaba por abrir uno de los asientos traseros, Zambrano le dijo que era mejor que se siente en el del copiloto, pues sostuvo la idea que con eso el auto se acondicionaría un poco más cálido.

- Jaja, siempre con tus ocurrencias Carlos - siguió Abram abriendo la puerta del copiloto

- Siempre, ya tú lo sabes Luti - dijo Zambrano con alegría volviendo a encender su vehículo

Entonces los tres iban en camino al Starbucks más cercano a su disposición, en medio del viaje no faltaron risas al instante de recordar anécdotas o chistes que los hombres decían para hacer reír a la niña. Al llegar al establecimiento, el Káiser opto por decirles a su hija y Luis que vayan avanzando, pues tendría que estacionar el auto y no quería de se quedaran sin mesa.

Luis y Ursula caminaron juntos para entrar dentro del local. Al ya entrar Ursula con la mirada supo qué mesa era la indicada, una al lado del ventanal que daba con un pequeño jardín que tenía hacia la calle.

- Luis, esa tiene que ser nuestra mesa - dijo Ursula tomando a Luis de su brazo y señalando el lugar

- Mmm, tienes un buen gusto por el ambiente Ursula - respondió Luis

Entonces ambos fueron a ocupar la mesa, fue suerte que no estuviese lleno como otros establecimientos a esa hora, ya Abram conocía como las personas se alborotaban por solo tener un poco de café en sus mañanas, como lo es él, aunque otros optan por bebidas más nutritivas.