Los días pasaron desde que llegamos a la nueva ciudad y al día siguiente ya tenía que ir a rellenar mi matrícula junto a mi padre. Estaba algo nerviosa, no me gustaba "ser la nueva", pero en fin. Al día siguiente desperté más cansada de lo normal, fui al baño para lavarme la cara, dientes y ponerme las lentillas y luego me volví a dirigir a mi habitación a cambiarme rápidamente con una camiseta de tirantes negra y rosa con unos pantalones vaqueros cortos y oscuros.
Mi padre ya me estaba esperando en el coche, fuimos directamente al instituto, ni siquiera me dio tiempo de desayunar, pero mi padre me prometió llevarme a una pequeña cafetería que había cerca del instituto.
Al llegar en frente del instituto no pude evitar no fijarme en toda la gente que había para matricularse, y eso que era pronto.
- Ve a dar una vuelta por el instituto si quieres cariño, voy a rellenar la matrícula para ti. - Sonrió mi padre.
- Vale, gracias papá. - Respondí con la misma sonrisa.
- Está bien, nos vemos aquí en un rato. - y con eso se marchó.
Di una vuelta por el patio, el cual era bastante grande, tenían hasta una especie de pequeño invernadero y muchísimas plantas. Seguí dando vueltas pero está vez dentro del instituto, entrando en cada clase, paseando por los pasillos y observando todo y a la gente que pasaba por ahí.
- Perdona, estás perdida? - Escuché una voz masculina venir desde detrás mio.
- No, solo estaba dando una vuelta por el instituto. - Dije mientras que al mismo tiempo me giraba para ver con quién estaba hablando.
Cuando me gire vi un chico algo alto, más que yo, un rubio resplandeciente y unos ojos del color de la miel... Me parecía familiar...
- Soy el delegado de clase, supongo que tú estás aquí para inscribirte, no? - Su amplia sonrisa casi me cegaba.
- Eh, sí, mi padre está completando la matrícula por mi, y encantada de conocerte...
- Nathaniel, mi nombre es Nathaniel.
- Encantada de conocerte Nathaniel, yo soy _____.
Ambos sonreímos tímidamente el uno al otro. Justo una señora algo mayor le hizo unas señas para que fuera con ella.
- Oh, la directora me llama, otra vez, fue un placer conocerte! Espero verte pronto por aquí. - Se despidió y fue casi corriendo con la directora.
Al darse la vuelta para ir con la directora allí lo reconocí, era el chico que me encontré en el supermercado con mi padre. "Que coincidencia, no?" Pensé para mí misma mientras me daba la vuelta para volver a encontrarme con mi padre en los bancos que habían fuera en el patio. No podía evitar pensar que era bastante guapo, hasta que mi padre me llamó la atención porque estaba empanada.
- Hija, estás bien? En que estás pensando tanto?
- Nada nada, solo una tontería, vamos ya a desayunar que me muero de hambre. - Lo agarré del brazo y salimos del instituto para ir a comer a la cafetería que había cerca.
Después de una gran comida mi padre fue a casa para seguir ordenando las cosas mientras que mamá estaba trabajando en su nuevo trabajo.
"Este año va a ser interesante" me dije a mí misma mientras daba vueltas por el parque.

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¿Qué somos? - CDM Ruta Nathaniel
Lãng mạnUna nueva estudiante llega a un instituto en donde todo tipo de locuras pasan como, amores, desamores, perdidas, acoso, y más..