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“Yo—” Wei Ying no ha podido moverse—mucho menos respirar—desde que notó que Lan Zhan estaba despierto, su lengua asomándose para humedecer sus labios mientras traga con fuerza, su nuez de Adán moviéndose. “Yo—”

Antes, estaba luchando solo para abrirse suficiente espacio entre ellos y poder incorporarse unos centímetros.

En un gesto involuntariamente cruel del universo, Lan Zhan puede sentarse con Wei Ying acostado encima de él como si no fuera nada.

Y, aún más injusto—Wei Ying tiene una vista perfecta de cómo los músculos en el torso de Lan Zhan se contraen mientras lo hace—

(Haciéndolo sentir inseguro. Inseguro y absolutamente nada más.)

Se quedan mirando el uno al otro, con las manos de Lan Zhan firmemente apretadas contra su columna.

Wei Ying está pensando en una docena de cosas que podría decir—la mitad de las cuales objetivamente empeoraría las cosas, pero serían graciosas—

"Anoche..."

En general, ha sido una mañana educativa, porque ahora sabe cómo suena la voz de Lan Zhan recién levantado.

"¿Nosotros...?"

Los ojos de Wei Ying se agrandan, y después de un momento, se da cuenta de lo que Lan Zhan está preguntando.

Y sí, se le pasa por la cabeza hacer lo que vendría haciendo una persona madura.

Pero la oportunidad está justo ahí, y la aprovecha—mordiéndose el labio, enrollando un mechón de cabello alrededor de su dedo mientras baja la mirada de una manera avergonzada.

"Fuiste tan apasionado, Lan Zhan..."

Escucha una fuerte inspiración, y si mirara la cara de su compañero de clase—

Wei Ying sabría que está horrorizado.

Así que se ríe, sacudiendo la cabeza mientras se desliza fuera del regazo de Lan Zhan.

"Broma, broma. No querías que caminara solo a casa, así que me hiciste volver contigo. ¡Todo un caballero!"

(Esa última frase es una mentira decisiva.)

Lan Zhan sigue sentado rígido como un palo, con los ojos prácticamente saliéndose de su cabeza.

Mirando mientras Wei Ying se pasea por su habitación, recogiendo su chaqueta del suelo.

"¿Alguna vez has bebido antes?"

La pregunta toma a Lan Zhan por sorpresa, frunciendo el ceño.

"...No."

Eso explica un poco que se haya emborrachado con un solo trago. Si se mira con detenimiento.

Después de las últimas doce horas, Wei Ying está dispuesto a aceptarlo.

"Debes tener una resaca de la mierda, ¿eh?" Su voz es clara y alegre como siempre, con ese tono burlón familiar. "Nunca pensé que vería llegar este día."

La boca de Lan Zhan está seca.

No es que sea un hombre de muchas palabras, pero ahora... es como si su lengua estuviera pegada al paladar.

"Voy a hacer café. Tienes café, ¿verdad?"

Asiente con rigidez y observa cómo Wei Ying prácticamente sale corriendo de la habitación.

Es realmente sorprendente. Siempre había asumido que Lan Zhan sería del tipo que diría que el café es malo para la salud física o algo así.

Pero después de un momento de rebuscar en los gabinetes, Wei Ying encuentra una bolsa.

"Llenarías tus puños de sangre por mí" ༄ Wangxian.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora