Our love (Camren G!P)

XIV

Lauren's POV

Se acercaba navidad y la nieve ya caía por Boston, lo que significaba que ya estaban llegando las vacaciones tan esperadas. Solo me faltaba un curso por aprobar y el electivo más la pasantía con algún fiscal, luego prepararme para la prueba de admisión, por lo que mi mente estaba enfocada en eso, y por supuesto en poder darle la atención necesaria a Camila.

Este mes había sido de locos para ella, del hospital a la facultad, de la facultad a la residencia, no paraba, y yo hacía lo que podía para mantenerme a su lado, ayudarla, llevarle comida y distraerla. Sabía que ver a su familia había sido una inyección de energía.

Verónica llevaba todo el día sentada en su escritorio estudiando, y Camila no me había respondido el mensaje que le dejé en la mañana, suspiré. Como era cuestión de tiempo mi futuro académico ya no hacía mucho. Hacia demasiado frío afuera para ir a entrenar o hacer algo de actividad física, no tenía consola, ni una computadora para jugar videojuegos; ni siquiera teníamos televisión en nuestra habitación, no podía leer desde hacía mucho tiempo, me bloqueaba, ya que todo lo que hacía era leer y leer; hasta cierto punto la idea de leer me hacía sentir fatigada. Tomé una pequeña pelota anti-estrés y comencé a lanzarla al techo y agarrarla en el aire, así estuve aproximadamente 2 minutos hasta que me llegó un bolígrafo a la cabeza. Fue Verónica quien me estaba fulminando con la mirada.

Por, cierto, increíble puntería.

—Pareces un maldito niño de primaria, Jauregui —se quejó, solté un bufido frustrada.

—Ya, pero no se que hacer —dije, ella nuevamente me fulminó con la mirada.

—Ve una serie, lee algo, haz una maldita cosa que no sea hacer ruido, por favor —las ojeras bajos sus ojos eran visibles y me compadecí de ella, por lo que tomé las llaves de la habitación, mis queridos airpods y mi móvil.

—Vuelvo a eso de la cena, te traeré algo —dije saliendo, escuché como murmuraba un gracias.

Caminé por el pasillo, decidí ir a darle una visita a Camila, aunque probablemente esté ocupada, la extraño. Caminé decidida por el campus hasta llegar a su habitación, golpeé la puerta y escuché la voz de Camila diciendo "debe ser la comida", hice una mueca, debí haber comprado algo para ella de camino para acá. Dinah me abrió y bufó, dejando la puerta abierta para que yo pasase.

—Es tú comida, la otra no ha llegado —comentó Dinah que se tiró al sofá con gracia.

—¡Lauren! —Camila se puso de pie cuando me vio, y me abrazó con mucha fuerza.

—Hola, Camz —dije despacio, aspirando el olor de su cabello. De fondo se escuchaba a Dinah haciendo sonidos de asco.

—¿Qué haces aquí? —me preguntó con una sonrisa.

—Vero me echó de la habitación y quise venir a ver si estabas acá —nos sentamos en el sofá junto con Dinah quien mantenía los ojos cerrados.

—¿Por qué?

—Porque no la dejo estudiar —Dinah me miró con el ceño fruncido —, me refiero a que hago mucho ruido —ambas rieron.

—Nosotras nos tomamos un receso para comer algo —comentó Camila mirando a la rubia.

—¿Cómo se sienten? —pregunté pasando mi brazo por sobre los hombros de Camila.

—Como la mierda —respondió Dinah para luego suspirar.

—¿Y tú Camz? —pregunté más despacio mirándola.

—Ella está más que preparada —ella sonrió de manera débil.