Dulce familia. •Fin.•

46 5 0
                                    

3 años después.

  La familia Malfoy-Potter era lo más lindo que se puedan imaginar. La pareja habían adoptado a otro lindo niño, hace 1 año atrás, llamado Matthew. El pequeño Luck yaa tenía 4 años y estaba feliz de la llegada de su hermanito menor. Actualmente se estaban alistando para ir con los padres de Draco.

-Amor, ¿Puedes cargar a Matt y llevarlo al carro? Ya casi terminamos.- Habló el pelinegro, abrigando a Luck.

-Si, mi vida, no te olvides del bolso con la ropa de los niños.- Respondió el blondo, haciendo lo que le dijo su marido.

  Sinceramente se habían vuelto unos padres perfectamente cariñosos y cuidadosos. Amaban a sus hijos, los criaban con todo el amor posible. Claramente cuando tengan la edad adecuada los van a mandar a Hogwarts para que tengan la misma crianza que ellos, pero eso luego. Ahora disfrutaban de todo lo que tenían.

  Una vez que llegaron a la casa de los Malfoy, los pequeños corrieron, con cuidado ya que Draco les llamó la atención, hasta la puerta, para golpear.

-Mis príncipes..- Abrió la puerta Narcissa, abrazando a sus nietos. Ella los amaba con su ser.- ¿Cómo andan?.

-Bien, abue.- Respondió el mayor de los hermanos.- ¿El abuelo?..

-Esta adentro, les tiene un regalo.- Sonreía tierna, dejándolos pasar. Mirando a los adultos acercándose.- ¿Cómo andan los padres responsables?

-Uff, ni hablar, mamá, Matt es lo contrario a Luck, es tan imperativo como Hazz.- Reía el rubio, saludando a la mujer.

-Es mentira, Nar, solo que Lu y Dray viven durmiendo.¿Ustedes como han estado?.- Le brindaba un abrazo a su suegra.

-Lo sé, son muy perezosos.- Reía tierna, mientras entraban todos.

  Iban caminando hacia el living y vieron como el adulto estaba sentado en el sofá con los dos pequeños encima de él, jugando divertidos.

-Vaya, quien diría que el mismo Lucius Malfoy este así con sus nietos.- Mencionó el blondo, acercándose con su marido y su madre.

-Como para que no, estos niños son lo más hermoso que existen. Ahora si les agradezco por darme esto.- Sonreía feliz, abrazando a los menores.

-Sin su apoyo esto no hubiera pasado. Ustedes fueron nuestro pilar más grande para llegar a esta vida hermosa.- Habló Harry, sentándose en otro sofá, mirándolos con ternura.

-Es lindo verlos como una linda familia. Aún recuerdo cuando en las vacaciones de 1er año de Hogwarts, Draco llegó enojado contándonos sobre ti, de cuánto te odiaba y lo molesto que era que no le hables.- Reía la mujer, junto a los demás.

-Y cuando vino a decirme que quería que yo hable con Dumbledore para que Gryffindor no gane la copa.- Mencionó Lucius, sacando más risas.

  Pasaron el día entre charla, recuerdos, carcajadas y momentos de ternura con los menores. En la tarde Narcissa decidió hacer galletas con la ayuda de Harry y Luck, mientras que los otros tres miraban la televisión.

-Draco, a los niños le están enseñando Magia, ¿No?.- Habló el adulto, mirando a su hijo, quien hacía dormir al bebé.

-Bueno, ahora no, papá, son muy pequeños.. Luck no entiende mucho, tal vez si hemos usado nuestras varitas y le hemos explicado eso, pero con Harry queremos esperar un tiempo..- Acariciaba la cabeza de su hijo.

-Entiendo.. Es lindo verte como padre. Estoy orgulloso de ti.- Lucius sonreía al verlos.

  Luego de unos largos minutos, Luck llegaba corriendo con galletas.- ¡¡Papiii, abuelooo, miren lo que hice!!.

-Aw, que hermosas se ven, mi vida.- Mencionó Draco, agarrando una para comer, al igual que su padre.

-Va a ser un gran cocinero como yo.- Reía tierno Harry, mientras se sentaba al lado de su esposo, agarrando al bebé dormido.

-Esta familia va a comer muy rico gracias a ustedes tres, eh.- Miraba Malfoy, abrazando a su nieto.

  El día terminó de esa forma, comiendo, mirando películas y mucho cariño. Antes de la medianoche, la pareja había vuelto a su hogar con sus hijos casi dormidos. Bajaron del carro, entraron a su hogar y los llevaron a dormir, una vez libres, se fueron a su cuarto, querían descansar igual.

-Que largo fue este día, eh..- Habló el pelinegro, sacándose su ropa, para poder acostarse.

-Si, bebé, la verdad que si, pero fue lindo.- Imitaba la acción del otro, acostándose y abrazándolo.- Al fin podemos descansar juntos..

-Tus padres aman a los niños, es hermoso tener su compañía..- Murmuraba el de menor estatura, acurrucandose en los brazos de su pareja.

-Lo sé, mi amor, aunque sabes que Sirius y Remus también los aman, solo que no nos vemos seguido.- Le dejaba besos en la cara.

-Mhm, deberíamos ir a verlos.. Por cierto, el otro día en el supermercado vi a Pansy.. Hace tiempo no la veía..- Murmuró por lo bajo.- Pregunto por ti..

-¿Qué le dijiste?.- Sinceramente a Malfoy no le interesaba saber, desde que salieron de Hogwarts no quiso saber nada más con los de Slytherin, estaba feliz con su pareja y ahora con sus hijos, no necesitaba ninguna cosa del pasado.

-Bueno.. Le dije que estabas en casa.. Cuidando a nuestros hijos e hizo una cara... Rara..- Hizo un puchero.

-¿Por qué no me dijiste en el momento, Hazz? No te dejes llevar por lo que ella haga o diga, sabes como fue antes y dudo que ahora haya cambiado algo..Yo solo quiero estar tranquilo con ustedes..- Le acariciaba el cabello.

-Es que no quería molestarte con eso.. Sé que debo ignorarlo, pero si esta viviendo aquí, tal vez la veas.. Y no me molesta que quieras saludarla o algo.. Esta bien..- Miraba sus manos.

-Harry, no me interesa saber de ella ni de nadie. Mi vida son ustedes y mis padres. Los únicos amigos que tenemos son Ron y Her, es suficiente. Si la veo, no haré nada. Te amo, mi amor.. Tú y esos hermosos niños son todo lo que deseo para ser feliz.- Le dejo un cálido beso.

   Así su noche puso fin. Estaban tranquilos y sin ninguna preocupación. Los años seguían pasando, Luck ya había llegado a cierta edad en donde supo que es la magia y Hogwarts, por otro lado, Matthew también supo lo mismo. Un tiempo después los dos entraron a la escuela en donde debían estudiar. Para sus padres fue una gran lucha dejarlos ir, los iban a extrañar demasiado. Pero entre miles de abrazos y lágrimas, dejaron que sus hijos crezcan y aprendan lo lindo de la magia.

  Finalmente, Potter y Malfoy tuvieron el futuro que deseaban, pasaron muchos problemas juntos, pero supieron como salir de cada uno, su amor se hizo muy fuerte. Tuvieron apoyo y amor. Sus hijos eran perfectos y así los años pasaron, disfrutando de su vida.

____________________________

Amor secreto. 《Drarry》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora