🌹 ~𝘓𝘰 𝘘𝘶𝘦 𝘌𝘭 𝘝𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘚𝘦 𝘓𝘭𝘦𝘷𝘰~🥀

𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 3

Habían pasado varios años tras el accidente del palacio, pero aún así los rumores seguían, ¿Como fue que sucedió aquella tragedia?, ¿Que o quien ocasionó aquel incendió que se llevó la vida del hijo menor de España?, ¿Por qué nunca apareció ni las cenizas del chileno, ni su hijo?.. Tantas preguntas se hacia la gente después de la tragedia del palacio..

Alemania había sido criado por su padre a escondidas, T.R. no quería dejar que nadie sepa que Alemania si había sobrevivido tras el accidente, el pequeño alemán había crecido feliz sin sospechar sobre que había sucedido con su madre o por qué su padre era tan sobreprotector con el.

- ¡Deutschland!, Ven hijo, es hora de comer - Decía un alemán desde la cocina que se veía cansado.

- ¡Ya voy, Vater! - exclamaba Alemania guardando su libro favorito bajo su almohada y bajaba las escaleras con rapidez hacia el comedor, su Adorado padre le había cocinado su comida favorita, un típico Spätzle.

El pequeño alemán se sentaba en una silla ansioso de devorar aquella comida que había anhelado durante meses, Hasta que vio a su padre llegar con tres pequeños platos servidos con la comida, Alemania sonreía eufóricamente mientras no podía controlar sus pequeñas manitas inquietas qué intentaba llegar hacia el plato con Spätzle.

-¡Vater!, ¡Vater! - Gritaba ansioso el pequeñito que veía a su padre dejar los platos en la mesa de madera, Alemania apresuradamente agarró su plató pero su padre lo detuvo.

- Alemania, tranquilízate, deja que llegue tu hermana, sin ella no comeremos - comentó T.R. sentándose cerca de su pequeño hijo que lo miraba algo molesto.

- ¡Pero, Vater!, Alemania oriental se demora demasiado en venir a la mesa, ¿Por qué no tuve un hermano mayor? - respondió Alemania cruzándose de brazos y comenzando a hacer puchero para que su padre lo dejara alimentarse

- ¡A quien le dices que se demora! - gritó Alemania oriental bajando las escaleras mirando furiosa a su hermano menor que le hacía una mueca de burla

- ¡Niños!, Cálmense de una vez o juro que los castigaré aún peor que la última vez, su abuelo estaría decepcionado de ustedes si no se comportan - Exclamó T.R. dándole un tirón de orejas a sus hijos que se disculpaban por su falta de respeto.

Los tres germanos comenzaron a comer, Alemania estaba feliz de comer su comida favorita, mientras que Alemania oriental estaba algo pensativa pero ni su hermano ni su padre lo notaban por estar distraídos con el alimento servido.

- Vater.. ¿por qué tuve un hermano?, no me agrada ese mocoso que me sigue a todos lados - murmura Alemania oriental mientras come pequeñas porciones del Spätzle.

- Por qué es mejor estar acompañado que solo, yo tengo cuatro hermanos menores, todos me molestaron alguna vez, pero yo siendo el hermano mayor como tú, debía protegerlos y amarlos como eran, incluso si eran mocosos - afirmó T.R. con una sonrisa calmada mientras continuaba comiendo.

Así siguieron unos pocos minutos después de la pequeña conversación hasta que aparecieron los hermanos de T.R., Weimar, Hungría y Austria, a T.R. se le borró la sonrisa y miró molesto a sus hermanos que habían interrumpido el calmado almuerzo.

- ¡Hay pero T.R.!, ¡Si tú nos dejabas tirados en cualquier lado, incluso una vez dejaste a Austria afuera del palacio! - dijo Hungría mirando mal a T.R.

- No fuiste el mejor hermano, teníamos que cubrir todas tus travesuras de mamá para que no nos dejarás tirado en la guardería - exclamó Weimar bebiendo una taza de café.

Así pasaron unas pares de horas y se hacía tarde, el atardecer ya veía detrás de las montañas nevadas, Pero a Alemania le importaba poco la tarde, Alemania se colocó su abrigo y salio afuera donde habia nieve, el pequeño alemán estuvo allí afuera por 3 horas hasta que se adentro al bosque, Alemania siguió a una ardilla que habia partido al bosque, Alemania perseguía la ardilla por varios minutos que no se dio cuenta de que estaba lejos de su hogar y familia.

- ¿Ardilla? - Preguntaba Alemania mirando a todos lados perdido sin saber cuál era el camino de regreso o donde desapareció la ardilla pero escuchó un rugido cercano a donde estaba el..

Alemania se sobresalto y se aterrorizó al darse cuenta de que el rugido era de un oso, su padre le había contado historias de terror que contenían a un oso tan malvado, Alemania cayó en la nieve, presa del pánico, se escondió en una pequeña cueva sollozando, perdido en el inmenso y gélido bosque.