Haunting II

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1.0

El clima era sin duda favorable. El cielo estaba teñido de un azul brillante y luminoso, las nubes habían desaparecido, sin embargo el sol no asomaba su calor. La temperatura en el bosque era estable, los troncos de los árboles se alzaban gigantes y el viento refrescaba el rostro de ambos hombres.

JungKook no había pronunciado palabra alguna después de salir de la casa azul, ya que temía decir algo estúpido después de la escena en su habitación, la cuál aún no había abandonado su mente. Seguía dándole vueltas una y otra vez, intentando hallar las razones de la posesividad de Taehyung.

En su mente cabía la posibilidad de estar sobrepensando las cosas más de lo que debía, pues si se ponía a analizarlo, Taehyung era un príncipe. Un príncipe que siempre conseguía lo que quería, en demasía caprichoso y exigente; sería natural que fuera posesivo con lo que consideraba de su propiedad o al menos a su total disposición, lo cuál no sería descabellado si tomaba en cuenta que la realeza en general hacía exactamente lo mismo y la marca en su cuello era la prueba viviente de ello.

Pero había una extraña sensación en su pecho que galopaba incesantemente y cada palpitación pronunciaba el nombre de Taehyung, y a decir verdad, temía estar confundiendo las intenciones detrás de sus acciones, si es que siquiera existía alguna; y es que, lo que realmente le aquejaba era precisamente la ausencia de intención o sentimiento en el comportamiento que mostraba hacía él, la manera en que le miraba o la suavidad en la que sus palabras salían de su boca ¡Y lo que parecían celos cada vez que su propia vista se alejara de él por unos segundos!

Dejó salir un suspiro alto y exahusto. Estaba hecho un lío de pensamientos que provocaban una nueva clase de sentimientos... O quizá eran los mismos que siempre se había obligado a reprimir toda su vida. Si, JungKook no podía darse ese lujo, él tenía un deber, una responsabilidad.

Una carga.

"¿Qué fue eso?" La voz del príncipe lo tomó por sorpresa, despertandolo de su ensoñación abruptamente.

"¿Qué? ¿Escuchó algo?" Llevaban un galope tranquilo y lento, por lo que JungKook decidió detenerse por completo mientras miraba a todos lados buscando una posible presa.

"Si, claro que escuché algo. Llevo todo el camino escuchando tus quejidos ¿Qué te pasa?" Interrogó algo exasperado.

JungKook no sabía qué responder, no quería empeorar la situación.

"N-no es nada, es s-solo que yo... Pensaba en lo de hace unas horas" Por fin soltó e intentando parecer tranquilo le miró a los ojos, dejando de lado que había tartamudeado la mitad de su oración.

El alfa carraspeo, poniéndose nervioso y esparciendo su olor en el ambiente. JungKook se había acostumbrado a él.

"Yo... Lamento ser un poco... Territorial contigo" habló llevando su mirada a cualquier otra parte que no fuera JungKook. "¿Estás molesto?"

JungKook esbozó una sonrisa algo incrédula y frunció su ceño confuso "¿Usted me está preguntando a mí si estoy molesto? Esto es... Nuevo, alteza" De sus labios se escapó una risa traviesa.

"¡Oye! ¡Puedo ser una buena persona ¿Sabes? Fui educado como un rey después de todo" Soltó como un berrinche, provocando que la risa del omega se convirtiera en una carcajada.

Y era cierto, del otro lado del muro que el alfa había construido para los demás existía un futuro rey noble y cuidadoso, preocupado por su pueblo... Del otro lado podías ver cuan frágil y delgado era ese muro. Taehyung estaba a la defensiva todo el tiempo y recibía a las personas con indiferencia, pero no era más que un velo que intentaba cubrir sus puntos débiles, porque un rey no debe tener debilidades y mucho menos un corazón.

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⏰ Última actualización: Jul 31 ⏰

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