Cosas que Pasan.

Introducción

Soy Magnus un "Adulto funcional" de 25 años que pasa sus días encerrado jugando en el computador, odio salir e irónicamente estoy caminando a una plaza para  juntarme con mi mejor amiga, Penny... Oh, Penny si supieras cuanto esfuerzo hago por ti al salir de mi casa solamente podrías saber lo enamorado que estoy de ti, aunque creo que ya lo sabes gracias a mi noble torpeza y nervios cuando estoy contigo, a pesar de que nos conocemos desde pequeños. Me gusta prender un cigarro y caminar.

—Oh, mierda... Solo queda uno, así serán las cosas—. Saco mi encendedor y prendo el cigarro tomando una generosa cantidad de aire—. Esto es vida, joder...

—¡Hey! — Escuché a alguien gritándome, creo que ya sé quién es, y para mi desgracia me hará desperdiciar el último cigarro que me queda.

—Magnus, sabes que no me gusta que fumes, ¡bota eso!

—Si, si, si, en seguida lo hago—. La miro con algo de desprecio, estas cosas son muy caras para botarlas como si fueran basura, estoy fumando plata ¿Qué no ves? 

—¡Bien, así me gustan, obedientes! —. Sonríe con malicia, es como si supiera que tiene completo control sobre mí, lo cual es gracioso, porque si lo tiene.

— Y bien... ¿A dónde vamos?

—Oh, cierto, no te lo dije, vamos a la casa de una amiga de la infancia

— ¡Una amiga de la infancia, dios!... Pensé que era el único con Burio —. Estaba intentando hacer memoria de todas las chicas de nuestro curso que no eran Penny, fallé. — Bueno, vamos para allá entonces, tu guíame... — Antes de que pudiera terminar la frase, ella ya se había ido corriendo, en realidad estoy acostumbrado, su esencia e hiperactividad es lo que más me gusta de ella.

Caminamos unos 30 minutos en línea recta, en cuanto pude darme cuenta estaba a 2 cuadras de mi casa, estaba molesto y se lo hice saber a Penny, oh sorpresa...No le importó. Estábamos fuera de la casa de esta "amiga de la infancia", Penny tocó el timbre y salió una mujer delgada, ojerosa, de pelo desarreglado y con ropa muy grande para su tamaño, no debía medir más de un metro sesenta.

— Buenas noches, Penny y...— Dijo incomoda. 

— ¡MAGNUS! Aunque me gusta llamarlo "Mags" suena mucho más tierno — Su grito me llenó de incomodidad y podía notar a que, a la chica ojerosa también, ¿De verdad serán amigas de la infancia?, no pude evitar preguntarme.

— Bueno... Hola "Mags", pasen, llegó un chico raro preguntando si aquí iba a estar Penny hoy, así que lo dejé pasar — Abre la puerta y la vi apuntar a un chico rubio con el pelo medianamente corto.

— ¡Qué pasa, Mags, tanto tiempo hermano! —. Sus cálidas bienvenidas siempre eran motivos de burla, y no desaproveché la oportunidad.

— ¡Buenas noches homosexual de mierda, ¡cómo estás!

— No te pongas así conmigo, sabes que soy asexual, pero para ti hay "favorcitos" que estoy dispuesto hacer —. Ambos empezamos a cagarnos de la risa, Burio era asexual y no binario, pero sabía tomarse las bromas como lo que son, bromas.

— Y bien, mucho gusto a ti Mags y a Burio que tuve el agrado de conocerlo antes que llegaran todos los invitados — Lo dijo con tono sarcástico y Burio solo se reía diciendo "¡Me encanta esta mujer, es muy graciosa!" – Soy, Nereah y bienvenidos a mi morada nuevamente, solamente hay 1 regla en esta casa que deben cumplir, despedirse atentamente de mi gato cuando se vayan... —. Tomó a su gato gordo y le dio un par de besos, al igual que a Burio, me agradaba esta mujer.

 Pasaron varias horas de conversaciones banales, de recuerdos, chistes, cuando vi que Nereah se levantó rápidamente y subió las escaleras, según lo que escuché y lo que había analizado, no hay ningún baño arriba, sospeché que le pasaba algo, subí las escaleras, esperando no ser imprudente toqué la puerta (que estaba abierta) de su habitación, ella se dio la vuelta y me miró atónita, cerró su notebook y me hizo la señal de que fuera a hablar en privado con ella.

— Lo siento... sé que es mi casa y ustedes prácticamente vinieron a verme a mí, pero después de un rato no puedo seguir conversando y tengo que escapar, estaba jugando, perdón—. Lo decía como si fuera lo más malo que alguien pudiera hacer en una junta social

— La verdad es que te entiendo, a mi no me gusta salir, de hecho, también juego lo que estabas pues... jugando— Lo dije con algo de pena, no quería quedar como un virgen conociendo a alguien nuevo, pero al parecer ella era igual que yo— Si pudiera escapar de cada reunión social a la que voy, probablemente terminaría robándome una torre para poder distraerme y jugar algo, no te sientas culpable.

— Entonces ¿por qué sales? Si es algo que no te gusta no deberías hacerlo, listo

—No salgo por mí, salgo por ella que le gusta salir—. Miré el suelo para evitar el contacto visual, con todo lo que dije debió ser necesario para que Nereah lo entendiera.

— Ah... ya veo, de todas formas, que te guste alguien no significa que debas hacer de todo por esa persona, si se conocen hace tanto tiempo, en este punto ya deberías saber si va a pasar algo entre ustedes o no—. Lo dijo buscando mi mirada, sus palabras me cayeron como un balde de agua fría, era obvio que Penny sabía que me gustaba, entendí muchas cosas en dos minutos, pero aun así quería estar con ella, mi alma anhelaba la suya, y como todo tonto enamorado jamás perdería la esperanza.

— Si, tienes razón, pero ¿podemos dejar el tema de lado?, mejor pásame tu username y tu número para que juguemos un día de estos—. Ella tomó mi teléfono con las manos frías, se notaba que estaba muy ansiosa, se agendó como "Nere" y puso un emoji de gato, le gustan mucho los gatos. 

— ¿Bajemos? No vayan a pensar que estamos teniendo sexo o haciendo cosas de gente normal.

— Eres divertido, Magnus. —.Soltó varias risas pequeñas cuando recordaba lo que dije, jamás fui "Don comedia", al parecer, estaba igual de rota que yo, por alguna extraña razón eso me hacía sonreír como un tonto.

 Tomamos la decisión de bajar separados, ella fue primero y yo iría 5 minutos después, rápidamente fue la hora, intenté bajar los escalones lo más discreto posible, tuve tanto éxito que escuché a Penny hablando de mi con Burio:

 — ¡Actúa como si no lo conociera!, sé que es imposible que haya tenido sexo con Nereah la primera vez que se ven, y estoy segurísima de que es virgen todavía, aunque me haría un favor si estuviera con otra, no sé como decirle que es demasiado evidente que le gusto y que estoy interesada en alguien más

— Penny, no puedes decir eso de Magnus en frente de su otro mejor amigo, sé que es complicado para ti el hecho de gustarle, pero así son las cosas y no puedes ir por ahí esperando o pagándole a mujeres para que intenten algo con él, ¿Al menos sabías que nunca ha estado con alguien más por respetar lo que siente hacía a ti?, te falta empatía, niña

Me sentí abrumado por la situación, quería salir corriendo, me sentí avergonzado, sucio. "¿Acaso es un pecado que me gustes?", no sé por qué tomé la decisión de sentarme justo donde estaba y mandarle un mensaje a Nereah, Penny siempre fue mi lugar seguro y lo acababa de perder, al menos eso creí yo, hace mucho tiempo que ella ya no era un lugar seguro para mí y debí alejarme, sentía como las lágrimas caían y mi respiración se agitaba a tal punto que podía oírla y más me desesperaba, más me odiaba. Me estaba perdiendo en la culpa, hasta que me invadió un sentimiento cálido y abrasador.

—Tranquilo, todo va a estar bien, no te preocupes...— Escuché la voz serena de Nereah intentando calmarme, me estaba tomando de las manos y ya no eran frías, estaban tibias, no pude evitar levantar la mirada para verla a los ojos, si tan solo hubiera podido seguir mirándola un poco más cuando conversamos en su habitación, no me habría desmoronado como pasó ese día, pero tampoco me hubiera enterado de la verdad.

Abracé a Nereah hasta que me dormí.