CINCO

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Dilan Pérez
17 de Enero del 2017.

En efecto mi estimado.

Hoy se cumplen 2 años desde que lian no está.

Y pues, como es de esperarse. Estoy en clases, un estúpido miércoles en la mañana.

Y para rematar el humor, estoy en historia.

Matame papá Dios.

Estoy harto, y más, porque mis papá no me dejan ir al cementerio para ver a mi hermano.

Simplemente porque tienen picazón anal y les importa una mierda como me siento.

Solo les importa si estúpido trasero millonario, mientras tanto, estoy aquí, en esta estupida universidad, tratando de ser el hijo que ellos quieren que sea, y adivinen, si los desobedezco, me ira peor.

Por eso le agradezco un poco ak destino de haberme quitado a Lian de mi lado, es doloroso, si, Pero, por lo menos ya mis papá no lo maltratan.

Son un asco, y delante de las camaras y las cenas de negocios, tenemos que actuar como una familia feliz.

Estoy harto de toda esta mierda.

Maddison nota mi estado de animo desde que la vi hace 2 horas.

Simplemente no me habla mucho y trata de no molestame, no es que quiera agarrar la rabia con ella, y que por eso ella se está comunicando de esta manera, simplemente, que ella más que nadie sabe que se siente, ya que ella también perdió a su hermanita bebé, aunque su historia fue aún más perturbadora que la mía.

Pero es un cuento para después.

—Señor Perez– habla la estúpida profesora Kerly cuando ya estamos solos, me cae fatal– necesito que me entregue su ensayo mañana a las 4:00pm, me tiene muy baja esta asignatura, y aunque usted no lo crea. La historia de la psicología humana, es muy divertida, y deja mucha enseñanza que te ayudará en un futuro.

—No se preocupe, que yo le entrego su trabajo– digo mientras termino de tomar mis cosas– chau– y trato de irme.

Pero la estúpida profesora me hagarra del brazo, y se que viene a continuación.

—No se porque te haces el duro, los dos sabemos que queremos, y el hecho de que yo sea tu profesora, lo hace más arriesgado, y no se tu Dilan– dice mientras se acerca un poco más y me pone una de sus manos en el rostro– eso a mí me prende más.

Eureka, está profesora quiere terner sexo conmigo desde que estudió en la UBK, y pues, no es que sea fea ni nada de eso, de hecho, la señorita Kerly es muy linda, alta, blanca, rubia, de unos treianta y tantos años, elegante y con ojos celestes.

Pero simplemente me causa repulsión que ella quiera tener sexo conmigo, tipo, soy menor que ella, y se que eso no afecta pero...

¡Soy su puto estudiante!.

Wey.

¡ESTA MAL EN TODOS LOS SENTIDOS!.

Si habláramos de un típico cliché, profesora/alumno, este sería el mejor de los momentos.

Pero está historia no trata de eso, o por lo menos, no conmigo, así que simplemente no bro.

Los atardeceres de BibianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora