🌹━━━━chapter three

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──¿Aún te quedan las pastillas que te di?

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──¿Aún te quedan las pastillas que te di?

──Unas cuantas.

──¿Dan para esta semana?

──Quizas.

──¿Cómo te has sentido en estos días? ──cuestiono Shinobu,  desde el otro lado de su escritorio. ──¿Has notado algún cambio? Sabes que debes de comentarlo absolutamente todo conmigo.

──Lo se…

──Entonces, Isa.

──No he notado ningún cambio drástico, todo parece fluir como debe.

──Entiendo.

Isao soltó un suspiro cargado de frustración.

Estaba sentado frente al escritorio de la Hashira de los insectos, acudiendo como cada semana a su revisión obligatoria para estar seguros de que nada estuviera fuera de lo normal. Kochou Shinobu se encargaba de que el tratamiento saliese tal y como Tengen Uzui lo deseaba.

──Tu cuerpo parece aceptar perfectamente el tratamiento. Vamos avanzando poco a poco pero saludable…

──¿Tengo que seguir con esto por más tiempo? ──cuestiono.

──Unos meses más.

Isao asintió sin ánimos y recibió de Kochou una caja de pastillas, levantándose de aquella silla para abandonar la finca mariposa tal y como llego; en total silencio.

"El maldito tratamiento".

Siempre se pregunto si era normal; porque si se suponía que Tengen lo amaba, ¿Por qué lo sometía a tal cosa?.

El tratamiento que había llevado durante dos años era por mero capricho de Tengen, quien siempre le había hecho saber que su apariencia afeminada no era suficiente y que a pesar de ser precioso en muchos sentidos, aún le faltaba ser un poco más femenino para estar al cien por ciento. Obviamente que aquello no era algo que su esposoe dijese en palabras directas, sino que solía decirlo en breves comentarios insignificantes como si no fuese la gran cosa.

Al principio Isao pensaba que estaba bien, que Tengen solo quería  que estuviese bien, sin embargo luego de un tiempo se dió cuenta que era sometido aquel tratamiento porque Uzui buscaba la manera de no sentirse meramente culpable por profanar el cuerpo de un chico.

Su esposo era un noventa y nueve por ciento Heterosexual, y él ocupaba ese 1% restante en su vida.

Por eso Uzui quería volverlo más femenino.

──Esto es un asco ──sus palabras quedaron estancadas en el aire.

No había absolutamente nadie a su alrededor. La calle estaba totalmente desolada, lo que aprovecho y se detuvo para tomarse unos cuantos segundos y no entrar en pánico. Respiro lento y pausadamente, apretando los puños hasta sentir sus uñas clavarse en la palma de su mano y aguantando las ansias de llorar.

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⏰ Última actualización: Jun 05 ⏰

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𝐄𝐓É𝐑𝐄𝐎 ━━━━Kimetsu No YaibaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora