El novio de Mingyu - Minwon

veinte

Hansol se dejó caer sin cuidado en su cama mientras Seungkwan le dio una patada débil en la costilla.

—Vamos Hansol, aún nos queda la habitación de tus padres.

Hansol hizo una mueca molesto y negó rápidamente.

—El collar no va a estar ahí, la habitación de mis padres está cerrada desde la semana pasada que ellos se fueron. No insistas, Kwan.

El moreno bufó y volvió a patear a Hansol.

—Se lo prometimos a Mingyu.

—Y lo estuvimos buscando ayer toda la tarde y noche, sin mencionar que me levantaste a las ocho un domingo para seguir buscando.

Seungkwan rodó los ojos ante las quejas del americano.

—Eres un mal amigo.

Hansol estaba listo para quejarse cuando su celular sonó así que listo para escapar de Seungkwan, tomó su móvil y contestó la llamada.

—¿Hola?

—

Wonwoo se removió en su lugar cuando un sonido tedioso comienzó a despertarlo de su tan preciado sueño. Escuchó a Mingyu a su lado también quejarse al respecto y pasaron unos largos segundos hasta que el peliazul se levantó y contestó lo que parecía ser una llamada de su celular.

Mingyu puso la llamada en altavoz y se volvió a acostar junto a su novio.

—Hola.

—¡Mingyu idiota! — el grito de Seungkwan hizo a Wonwoo dar un salto algo asustado—, ¿Cómo que ya habías encontrado el collar y no nos dijiste nada? Estuvimos toda la maldita noche con linternas buscando en el patio de Hansol como unos tarados.

Mingyu parpadeo aturdido.

—Oh, lo siento.

Estaba bastante cansado para decir algo al respecto y Seungkwan parecía no entender que Mingyu estaba más dormido que despierto.

—¿Lo sientes? ¿Sólo lo sientes? Ni siquiera nos contaste lo de Chan y tú en la cárcel, agradezco que Bambam llamó a Hansol para contarnos porque si fuera por ti.

Mingyu entonces parpadeo confundido.

—¿Bambam cómo lo sabe?

—El nos dijo que Chan lo llamó esta mañana para contarle y que Bambam fue por ti a la comisaría pero le dijeron que te habías ido junto a unos chicos, así que supuso que Wonwoo y sus amigos fueron a buscarte. Pero tú no contestabas sus llamadas así que intenté llamarte yo y bingo, después de quince intentos lo logré.

Wonwoo tenía la intención de disculparse con él por no avisar nada al respecto, pero Mingyu se adelantó.

—Lo siento, todo pasó muy rápido. Podemos reunirnos hoy para hablar sobre eso, todavía no sé qué hacer exactamente.

—No tienes que hacer nada amigo, Chan fue un idiota, ¿robarle a su propio amigo? Ni aunque Wonwoo me parezca intolerable lo haría, no cuando ese collar significa tanto para ti. Así que olvida a Chan, estamos contigo, menos Bambam, él también está contigo pero es débil de corazón y cree que Chan puede tener otra oportunidad o algo así.

Mingyu asintió ante las palabras mientras acariciaba a Wonwoo quien se encontraba acurrucado en sus brazos. Suspiró.

—Gracias, nos veremos en un rato. Adiós.

—Nos vemos entonces.

La llamada se cortó y Mingyu volvió a suspirar rendido.

—Hoy va a ser un día difícil.

Wonwoo le regaló una sonrisa sincera y dejó un pequeño pico en sus labios con la intención de transmitirle un poco de la paz que se le estaba escapando.

—Voy a estar contigo, ¿sí? Así que tranquilo, además ya sabes que ellos están de tu lado.

—No se trata de eso, Won, no es por quién me apoya o no, sino lo que eso conlleva. Vamos a separarnos como grupo y es horrible, somos amigos desde pequeños.

Wonwoo comprendió, porque era lo mismo a que uno de sus amigos lo tracionara de esa forma, el dolor iba a ser horrible y difícil de asimilar, pero por esa misma razón Wonwoo no quería dejarlo solo en eso.

—Vamos a salir juntos de eso, ¿sí? Tu y yo, de la mano.

Mingyu sonrió levemente.

Al menos le alegraba tener a Wonwoo en su vida, porque es esa pequeña luz que poco a poco alumbra cada rincón lleno de oscuridad.

—Gracias.