Kaiju N.8: Rey de los Monstruos

Capitulo 1

Asura estaba en lo alto de un edificio en ruinas, observando el caos que se extendía a sus pies. Sus pensamientos eran una amalgama de recuerdos dolorosos y una ira ardiente que lo consumía desde dentro.

Recordaba claramente el día en que todo cambió. Era de noche, la luna estab en lo mas alto su luz iluminaba aquella gran vivienda, pero fue cuando los kaijus invadieron la ciudad. Aquellos monstruos colosales, con su ferocidad incontrolable, barrieron todo a su paso. Los edificios se derrumbaron, las calles se llenaron de gritos y el caos se apoderó de todo.

Asura estaba con su familia cuando el ataque comenzó. Su amada, sus suegros... todos fueron víctimas de la destrucción desatada por los kaijus. Él junto a la seguridad de la residencia lucharon con todas sus fuerzas para proteger a la familia Yashida, pero fue en vano. Los vio morir frente a sus ojos, sintiendo impotencia y una rabia indescriptible que lo consumía por dentro.

Desde entonces, Asura se sumergió en un entrenamiento brutal y en la búsqueda de venganza. Se asoció con adentro a la Yakuza donde pertenecía la familia de su amada ,  obteniendo recursos y entrenamiento avanzado, dedicando cada día a perfeccionar sus habilidades y a acumular armamento para enfrentar a los kaijus.

En su búsqueda solitaria de venganza, Asura se había vuelto un cazador de kaijus por su cuenta. Sin unirse a ningún escuadrón o grupo, prefería enfrentar a las bestias gigantes de manera individual, convirtiéndose en una amenaza temida por esos monstruos.

Ahora, en lo alto de ese edificio, su mirada se posó en dos limpiadores que estaban a punto de ser atacados por un kaiju residual. Sus ojos se estrecharon con determinación mientras calculaba su próximo movimiento. No podía permitir que más vidas fueran arrebatadas por esas bestias.

Sin dudarlo, Asura se lanzó desde la azotea del edificio, corrio por todo el lugar hasta que porfin logro, aterrizando frente a los limpiadores justo cuando el kaiju se abalanzaba sobre ellos.

El sonido del metal chocando contra la carne de la bestia resonó en el aire. Asura luchó con ferocidad, desatando todo su poder y su ira acumulada en cada golpe. Sus movimientos eran rápidos y precisos, sus ataques llevaban consigo la promesa de venganza y justicia.

Los limpiadores observaron atónitos mientras Asura luchaba contra el kaiju, enfrentándolo con una determinación que no conocía límites. 

Los trabajadores de limpieza, Kafka y Reno, observaron asombrados la escena que se desarrollaba frente a sus ojos. Nunca habían presenciado algo como aquello. La ferocidad y determinación de su salvador, los dejó sin aliento. Era como si un guerrero de leyenda hubiera descendido del cielo para enfrentar al kaiju sin temor alguno.

Kafka: ¡Increíble! ¿Viste eso, Reno? ¡Este tipo es una máquina de combate! exclamó Kafka, con los ojos abiertos de par en par mientras Asura luchaba con el kaiju

Reno asintió con incredulidad, sus manos temblaban ligeramente por la intensidad del momento

Reno: Nunca vi a alguien pelear así. Parece que tiene el poder de diez hombres respondió Reno, su voz llena de asombro

Los dos trabajadores observaron maravillados cómo Asura desplegaba su fuerza y habilidad, enfrentando al kaiju sin ningún equipo profesional o respaldo. Era como si estuvieran presenciando un enfrentamiento entre titanes, y Asura demostraba ser el más feroz de ellos

Kafka: ¡Mira cómo lo derrota! ¡Es imparable! exclamó Kafka mientras veían a Asura acabar con la bestia.

Kafka y Reno, observaron la escena con un sentimiento extraño que los invadió mientras Asura luchaba ferozmente contra el kaiju. Estaban asombrados y agradecidos por haber sido salvados, pero a la vez sentían un escalofrío recorrer sus cuerpos al presenciar la brutalidad y determinación del hombre que los había rescatado.