Mala Fortuna

86 3 0
                                    

Claude comprendía a la perfección que esos dos necesitaban un tiempo, que Vale lo necesitaba. Con esa amarga sensación inundando su pecho, miró a Valir y no supo que más hacer, la situación era difícil.

— En algún momento deberás enfrentarlo y perderle el miedo, no puedes seguir viviendo atemorizado.

Era el mensaje que le quería transmitir Claude a Vale, pero quizas no eran las palabras adecuadas.

Saldré… a caminar un poco… necesito aire fresco.

Claude se excusó con ambos y se marchó tristemente. Vale no decía nada, no expresaba nada más que una decepción infinita. Valir lo abrazó con tanta fuerza, que Vale sentía reconstruir cada pedazo de su ser.

No quiero que vuelvas a huir, Vale. Me destroza que lo hagas… Entiende, eres mi primer amor, me duele que seas tan indiferente con lo que siento. Si no lo he demostrado correctamente, discúlpame, prometo hacerlo mejor.

★ El del problema soy yo, Valir. Perdona que no sea capaz de corresponderte adecuadamente ahora, tengo mucho que superar…

☆ No voy a presionarte a sentir algo, no ahora… pero ten en cuenta que yo no sé cuando rendirme…  a menos que tú, lo pidas de alguna manera.

Vale guardó silencio por la ironía en esas palabras. Hace poco, él suplicaba por algo que a Valir no le importó ignorar. Suspiró ansioso al pensar que debería ya, volver a casa.

Tengo una junta muy importante ahora. Voy a llevarte conmigo aunque no quieras.

Vale asintió, tenía mucho en que pensar y necesitaba un tiempo antes de enfrentar a su padre.
Valir no tenía los ánimos de conducir, así que solo optó para que los llevaran hasta su destino. Total, el chofer ya sabría donde llevarlos y eso le resultaba muy útil ahora. Ambos estaban agotados en todo sentido y la travesía hasta dicha empresa no fue notoria. No fue hasta que en el último piso, antes de entrar a la sala de conferencias, Vale entró en pánico al ver a su padre frente a ellos. Su padre pidió privacidad para hablar con su hijo, cosa que todos los acompañantes obedecieron… excepto Valir.

Vuelve a casa, Vale… hablaremos cuando llegue.

☆ ¿Vale?

★ No volveré a casa… 

¿Quieres parecer rebelde frente a tu amiguito?

★ No es eso, padre.

El moreno mayor intentó con timidez, tocar la mejilla de su hijo, porque la culpa lo golpeaba violentamente en sus recuerdos. Valir,  también tenía presente el estado en el que había encontrado a Vale, expresó su furia titánica en su puño pero no logró alcanzar a su objetivo, puesto que la intervención de un tercero, evitó que la situación se agravara.

— Tranquilo, Valir… Yo no te eduqué de esa manera.

☆ ¿Papá?, ¿en serio?, ¿ahora?

La intervención de Flames nadie se lo esperó, y sin embargo, ahí estaba. 

— Tanto tiempo sin verte, querido amigo.
 
El moreno mayor selló sus labios más sus ojos expresaban la sorpresa suficiente. El mundo se sacudió a sus pies y su temperamento altivo, besó el suelo bajo los pies de Flames.

Vale… ve a casa, ahora.

No lo quiso, pero se sintió acorralado entre la indiferencia y el desamor. Tomando valor, buscó huir a como de lugar, de Vale y  más que todo, de su pasado. Flames no pensaba dejar las cosas de esa manera una vez más, no hubo de otra que retenerlo tomándolo de la mano. Otra vez… esa sensación que ya conocía, que hacían inmensamente feliz a Flames.

INEFABLE ~MLBB~ (ValexValir). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora