Hay un chico en mi cama | Jikook

7

"¡Despierta Yugyeom!" grito, repitiendo la tradición diaria de despertarlo de su somnolencia antes de ir a la escuela. La puerta se abre de golpe y él pasa a mi lado dando tumbos hacia la escalera, con una especie de "mañana" saliendo de sus labios. "Hay huevos con tostadas en la isla", le digo mientras se dirige a la cocina. Me siento a su lado mientras él empieza a llenarse de comida, agitando la mano en un falso agradecimiento.

"Humuphumphumphump", suelta Yugyeom, cuya frase inaudible no se distingue entre sus mordiscos y su masticación; un trozo de huevo sale despedido hacia la encimera, para mi disgusto. Le respondo con una cara de asco, haciéndole soltar una ligera risita mientras alejo el plato de mí con asco, perdiendo de repente el apetito.

"He dicho que Suhno dice que eres la hostia. Y no sabía que tú y Bum os habíais peleado... y que habías ganado... ¿cuándo me ibas a contar esta revelación? Mi hermano está cambiando ante mis ojos, crecen tan rápido". Finge mientras coloca su mano sobre su corazón.

"Oh si, somos compañeros de laboratorio... Um, si solo ya sabes estábamos hablando y luego hubo golpes y, pow pow, y luego fue noqueado en el suelo. Sí". Mi hermano se ríe antes de poner su puño en el aire. Genial, ahora todos piensan que soy un matón.

[🌟]

"Ahí está, el grandote en persona". Suhno me llama cuando entro en Física y me choca el puño -¿es obligatorio que todos los chicos tengan que chocar los puños? Los choques de manos son mucho más suaves y agradables.

"Qué tal". Asiento con la cabeza y me dirijo a mi asiento, viendo que me espera otro examen sorpresa. Gimo y pongo los ojos en blanco mientras los dos nos reímos y empezamos 50 minutos de infierno silencioso. Esta vez, en lugar de jugar al tres en raya, jugamos al ahorcado. A mitad de H__ N A suena la campana, poniendo fin a nuestro juego. Recogemos y entregamos nuestro examen hacia el frente de la clase antes de salir de física, dejando las puertas del infierno de la ciencia.

"Vamos a comer, me muero de hambre". Dice Suhno. Sorprendido, le sigo hacia el comedor. Rara vez como aquí; no sólo este año, sino cualquier año - sólo emigro aquí si las nubes deciden llorar. El andar de Suhno divide el pasillo, su encanto sin esfuerzo es suficiente para dividir la multitud de gente, yo le sigo la estela -disfrutando un poco de no ser constantemente chocado por todo el mundo.

Entramos en el vestíbulo inundado, Suhno se mueve sin problemas entre la multitud hasta la cola del almuerzo y me da una bandeja mientras empieza a poner macarrones con queso en su plato. Mi comida se tambalea ligeramente mientras la sirvo en mi lugar - siento como si se moviera ligeramente, casi como una babosa - delicioso.

"¡Ayyyyyy!" Yugyeom grita mientras Suhno y yo nos dirigimos a la mesa y nos abraza simultáneamente. Jimin se sienta a su lado y me guiña un ojo antes de darnos un puñetazo a los dos.

"Mi hermano pequeño, de hecho en el comedor, de hecho en la escuela... es un maldito milagro". Se ríe, haciendo que la mesa estalle en carcajadas. Es verdad, casi me echan del colegio por mi 30% de asistencia. Estuve a punto de librarme hasta que mi madre irrumpió en el despacho y me defendió, exigiendo que me quedara por el bien de mi futuro.

Los buenos tiempos cuando ella estaba realmente cerca.

"...Sí, parece una buena idea, ¿verdad, Jungkook?" Dice Yugyeom sacándome de mi ensoñación y de mis tristes recuerdos, devolviéndome a la mesa.

"¿Eh? ¿Qué has dicho?"

"Jimin y Suhno estaban hablando de ir todos a la bolera esta noche... seguramente... quiero decir que no es que tengas nada que hacer. Y luego, tal vez, ver una película o algo así", reflexiono sobre la oferta durante un segundo, escaneando mi mente en busca de las últimas películas que se acaban de estrenar, espero que les guste el terror.

"Ugh sí, supongo que podría destruirlos en un juego de bolos esta noche". Todos empezamos a reír de nuevo. Jimin me guiña un ojo desde el otro lado de la mesa, haciendo que mi pecho se agite. Se muerde el labio sutilmente, sumiéndonos en un aislamiento silencioso; sus ojos verdes son tan seductores como siempre. Es como si el tiempo se congelara cada vez que nuestras miradas se cruzan; sin embargo, probablemente no tenga ni idea del efecto que tiene sobre mí. Cómo me convierte en un desastre tartamudo, que sólo es capaz de mantener una conversación de dos frases con él. Nuestra mirada se rompe por un chillido a través del comedor.

"¡Babyyyyyy!" Una chica bronceada de pelo anaranjado emerge de entre la multitud, con las gafas de aviador subidas para revelar unos fuertes ojos marrones, drenando la confianza de la sala y absorbiéndola en su propio y fuerte comportamiento. La mesa se silencia cuando ella da un salto, mi hermano le da un codazo a Jimin con una sonrisa en la cara. Es ella. Es Annabelle. Me doy cuenta. Tiene un aire a Annabelle. Rodea a Jimin con sus brazos, lo que le hace apartar la mirada de mí mientras conectan, tanto con sus ojos como con sus labios. Mi hermano y sus amigos animan y silban, mientras Suhno finge taparse los ojos.

Sus labios se desconectan y nuestros ojos vuelven a conectarse; una mirada diferente esta vez: ilegible.

"Um... acabo de recordar... no puedo um... en realidad odio los bolos... no puedo venir esta noche... y la película suena bien pero... me voy a casa ahora; adiós..." Me levanto bruscamente, atrayendo la atención hacia mí mientras alejo mi bandeja.

"Woweeee - mi hermanito se va a casa temprano qué sorpresa... y no puedo creer que te estés rajando de los bolos tú NUNCA dejas pasar una película". Mi hermano se ríe. Jimin va a decir algo, pero nada sale de su boca, cierra los labios y redirige su mirada hacia Annabelle. Me encojo de hombros y esbozo una sonrisa falsa, y una sutil risa antes de marcharme.

"Mándame un mensaje cuando llegues a casa, por favor". Yugyeom me llama. Qué idiota.

[🌟]

La puerta se cierra detrás de Yugyeom mientras se dirige a la puerta después de quejarse y rogar durante horas para que venga a los bolos, sin éxito. Los únicos que realmente conozco allí son Yugyeom, Suhno y el rey Jimin; pero el rey Jimin tiene una reina novia así que está fuera, y Suhno y Yugyeom son amigos de todos los otros atletas.

En lugar de ir a la los bolos, decido estar con mi mejor amiga del mundo: Kimmy Schmidt. Llevamos 3 temporadas y seguimos con fuerza. Enciendo el televisor del salón, me hundo en mi edredón de algodón y dejo que la pelirroja baile en mi pantalla.

La puerta se abre de golpe e interrumpe el dúo de Titus y Kimmy, revelando a un Yugyeom molesto. Enciendo el teléfono y compruebo la hora. 10:13. Sólo ha estado fuera una hora y media... debe haber sido un partido rápido y una película corta.

"Hola, ¿qué tal el partido y la película?". Se desploma en el sofá y empieza a gemir en voz alta, interrumpiendo mi dueto de Netflix.

"Agh tienes tanta suerte de no haber venido... ni siquiera terminamos yendo al cine porque Jimin y su chica tuvieron una puta pelea a mitad del partido... y luego él se metió en una pelea de verdad... como ugh que mierda!. Acabamos siendo expulsados, lo que fue bastante divertido". Se ríe y entierra su mano en el bol de palomitas, mi bol de palomitas.

"Oh... um... ¿Por qué se pelearon? Debe haber sido bastante mala". Vuelvo a dirigir la conversación hacia Jimin.

"No lo sé... pero los dos estaban muy cabreados... de todas formas esta película es gay me voy a la cama. Buenas noches". Hago una mueca de asombro ante el uso de "gay". ¿Quizás quiere decir feliz? Porque son felices. Sí, eso es. El sofá se hunde cuando Yugyeom se levanta y vuelve a la habitación.

"Buenas noches", murmuro entre bocados de palomitas. Mi teléfono vibra sobre la mesa y me hace apartar la mirada de la televisión.

Número desconocido (10:17):

Hola, soy Jimin. ¿Podemos hablar?

¿Cómo coño ha conseguido Jimin mi número y por qué me manda mensajes?

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