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¿Qué pasaría si... el joven Severus Snape de quinto año se enamorará de su profesora?
En este universo nuestra querida Ivette, pocos meses después de haber conocido a Harry, accidentalmente rompe un giratiempos llevándola varios años al pasado...
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Maldecía internamente el momento en que creyó buena idea dar un vuelta a ese giratiempos. Que en realidad no tenía nada de malo sino que el problema fue que se le salió de las manos, porque tiro accidentalmente aquel artefacto, y todo a su al rededor dio giros tan rápidamente que logro darle un buen mareo.
De alguna manera, que tiene su lógica mágica, termino inconsciente en el patio de Hogwarts. Sentía personas cerca de ella, la cuestión es que de alguna manera sus ojos se negaban a abrirse por lo que se tenía que conformar con escuchar lo que pasaba.
— Lily no la toques, ¿Y si es una espía? — La voz de una joven tal vez de 14 o 15 años regaña a quien al parecer era su amiga.
— No seas tonta Hanna, si fuera una espía no estaría desmayada a plena vista donde cualquiera puede verla. — La otra voz que al parecer era de ¿Lily? también reclama.
Ivette siente como una mano acariciar su mejilla para luego ir a su cuello dándose cuenta de que le estaban tomando el pulso.
— Debemos llevarla a la enfermería.
— Si claro, llevemos a una asesina a la enfermería de la escuela. — Su tono sarcástico no paso desapercibido por la castaña.
"Me recuerda a Severus cuando cortamos algunas plantas para la profesora Sprout." Recuerda divertida esa vez que ambos cortaron esas flores y de paso vieron algunos jazmines.
— Hanna deja de decir tonterías. — Cierta pelirroja saca su varita de su túnica. — Wingardium Leviosa.
"No me digas que..." Sus pensamientos se ven interrumpidos al sentir que abandonaba el piso y luego flotaba en el aire.
"Si definitivamente lo hizo." El problema es que no podía moverse o tan siquiera abrir los ojos.
Derrotada dejó que la llevarán a la enfermería. Solo esperaba no hacer el ridículo de esta forma.
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— Muchas gracias señorita Evans, 10 puntos a Gryffindor por ayudar a esta mujer. — La voz de alguien bastante reconocido para Ivy recompenso a la pelirroja.
"¡Espera! ¿Acaso dijo Evans?" Fue cuando comenzó a armar el rompecabezas en su mente. Si la chica que se llama Hanna le dijo Lily a quien la ayudó entonces... El nombre de esa chica es Lily Evans.
La mamá de Harry.
— ¿Ella estará bien? — Su preocupación fue evidente, algo que le pareció tierno a la ex Sultana.
— Estará en buenas manos señorita Evans. — Esa otra voz la reconocía a la perfección. Era Minnie o bueno McGonagall.
— Mmm... — Ivette se remueve en la camilla.
— Está despertando. — La profesora se acerca junto a Madame Pomfrey para examinarla.
— ¿Nos podemos quedar? — Lily observa atentamente a la mujer de al menos 20 años removerse.
— Me temo que no, sin embargo agradecemos tu ayuda. — Dumbledore la despide acercándose a la adulta.
— Vámonos Lily. — Hanna sostiene el brazo de su amiga arrastrándola fuera de la enfermería.
Tan pronto se fueron la joven Ivette abrió sus ojos observando los rostros que la veían. Eran iguales a como los recordaba sin embargo sabía que las cosas habían cambiado. En primer lugar estaba lejos de su tiempo, con solo saber que la futura Lily Potter estaba estudiando en la escuela tenía muy en claro que el viaje en el tiempo salió muy distinto a lo que esperaba.
Al menos había esperado viajar unos días atrás, no años, por lo que ahora debía concentrarse en no interferir en la historia. El problema era, ¿Cómo lo haría?
Una pregunta que respondería después pues su interés estaba en los mayores que la observaba con atención.
— Iré con el profesor Slughorn a pedirle más pociones que ayuden a calmar. — Pomfrey avisa sabiendo que necesitaban privacidad con la joven.
Justo cuando la medimaga abandono la enfermeria las preguntas no se hicieron esperar.
— ¿Cuál es su nombre señorita? — El viejo mago pregunta amable sin querer asustarla.
— Ivette Demir... — Susurra sobando su cabeza como si eso fuera a disminuir el dolor en su cabeza que repentinamente sintió.
— Albus no creo que ella sea un peligro. — McGonagall acaricia el hombro de la joven, sentía que la conocía de bastante tiempo pero está es la primera vez que se veían.
— Lo se Minerva, al contrario es una gran persona. — Dumbledore analiza cada aspecto de la castaña. — Nuestra amiga de otro tiempo se quedará aquí en Hogwarts, es lo mejor.
Ahí fue cuando Ivette se dio cuenta de algo, su padrino era muy bueno leyendo mentes. Pequeño detalle que olvido, sin embargo sabía que la ayudaría a ella bastante en su estadía.
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— Severus, por Salazar, deja de mirar a esa Gryffindor. — Regulus recrimina a su compañero dejando de leer su libro.
El pelinegro tenía una extraña obsesión con mirar a su mejor amiga pelirroja siempre que podía. Incluso hablaba con ella cada vez que se encontraban, eso era a cada rato.
— Regulus déjame en paz. — Murmura viéndolo mal.
Severus noto que su amiga actuaba algo distinto hoy, al parecer se le notaba emocionada pues hablaba con los pocos compañeros que estaban a su lado.
— ¡Chicos! ¡Noticias! — Una joven Narcissa llega sentándose enfrente de ellos bloqueando la vista de Severus.
— Cissy, más vale que valga la pena. — El joven Black mira con aburrimiento a su prima.
— Bueno resulta que hoy llegó una mujer misteriosa a la escuela. — Explica entusiasmada por el descubrimiento, Narcissa era por mucho la chica más informada de la escuela.
— Al punto Cissy.
— Los pocos estudiantes que lograron verla dicen que es tan hermosa como una flor, lleva apenas algunos días aquí pero es difícil verla en persona. — Piensa brevemente en lo que le dijeron. — Un grupo de Hufflepuff escuchó que el mismo Dumbledore dijo que esa mujer sería una nueva maestra.
— Ya veo. — Severus dice sin interés, si esa mujer daría D.C.A.O muy seguramente no duraría el año.
— Vamos chicos, deberían estar emocionados.
— Si es una Slytherin entonces valdrá la pena tomar sus clases. — Cierto pelinegro de apellido Black vuelve a su lectura.
— Si claro, y tú Severus deja de verla. — Le señala en regaño.
— Solo la estoy cuidando. — Se excusa avergonzado.
— Si claro. — Ambos Black responden sarcásticos.
¿A quien le iba a mentir?
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¡Por fin! El primer capítulo de esta historia, recuerden que no será tan exageradamente larga y que actualizaré cada dos semanas para no hacerme bolas con la historia principal ❤️
De verdad les agradezco si me corrigieran con la ortografía, así me ayudan bastante 💕
Cómo se dieron cuenta no es largo el cap, apenas son 1000 palabras que es lo que tengo planeado para todos los capítulos.
Espero les guste y esperen la próxima actualización ✨
