Capítulo 16: Ocean Beach Restaurant

4 2 1
                                    

Mini maratón: 2/2

Estaba en el salón, mientras esperaba a mis amigos. Mi madre, mis hermanos y mis cuñados estaba en la cocina hablando de algo. Cada segundo que pasaba, me ponía más nerviosa.

De pronto escuche que alguien llamaba al timbre de la puerta y mi madre se me adelantó para ir a abrir. Steve, Matt y Bera aparecieron por la puerta, me saludaron con un gesto y me levanté

Steve y Matt estaban hablando y riendo, pero cuando me vieron, los dos se callaron enseguida

-Bebé, estás preciosa –Bera me guiño un ojo

-Tú estás más guapa, amor –le di un beso en la mejilla

Bera iba vestida con un vestido azul pastel un poco más largo que el mío y con tirantes. También llevaba consigo una chaqueta vaquera. Su maquillaje era de colores claros al ser su vestido de un color pastel. En los ojos llevaba una sobra azul clara, se había hecho el eyeliner y las pestañas. Los coloretes eran rosita claro. Y en los labios tenía un brillo de labios de color azul

¿Quién diría que los brillos de labios con colores existían? Para mí, desde ahora

-Celeste –me saludo Steve –estás genial. El rojo te sienta muy bien

-Gracias, que guapo estás.

Steve iba vestido con una camiseta de botones blanca con rayas azules a juego con Bera. Tenía unos pantalones vaqueros y unas vans negras

-Hola Cele, estás hermosa –me dijo Matt con una sonrisa tímida

-Gracias Matt, tú también estas muy guapo –le agradecí con un abrazo e inhalé su colonia que tanto me gustaba

Matt llevaba una camiseta de botones negra, al contrario que Steve. También vestía unos pantalones vaqueros negros y unas Air Jordan blancas y negras también. Llevaba consigo una sudadera. Parece que habían estado eligiendo su ropa a conjunto

Alguien se aclaró la garganta y cuando me giré vi a mi familia. Me ruborice y aparte la mirada, haciendo que Matt se riera

-Bueno –Steve se frotó las mano - ¿nos vamos?

-Sí, vámonos o llegaremos tarde –Bera opino lo mismo

Mis amigos estaban en la puerta de mi casa esperándome, mientras que yo me despedía de mi madre

-Cielo, ve y pásatelo muy bien. Ya sabes no tomes bebidas alcohólicas y después de cenar tomate la pastilla, ¿vale?

-Qué si mamá, ya no soy una niña chica y se cuidarme por mi misma

-Ya lo sé, cielo, pero es que me preocupas. Bueno ya sabes si te empiezas a sentir mal, llámame de inmediato, ¿queda claro?

-Muy claro –le sonreí y me despedí de mi familia

Como ya era tarde, era de noche y la ciudad solo estaba iluminada por las farolas de la calle. No me había dado cuenta de que la ciudad era bastante bonita, y más tenía que serlo el paseo marítimo

Ya llegamos al Ocean Beach Restaurant. Había mucha gente. Cuando íbamos hacia la terraza, me daba la sensación de que los hombres me miraban y me arrepentí de haberme puesto el vestido corto. La terraza estaba decorada con plantas colgantes y luces led.

Nos sentamos en la mesa y a los cinco minutos llegó un camarero que podría tener nuestra edad. Era bastante alto y su pelo era negro, con ojos oscuros

-Hola, buenas noches. Yo soy Bruno y seré vuestro camarero durante la velada –nos saludó el camarero - ¿qué van a querer de tomar?

-Él tomara una cerveza sin alcohol, ¿no amor? –Steve asintió y Bera prosiguió –y yo tomare un kas de naranja por favor

El Despertar de CelesteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora