Lan Zhan.
Cerré los ojos y suspiré lentamente cuando por fin se fue de mi lado.
¿Qué te pasa, Lan Zhan?
—Es la misma sensación que tuve cuando lo vi hace un rato... No es nada. Seguro voy a enfermar. Por ese motivo me siento extraño —acaricie mi abdomen para calmar el malestar que sentía en esa área—. Iré a beber té, o medicina. Ahora no es buen tiempo para enfermar —camine hacia el jingshi.
Al llegar a mi habitación, me prepare un té. Después de beberlo, me senté en posición de loto para meditar y ayudar a mi cuerpo a recuperarse de la extraña sensación.
Todo el tiempo permanecí en meditación, hasta escuchar el anuncio a la reunión con los hijos de los líderes que hasta el momento habían llegado.
La reunión se realizaría todos los días con ellos exclusivamente. Se expondrían todos los puntos de vista, y se planearían las acciones a tomar. Después, ellos serían los encargados de darles las indicaciones a sus guerreros, así, ellos seguirían ejerciendo su rol de líderes.
En el Lanshi, todos estaban sentados en perfecto orden lineal, usando un hanfu blanco para la reunión con su respectivo escudo estampado en ellos. Un gusto a la vista. Al salir, podían usar el hanfu que prefieran, pero no durante la reunión. Todos encerrados en un solo lugar, con una variedad exagerada de colores, seguramente causaría un mareo desagradable.
Me senté sobre mis pantorrillas en el cojín, acomodando el hanfu y sus mangas antes de hacerlo. Involuntariamente miré hacia mi derecha, y justo al lado estaban sentados los representantes del clan YunmengJiang, el mayor al frente y el menor justo atrás.
De repente, el joven Wei Ying giro hacia mí y empezó a sacudir una de sus manos de una forma irrespetuosa, alterando la paz de los demás, solo estaba al lado, pero incluso así era tan ruidoso, un serio problema.
—Lan Zhan... Lan Zhan, soy yo, Wei Ying —al parecer trataba de susurrar, pero el sonido fue tan fuerte, que muchos voltearon a ver. Él sonrió. Sentí un extraño calor en mi cuello, el malestar que había sentido antes volvía otra vez, y ahora parecía que iba a tener fiebre. Deje de mirarlo y gire hacia el frente de nuevo.
El joven Wei Ying hizo una extraña expresión. Aunque gire hacia el frente, por alguna razón todavía pude verlo. Sus ojos se hicieron un poco más grandes, las esquinas de sus cejas cayeron, y su labio inferior sobre salió del superior y se curvo hacia abajo.
¡Qué lindo!... espera, ¿Qué?
Sacudí mi cabeza ligeramente para alejar tan absurdos pensamientos. Fije mi mirada como una flecha exclusivamente para el frente.
¿En qué estás pensando, Lan Zhan? ¿Cómo eso puede ser lindo?
Pensé, regulando mi respiración y calmando mi espíritu.
Después del extraño episodio donde me sentí enfermo, todo fue calma y no se volvió a repetir.
La noche llego y la reunión dio fin, ahora todos podíamos ir a cenar antes de ir a la cama.
Durante la reunión se planeó el entrenamiento para los próximos días, y se designó guardias para las ciudades y pueblos a los que se les brindará seguridad.
Con una reverencia, todos nos dispusimos a salir. Mire hacia un lado, y accidentalmente tope con el joven Wei Ying.
—¡Lo siento! —hice una reverencia para disculparme por haber sido algo torpe.
—No te preocupes por eso, no es nada —dio una palmada en mi espalda haciéndome dar un paso hacia el frente. Verdaderamente sin modal alguno, no quise perder más mi tiempo, así que avance.
ESTÁS LEYENDO
Si el destino nos quiere. Pte2 | WangXian
FanficCuando un joven guerrero llega a un nuevo clan en busca del conocimiento para mejorar sus habilidades en combate, conoce a este hombre frío, tan frío como el hielo, pero este hombre encendió una llama fuerte en su corazón que solo él puede apagar.