★ㅤㅤ -ㅤ mastermind ⠀ㅤ᛬ ⠀
En dónde Jude logra llamar la atención de su celebrity crush
O
Dónde Kendall cae por un británico de acento confuso.
‥... historia finalizada. ━━━★
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kendall's pov
La llegada a Madrid fue una de las peores cosas que he experimentado. Por primera vez, no sentía esa emoción de ver a Jude y saber que me iba a estar esperando. En su lugar, sentía una mancha de soledad que no podía sacudirme.
Kylie, quien iba conmigo en el carro, recargó su cabeza en mi hombro. Creo que sabía exactamente lo que pasaba por mi mente.
— Estoy muy cansada —dijo Kylie, adormecida.
El camino hacia el Bernabéu se sentía interminable, más largo que nunca. Hace apenas cinco horas habíamos llegado y ahora estábamos a punto de presenciar la final que decidiría quiénes irían a la Champions.
—¿Todo bien? —Charles me miró por un momento.
—Todo perfecto —mentí, observando cómo nos acercábamos cada vez más al estadio.
Llegar a la parte privada del Bernabéu me trajo una avalancha de recuerdos. Solía llegar dos horas antes y Jude venía a recibirme, cada vez que tenían un partido y yo había sido invitada. Aunque sabía que estaba exagerando, me causaba enojo que todo esto hubiera sucedido por culpa de Carlos.
El camino hasta el palco privado fue en silencio, ya que mis padres iban hablando con un importante ejecutivo. Cuando llegamos al palco, me sentí tan solitaria; este era mucho más privado que los que la mamá de Jude y yo acostumbrábamos.
—Ya falta poco para que empiece —dijo el ejecutivo.
Durante todo el partido, solo pude observar cómo los de playera blanca dominaban el balón, pero eso no lograba que metieran algún gol. El Bernabéu gritaba eufórico cada vez que algún jugador tenía la pelota. El segundo tiempo fue igual de emocionante, todos gritaban. El ambiente cambió cuando el equipo contrario metió gol, y más cuando hicieron el cambio: Joselu entró y metió gol. La emoción de irse a penales aumentó porque ahora estábamos 1 a 1. Ya veía los penales venir, pero el 14 hizo que Kylie y yo brincáramos gritando cuando logró el 2-1. Ya solo faltaba que lograran aguantar lo que restaba del partido con ese resultado.
Justamente así fue. La euforia que se podía ver en todos lados, los jugadores corriendo y gritando, me dieron unas ganas horribles de ir con Jude y abrazarlo.
Vimos todas las celebraciones desde el palco, incluso cuando Jude estaba llorando. Hasta que el señor con el que mis padres estaban hablando nos llevó a los vestidores, se veía lo más difícil.
—¿Te sientes lista? —Kylie tomó mi mano.
—Algo así —dije, no queriendo llegar, pero cuando me di cuenta ya estaba viendo a los jugadores en rueda, gritando y festejando.
