Farfa se acomodó lo mejor posible en la casa del administrador. Era un lugar sorprendentemente cómodo, con todo ordenado y limpio, lo que claramente indicaba que Rich apenas pasaba tiempo allí. Sin embargo, la casa tenía un ambiente bastante frío y desolado, como si le faltara la calidez de una vida vivida en su interior. Los lugares más utilizados parecían ser el baño, la oficina y la habitación. Mientras se acomodaba, Farfa no podía evitar pensar: "Este hombre está tan metido en su trabajo que seguro ni siquiera come bien". La dedicación de Rich a su labor era admirable, pero también dejaba en evidencia lo absorbente y solitaria que podía ser su vida como administrador.
Una de sus disputas fue sobre dónde dormiría la bebé. Farfa estaba dispuesto a dormir en el sofá, pero todos coincidieron en que no era seguro que la bebé durmiera allí con él. Sin embargo, cada vez que intentaban separarlos, la bebé empezaba a llorar inconsolablemente, lo que hacía que la situación se volviera aún más complicada y tensa.
La única solución que se le ocurrió a Rich fue que los tres durmieran juntos en su cama. Sin embargo, a Farfa no le parecía una buena idea y le daba cierta vergüenza. Después de una charla, acordaron que Rich dormiría con la bebé y Farfa en el sofá. Sin embargo, la bebé estuvo irritable todo el día y le resultó muy difícil a Rich hacerla dormir. Aunque Rich no solía dormir mucho y el tema del descanso no era un gran problema para él, la situación se volvió estresante y agotadora mientras intentaban encontrar la mejor manera de cuidar a la pequeña.
Llegó bastante rápido el día en el que Rich tuvo que encerrarse en su oficina o salir por varias horas a supervisar la ciudad, pagar gastos y cobrar, una rutina agotadora. Mientras tanto, Farfa se quedaba en casa con la bebé, que estaba horriblemente irritable y no dejaba de llorar. En los dos días que llevaban con esta rutina, Rich se dirigía a su oficina por la mañana, permanecía allí unas cuatro horas y luego salía para no volver hasta la noche. Cuando llegaba, estaba tan cansado que solo podía tirarse en su cama, sin poder dormir debido a las preocupaciones y las tareas que le esperaban al día siguiente. La situación se volvía cada vez más insostenible, con ambos amigos luchando por mantener el control en medio del caos.La salvación llegó cuando Farfa necesitó algo de la habitación de Rich;
"Donde mierda está tu chupon ahora?"
Le preguntaba a la bebé mientras está lloraba en el sofá,
Farfa estaba con la bebé, quien nuevamente había perdido su chupon de la noche anterior. Con algo de preocupación, comenzó a buscarlo por toda la casa, revisando cada armario y cada cajón sin éxito. La bebé estaba cada vez más inquieta, y Farfa empezaba a sentir la presión. Empezó a recordar donde estuvo la bebé antes de que rich se fuera a trabajar, y claro!
" Naaa si soy pelotudo"
Con la bebé en brazos, Farfa subió las escaleras y se encontró frente a la puerta de la habitación a la cual nunca había entrado. Un sentimiento de nerviosismo lo invadió. ¿Debería sentir miedo? Se sentía extraño contemplar la idea de entrar en la habitación de Rich sin su permiso. ¿Estaría bien hacerlo? Farfa se detuvo por un momento, indeciso.
" Que se joda la privacidad"
con la bebé necesitando su "tete" inmediatamente, decidió que no podía permitirse esperar. giró el pomo de la puerta y entró, esperando encontrar el chupon,
Apenas entró, Farfa sintió una corriente fría y tranquilizadora que lo envolvía, brindándole una sensación de calma inesperada. Se permitió unos momentos para disfrutar de esa serenidad antes de dar unos pasos hacia el interior de la habitación. Miró a su alrededor, sorprendido por la atmósfera acogedora y reconfortante que encontró. Se preguntó cómo era posible que nunca hubiera entrado allí antes, considerando lo reconfortante que se sentía estar en ese espacio. La curiosidad lo invadió, pero ahora no era tiempo de esas cosas, miro la cama y pudo ver el chupon, a lo que lo tomo lo limpio con su camisa y se lo puso a la bebé, la cual dejo de llorar automáticamente, farfa sonrió y se sentó en la cama, bastante comoda,
Mientras Farfa sentía la suavidad de la cama, la bebé se acurrucó contra su pecho. Farfa la miró y decidió estirarse junto a ella. Después de todo, no era una situación tan grave. Al estirarse, sintió como si estuviera durmiendo en una nube, aunque estaba exagerando un poco. No recordaba haberse sentido tan cómodo en una cama desde que abandonó la suya para dormir en un sillón. La sensación de confort y tranquilidad lo envolvió, haciéndolo olvidar momentáneamente las preocupaciones del día.
Se permitió cerrar los ojos, aunque no tenía la intención de dormir. Sin embargo, era completamente inevitable. Se quedó dormido toda la tarde junto con la bebé, quien tampoco había dormido bien en estos días. Los dos se encontraban en un sueño reparador y profundo, ajeno a las preocupaciones y el estrés que los habían agobiado. La calidez de la habitación y la suavidad de la cama los acunaban en un sueño tranquilo y sereno.
Hola jshd
Un cap un poco más largo pq si
Y como ninguno de ustedes dio un nombre para la bebé se quedará en "la bebé" :(