El recuerdo constante

6 1 0
                                    

PASAN DÍAS, PASAN SEMANAS Y LLEGA EL MES.

Alastor pasaba sus días y sus noches pensando en Luan, aquel chico que le hizo sentir un sentimiento distinto algo que jamás le había sucedido.

Alastor estaba en el hotel como de costumbre, haciendo sus actividades rutinarias atendiendo al hotel y ayudando a Charlie, molestando a Vaggi, yendo a la cantina de Husk y ayudando a Niffti. Pero aún así no dejaba de pensar en él, una y otra vez cada recuerdo de aquel momento se repite continuamente en su mente sin dejarlo descansar, como si fuera una adicción imposible de dejar.
Llega la noche y Alastor sale a tomar el aire fresco para ver si podría lograr liberar su mente de aquel recuerdo.

Alastor fue a ver a su amiga Rosi en el distrito caníbal.
Rosi lo recibió con una grn sonrisa y preparando algo de té, Alastor se sentó de forma tranquila y sin decir una sola palabra; solo se mantenía distraído en sus pensamientos.

Rosi notó ese pequeño cambio por lo que tocó ligeramente el hombro de Alastor el cuál volteo de forma rápida y un poco sorprendida, Rosi lo miro y le dice -Querido hoy te veo muy distraído, ¿Qué te tiene de esa forma?
Alastor sin saber que responder dice -Solo estoy... pensando que haré después de tomar el té contigo.
Rosi un poco dudosa ante la respuesta solo le sonríe de forma crédula y le dice  con inteligencia -Oh, si ese es el caso entonces ya no tndré que preocuparme, por un momento pensé que al fin encontraste a alguien que captó tu atención de forma romántica.
Alastor sin saber que reacción hacer responde de manera inteligente e inmediata -Descuida querida eso jamás va a pasar.

Ambos ríen y beben su té de manera pacífica mientras conversan.
Pasan las horas y Alastorse despide con una sonrisa como siempre de su querida amiga Rosi.

Alastor empieza a caminar por el infierno y empieza a plantearse aquellas palabras que le dijo Rosi, ¿Será que tal vez sea así?¿De verdad a este sentimiento se le llama amor? ¿O acaso solo es un sentimiento pasajero como todo lo demás?
Alastor mientras más piensa en ello entra más en negación de que eso no es lo que le sucede, que seguramente solo fue un sentimiento que durará tan solo un tiempo.

Alastor mira al cielo y ve la luna llena tan reluciente como siempre, empieza a sentir el cálido viento como aquella vez que conoció a ese chico misterioso de nombre Luan; mientras más lo recuerda su corazón late al unísono del viento y sonríe con tanta fluidez como si ese sentimiento que tanto siente fuera lo más real e inimaginable que le hubiera pasado durante su vida tanto siendo antes humano como ahora siendo un demonio, Alastor cierra los ojos para sentir con más claridad aquel sentimiento pero en cuanto abre sus ojos ve al chico misterioso ante la luz de aquella luna llena.

Alastor se sorprende ante tan repentina aparición que no puede evitar sentir cierta alegría y ese sentimiento desconocido que aún es para él un misterio.
Luan voltea, lo mira directamente a los ojos mostrando un sentimiento de aprecio y cariño al ver a Alastor por lo que le dice desde su corta distancia - Te dije que volvería venadito.

Alastor no siente ninguna molestia ante tal apodo que le a dado, al contrario siente una calidez muy grande por todo su cuerpo y le responde con una sonrisa amable diciéndole -Ya me había cansado de esperar tanto joven Luan

Alastor no siente ninguna molestia ante tal apodo que le a dado, al contrario siente una calidez muy grande por todo su cuerpo y le responde con una sonrisa amable diciéndole -Ya me había cansado de esperar tanto joven Luan

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Alastor y El Chico Misterioso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora