Acompaña a Luffy junto a su tripulación en esta aventura donde conocerán el mundo en sí, donde un verdadero capitán estará al mando de la tripulación. Nuevas organizaciones estarán a la vuelta de la esquina.
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Capítulo 3-Inicio De Los Lazos (Parte 2).
La mujer que caminaba junto a ellos, le parecía curiosa. Luffy podía ver claramente un odio que irradiaba la mujer. Aunque lo trataba de ocultar, se podía notar si veías atentamente. Era verdad cuando dijo que el "Oro" de ese payaso Buggy no le importaba para nada. Necesitaba llegar a donde se encontraba ese tal "Buggy" y destruirlo.
No ingreso al mar solo para que venga cualquier Pirata o Marine a molestarlo. Destruiría a cualquiera que lo molestara, no venía a jugar a ser un Pirata... era un Pirata. Aunque tenía su propia ideología, eso no cambia el hecho de lo que es, y lo que podría llegar a convertirse en un futuro.
El camino que tendría que recorrer será duro, pero él ya sabía eso. Incluso si tiene que caminar por el mismo infierno, caminaría. Su objetivo es llegar a ser el "Rey", y nadie se meterá en su camino. Incluso si eso significa que tenga que enfrentarse a los famosos "Yonkou", o a los tan aclamados "Almirantes".
La chica frente a ellos, caminaba con cierta torpeza, se podía notar que estaba algo nerviosa. A su lado, Zoro, mantenía su mano en la empuñadura de sus katanas; preparado para cualquier ataque sorpresa.
Nami estaba nerviosa. Ella misma no sabía por qué era eso, en todo lo que lleva de estar reuniendo dinero, se había topado con muchos tipos de hombres. Pero era la primera vez que se topaba que él, el mismo hombre que caminaba detrás de ella, a quien dirigía a donde se encontraba los Piratas Buggy. Cuando la miró a los ojos, le hizo saber que ella no lograría nada. Su intención al inicio era traicionarlos para que que Buggy no la matara, y así ganarse su confianza. Era una idea estupenda para poder descubrir dónde se encuentra todo su tesoro. Pero esa misma idea se esfumó. Algo dentro de ella le decía que no intentará nada para molestar a esta persona. Era peligroso, le hacía ver como una niña que intenta hacerle una travesura a un adulto. Y también estaba la otra persona que mantenía su vista puesta en ella, podía sentir como sus ojos estaban clavados en ellas. Por un instante intentó ver detrás de ella, y observó con horror como el hombre peliverde mantenía su mano en esa empuñadura de katana. Podía ver su cabeza rodar por el frío suelo si intentaba hacer cualquier tontería.
"Tiene buen trasero" pensó para si mismo. El hecho de que sea un pirata, ni significaba que no admirara los placeres de la vida. "¿Aún falta mucho mucho para llegar?" Preguntó aún mirando su trasero. "Eh... disculpa, no sé tu nombre, ¿...?"
"Me llamo Nami, eso es lo único que te diré. Y respondiendo a tu primera pregunta, no falta mucho".
"Largo..."
Se detuvo en seco.
Zoro a su lado también se detuvo al ver a su capitán detenerse.
"¿Sucede algo, Luffy?" Preguntó con algo de curiosidad el cazador de Piratas.
