Jimin tenía una semana trabajando en el palacio, durante ese tiempo no había visto al rey, y para ser sincero no quería tener que cruzarse con él. Por naturaleza era curioso y tenía miedo de que si lo veía rompiera la regla de no mirarlo al rostro. Así que agradecía que la mayoría de su trabajo fuera dentro de la cocina y las pocas veces que salía durante el día, fuera al jardín trasero donde estaba el huerto y ese era un lugar que el rey jamás visitaría.
—Jimin, ¡ven acá! —el grito de la jefa de cocina lo hizo detenerse de su labor y corrió hacia ella.
—Mande señora — dijo servicial en cuanto llegó hasta ella.
—Quiero que te limpies perfectamente, está noche ayudarás en el comedor, una de las sirvientas se siente mal y hay poco personal, el mayordomo del rey te dirá como le gusta que la mesa esté servida y por favor por lo que más quieras, no levantes la vista cuando estés frente a él —le advirtió al último y nervios instantáneos lo embargaron.
Sin más remedio que obedecer volvió a terminar sus labores y se apresuró para ir a su habitación asignada y limpiarse. Se cambió de ropa y se puso un hanbok en color gris claro, se peino su cabello negro y lo amarro en un medio moño dejando la mitad suelto, normalmente lo traía completamente recogido, pero quería verse lo más presentable posible. Quizá él no podía ver al rey, pero él sí lo vería y no quería avergonzarlo.
Cuando la hora de la cena llegó, estaba terriblemente nervioso, tomó la charola con los platos y salió al comedor, respirando. Ahora la mesa estaba vacía, pero en cuanto terminara de acomodar, el rey llegaría y solo rogaba por no levantar la cabeza.
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—Señor la cena está servida.
Jungkook asintió y se colocó la máscara que se veía obligado a usar, se negaba a ver la misma mirada de asco y repulsión que le había dado su prometida cuando rompió su compromiso, en los ojos de sus empleados.
Una vez listo salió de su habitación y caminó seguido de su sirviente personal, Namjoon era el único que tenía permitido verlo a los ojos y solamente porque lo conocía desde niños y lo veía más como familia que como empleado. Él era su única compañía ahora que sus padres se habían retirado al campo a descansar.
La puerta del comedor se abrió para él, como siempre los ojos de todas las sirvientas bajo al piso, las analizó cuando se fijó en el joven a la orilla de la fila, era un hombre joven, y supuso que era un nuevo sirviente. Antes de sentarse se paró frente a él.
—¿Eres nuevo en el palacio? — le preguntó ya que le gustaba saber quienes eran los que trabajan a su alrededor.
—Sí mi señor —respondió el chico y su voz lo dejó sorprendido, era tan dulce y suave, así como él se veía.
—¿Cuál es tu nombre?
—Jimin señor.
Podía notar el nerviosismo en su voz, y supuso que habían vuelto a amenazar a los nuevos con la muerte si lo veían a los ojos, en ocasiones su nana exageraba.
—Bienvenido al palacio —le dijo antes de tomar asiento a la mesa.
Jimin suspiro pesado, cuando vio los pies del rey detenerse frente suyo, le rogó a todos los dioses que mantuvieran su cabeza pegada al piso, y se sintió desfallecer cuando lo escuchó hablar, su voz era grave y fuerte las ganas de ver al hombre que poseía esa voz fue demasiada, ahora mismo mientras escuchaba los cubiertos y la discreta plática del rey con su mayordomo quería verlo.
Cuando la cena terminó, ayudó a levantar los platos y a limpiar todo, el rey se levantó, agradeció por la comida y salió, solo en ese momento se sintió libre, corrió a la cocina. Los cocineros y demás empleados ya estaban comiendo, tomó un plato con arroz y se sentó en un costado libre.
Una vez lleno quiso dar un paseo por el huerto, despejar su mente antes de dormir. El cielo estaba libre de nubes, así que las estrellas se veían mucho más brillantes, y la luna llena se veía aún más grande que siempre, se sintió tan en paz, tan relajado, se sentó en una piedra y comenzó a cantar.
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Jungkook no podía dormir, así que decidió ir a dar una vuelta por el jardín, salió de su habitación, ya era tarde, el personal de servicio dormía, solo los guardias apostados en las entradas se encontraban, pero estaban lejos y sabía que no se acercarían cuando lo vieran, así que no se puso la máscara.
Un suave viento soplaba dándole frescos a la noche, la luna brilla en su máximo esplendor, camino lentamente hasta que llegó al jardín trasero y escucho el canto más bello que nunca antes hubiera oído, hipnotizado por el sonido caminó hasta él claro que bordeaba el jardín y vio un ángel.
Sin detenerse a pensar en nada más se acercó tratando de no hacer ruido, pero fallando cuando estaba a solo un centímetro del dueño de tan bella imagen.
El ruido de una rama al romperse sobresaltó a Jimin, haciéndolo voltear sorprendido, sus ojos se abrieron con asombro al ver al hombre frente a él, era el rey y no llevaba máscara.
✨✨✨
Ya se vieron ahora que pasará?
Nos leemos bellezas...
Besitos 😘😘😘
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사랑의 상처 ★Love Scars★
FanficJungkook es el rey del reino de Corea, amado y admirado por su pueblo. Tiene todo lo que podría desear, una bella prometida con la que pronto se casará. Pero cuando su reino es atacado, una herida en su rostro cambia su vida para siempre. Jimin lleg...