Camina por el pasillo. Ya terminado el trabajo por hoy Husk suspira satisfecho sabiendo que puede regresar a casa. No hay nadie en su piso. Usualmente no se queda hasta tan tarde, a excepción de los días en que tiene tanto trabajo. Va en dirección de los ascensores, pero ve la luz en la sala de grabaciones de Alastor, debe estar terminando de alistar su maleta, decide ir con él, pero a medida que se acerca a la puerta, huele en el aire el dulzor ¿Que sucede?, entra a la habitación y el olor es aún más intenso-¿Alastor?-pregunta por él, pero no recibe respuesta, sigue el olor y ve por el vidrio. Entra abruptamente a la sala-¡¿Qué sucede?!
***
La música se escucha de fondo. Su cuerpo es aprisionado y las manos recorren su espalda, la voz del señor Alastor es diferente, más suave. El nudo en su garganta baja-¿Alfa?-el mayor se remueve, lo ve a los ojos, y Vox se sonroja, porque luce bonito. El señor Alastor es bonito. El mayor lo suelta y se aleja apenado.
-¿¡Que sucede?! ¡Alastor!- siente las feromonas en el aire, y cubre su nariz. Mira al menor que se mantiene parado nervioso. Alastor tiembla a un lado suyo muy sonrojado. Toda la escena era peligrosa, un omega adulto intentando seducir a un menor con sus feromonas, simplemente se podría explicar así.
Se acerca, y el omega gruñe en rechazo, temiendo por la proximidad del alfa. Husk toma al menor, jalándolo del brazo y sacándolo del lugar. El omega intenta levantarse y detenerlo, pero Husk gruñe mostrándole los dientes, haciendo que agache las orejas. Vox siente un golpe en su pecho al ver la escena, y aun resistiendo a la acción del desconocido, es sacado del estudio, pero algo dentro de él gruñe. Es el cachorro queriendo volver con Alastor - ¡Suéltame!- grita, para luego morder la mano del mayor en un intento desesperado por volver. Husk grita del dolor, soltándolo, haciendo que el menor caiga. Vox reacciona y mira asustado la mano del mayor, está sangrando. Los ojos felinos de Husk lo miran en un rojo intenso, haciéndolo temblar.
-Vox- la voz del padre aparece. Husk se gira, escondiendo su mano en su espalda- Oh, Husk. Hace mucho que no te veía muchacho.
-Señor. - saluda cortes.
El mayor sonríe, y luego mira a su hijo-¿Qué haces en el suelo hijo? No es momento de jugar- lo levanta- ¿Y Alastor?
Husk habla apresurado-Se tuvo que retirar por una emergencia. Me pidió que trajera al niño con usted.- comenta entendiendo que es la mejor respuesta por ahora.
- Oh entiendo. Gracias Husker- estrecha su mano, toma a su hijo y camina- Sigue haciendo un gran trabajo-se despide.
Padre e hijo salen del edificio. Ya en el auto el menor se mantiene muy callado. -¿Sucede algo?-pregunta su padre preocupado.
El infante mira por la ventana, sus ojos tristes, y responde de forma sencilla-Quería estar un poco más con él.
-Hum-el mayor lo mira atento- Llévanos a casa- indica al conductor. El auto arranca, adentrándose en la noche, mientras los ojos del menor aun observan por la ventana, mirando específicamente aquel piso en lo alto del edificio, aún iluminado.
***
Husk regresa al estudio con un gran sonrojo. Tuvo que buscar en los escritorios de sus compañeras omegas por algún supresor. Teniendo uno en la mano, respira tomando la mayor cantidad de aire y entra al lugar. El aire es denso, aun con el omega a la defensiva logra inyectarle el supresor y abre una de las ventanas. Sale del lugar y espera en las sillas afuera.
Luego de varios minutos escucha la puerta abrirse. Alastor luce impecable, como si hace tan solo unos minutos no fuera tan lamentable.
-Luces mejor - el otro no responde. Y suspira, la situación es incomoda, sabe que tiene que hacer la pregunta- ¿qué sucedió ahí?
Alastor aprieta los puños, es frustrante tener que hablar con la verdad, incluso más cuando esta es tan problemática-Ese niño, creo que es un alfa.
Apresurado Husk responde-No lo puedes saber. Todavía es menor, su aroma no se presenta.- toda la situación lo está descolocando.
Alastor al fin lo mira, y puede ver que sus ojos están rojos y agotados- ¡Tampoco lo entiendo! ¡Pero mi cuerpo! ¡Mi cuerpo reacciona a él! - puede ver la expresión un Husk- ¡Y ya lo sé! suena horrible, pero no es como si lo pudiera controlar. ¡Y juro que lo intento!, pero una voz, no mi voz, habló y no se detuvo-esta desesperado, coje su rostro y sus ojos parecen desorbitar.
Inconscientemente, Alastor había gritado todo esto mientras se aproximaba a Husk, asiento que retrocediera hasta chocar con una de las puertas-¿De qué hablas?
-Lo escuche Husker, escuche a mi lobo hablar. - toma aire para continuar y se abraza a si mismo mientras se aleja- Fue tan raro. Nunca me había sucedido algo igual. Solo cuando lo tengo cerca pareciera que no soy yo.
Husk se endereza y luego de unos segundos suspira, recordando por qué no se mete en los asuntos de otros, solo le causan dolor de cabeza-¿Qué quieres que te diga? -peina su cabello negro hacia atrás y frota sus ojos, quiere irse a casa a descansar- Solo te diré que te alejes de este problema lo más que puedas. Porque mires como lo mires, hay una forma en la que acabará, y no será buena para ti.- habla duro como siempre, pero con la verdad.
Alastor agacha la cabeza y sus brazos caen. Nunca pensó verlo en ese estado, pero es su amigo, pone un brazo sobre su hombro e intenta calmarlo- Podrás superarlo.
***
Los días continuaron. Alastor cumplía con su rutina devotamente, evitando la posibilidad de cruzarse con su jefe o... Agita la cabeza, alejando el pensamiento. Ese día llego temprano a su estudio, aprovecharía en ir al comedor, camina aun por los pasillo bañados en luz naranja, encuentra una mesa vacía y toma asiento con su bandeja. A solo centímetros de probar su primer bocado recibe el ya conocido efusivo saludo.
-Alastor
En ese momento siente el frio correr por su espalda. El hombre toma asiento a un lado suyo y lo abraza por los hombros.
-Que gusto verte muchacho.
-Igualmente señor-sonríe nervioso. Siente tanta pena estando delante suyo por lo que le hizo a su hijo.
El mayor le comento sobre la nueva programación y llegada de nueva discografía al estudio, también lo felicito por los buenos números en su programación. La platica parecía ir a la perfección.
-...así que continuaremos con el mismo horario por ahora, no quiero que luzcan como un vampiro, despierto toda la noche- ambos ríen, el mayor toma un sorbo de su café- En otros asuntos. Me encuentro algo preocupado.
-¿Sobre que señor? - Alastor lo mira curioso.
- Vox, mi hijo- la mención del menor hace que Alastor acelere el final de su almuerzo.-No se encuentra con buen ánimo, siempre es un niño feliz, pero últimamente esta más callado. -Alastor se siente cada vez más incómodo- No sé qué podría alegrarlo.
Inconscientemente esta noticia afectaba al omega, saber que el menor se encontraba triste lo entristece a el también.
-Podría regalarle un instrumento-ante la mirada sorprendida del mayor intenta escusarse-Lo digo porque la música ayuda a mejorar habilidades como la memoria, la concentración y la disciplina y contribuye a un mejor estado de ánimo.
El mayor sonríe- Tienes razón-lo piensa por un momento- Un piano. Un piano podría ser una gran idea. Y tu podrías darle clases.
Alastor casi escupe su cafe -¿Yo?
-En la escuela de periodismo mostraste un gran talento, no seas modesto.
-No lo creo señor. El horario-
-Seria el fin de semana. Vox también tiene clases durante las tardes.
-Pero-y no sabe si fueron los ojos azules del hombre que le hicieron recordar a los del menor, o el no tener excusa alguna o el vago pensamiento de poder pasar más tiempo con el niño. Que termino aceptando.
Mierda. ¿Y ahora que haré teniéndolo tan cerca?
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mi dulce alfa | RadioStatic
FanfictionAlastor conoce a su alfa, pero hay un problema, ¡este es un niño!