9 Corazón Oscuro

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Jean Grey tomó a Ray por la muñeca, impulsivamente y ansioso. Incapaz de creer lo que presenció, en lo que participó. Entraron en ese callejón y Ray cruzó los brazos, esperándola.

Abrió el cubo de basura y recogió cuatro pesadas bolsas negras llenas de dinero, las tiró al suelo y esperó una explicación. Ray solo se quedó allí, él no dijo nada, pero ella sintió que sus ojos negros estaban huecos como nunca antes.

No siempre fue amable, podía estar muy desapegado. Pero al menos, se comportó como un humano.

Ahora, sin embargo, sus ojos se veían completamente diferentes. Como si pudiera tomar un cuchillo en cualquier momento y sumergirlo en su corazón.

Una de las bolsas comenzó a levitar hasta que aterrizó a sus pies, fue entonces cuando su rostro cambió drásticamente.

"Fuiste tú..." Reconoció a la persona que lo había ayudado, pero nunca pudo haber pensado que era Jean todo el tiempo.

"¿Por qué lo hiciste?" Ella preguntó.

"¿Hacer qué?" Se rió amenazantemente.

"¿Por qué robar el dinero? Pensé que solo querías salvar a los rehenes, salvar al padre de Annie, ¿por qué recoger el dinero?

Ella lo agarró por el cuello de su camisa, con lágrimas en los ojos como si un ídolo hubiera muerto. Ella se había apresurado por su seguridad, se había puesto en riesgo y había pensado que estaban haciendo algo bueno, siendo héroes. Pero resulta que... se convirtió en cómplice de un crimen.

Cuando ella levantó la mirada para mirar a Ray, él sostenía sus dos muñecas, mirándola como si no fuera más que basura. Jean se sintió sin aliento debajo de esa mirada.

"Entonces, ¿qué vas a hacer, Jean...?"

"R-Respóndeme, por favor... ¿por qué robar el dinero?"

"Tengo ambiciones... las ambiciones necesitan dinero. Vi una oportunidad y la aproveché, eso es todo. ¿Eso es demasiado difícil de entender para ti?" Por su parte, Ray solo pensó que era una circunstancia lamentable. Podría haber sido perfecto, pero tenía que ser Jean.

"Pensé que eras un buen tipo. ¡Pensé que estabas salvando a los rehenes! ¡Por eso intenté ayudar! ¡Sé cómo maltratan a los mutantes, así que incluso traté de cubrir tu identidad!"

"Salvé a los rehenes, pero ¿y qué? ¿Esperabas que dejara ese dinero allí cuando había una oportunidad tan perfecta? ¿Eres estúpido?"

Se sintió mirada, con las manos agarrotadas de su cuello. Se sentía tan extraño.

"No actúes como si me conocieras, Jean"

Ray recogió las bolsas, les sacó algunos billetes y los tiró al suelo.

"Detuviste algunas balas y desviaste las cámaras. Aquí está tu pago, si yo fuera tú no lo pondría en un banco".

"¡No necesito tu dinero sucio!"

"Entonces no lo tomes... y te lo advierto. Si me exponen, iré a por ti primero" Se fue así.

Jean cayó de rodillas... jadeando, tratando de resistir el dolor de cabeza recurrente que le causaron sus poderes. Ella tomó el dinero y lo miró profundamente, temblando. Era dinero sucio. Completamente en contra de lo que sus padres le habían enseñado.

"Tengo ambiciones, ambiciones necesitan dinero... Vi una oportunidad y la aproveché.

Mientras todavía estaba en el suelo, vio pasar un taxi, Ray lo abordó. Solo le dio una última mirada fría antes de irse.

Marvel: La pelea multiversalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora