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En eso la maldición es destruida y por allí entra un chico de cabello negro con el uniforme de una escuela de Hechicería. Este se nos queda mirando a lo que simplemente le sonrió y nuevo mi mano a modo de saludo

—no deberían estar aquí– habla en nuestra dirección

—y se supone que nadie debía romper el sello del objeto maldito pero mira, aquí estamos– le responde Tou-Kun burlón

—son hechiceros?– pregunta con los ojos entrecerrados en nuestra dirección

—no nos llamaría de esa forma debido a que no estudiamos en ninguna preparatoria de Hechicería pero en lo que te respecta somos poseedores de energía maldita– le responde Ten-Kun

—un momento!! Ustedes tienen energía maldita Sempais?!– Exclama el pelirrosa incrédulo en nuestra dirección

—no es por nada pero dudo que esté sea el mejor lugar para tener está conversación y por si no lo saben son la una de la mañana, así que algunas personas queremos ir a por un antojo de Media Noche– interfiero queriendo terminar la conversación lo antes posible

Pero entonces mis instintos me indican que algo se acerca cosa que tanto Ten-Kun como Tou-Kun parecen notar

—apartense!– advierto mientras jalo al chico de pelo rosa y Ten-Kun con sus hilos mueve al azabache para evitar que sea tomado por la maldición que entra por el techo 

—Fushiguro!– grita el chico con preocupación hacia el Hechicero

La maldición no tarda en embestir en dirección a este último que invoca a un Shikigami de Ave pero aún así la maldición lo estrella contra la pared logrando que escupa sangre, para luego destruir la pared mandandolo a volar hacia afuera

—eso debió doler– comenta Tou-Kun divertido

—lo sé– concuerdo dando una leve risa antes de que el pelirrosa pase corriendo por mi lado hacia la maldición –en serio dejaremos que un humano con un poco más de fuerza se luzca más que nosotros?– pregunta

—claro que no– respondo mientras que salgo por el agujero hecho por la maldición callendo en la azotea de la escuela. Entonces por mi lado pasa una de las marionetas de Ten-Kun junto a Tou-Kun que comienzan a luchar de forma leve con la maldición

—ire a curar al Hechicero, oí como se le rompieron algunas costillas– avisó

—esta bien– responde Ten-Kun a mi lado, por lo que dejó un beso en su mejilla antes de abrir un portal hasta quedar junto al azabache que me observa confundido

—qué haces?– cuestiona

—vengo a curarte– respondo obvia –o acaso quieres morirte por qué una costilla te perforé el pulmón?– pregunto alzando una ceja escuchando como chasquea la lengua pero no dice más nada

Viendo que no pone objeción utilizo mis habilidades de aniripsa para curarlo totalmente escuchando un jadeo sorprendido de su parte. Al terminar saco un pañuelo con el que comienzo a quitar la sangre de su frente

—qué haces?!– pregunta alarmado y con las mejillas levemente sonrojadas

—"adorable"– pienso divertida sientiendo como esos dos se muestran molestos, algo que se me confirma cuando un escombro impacta cerca de nosotros sobresaltado al azabache –viendo que ya estás bien tómalo y quita la sangre de tu frente– hablo entregándole el pañuelo justo cuando una enorme energía maldita aparece en el lugar

Volteo alarmada viendo cómo Tou-Kun retrocede hasta quedar con Ten-Kun mientras que unos tatuajes aparecen en el cuerpo del pelirrosa que exorcista la maldición de un simple movimiento

—el hizo lo que estoy pensando?– pregunto sorprendida y asqueada

—si– me responde el Hechicero

—mierda, la cosa se acaba de complicar cabrón– murmuró

Observo la encarnación del espectro de clas especial divagar extasiado mientras observa la ciudad. Pero entonces este se sujeta a su mismo la cara y mantiene una conversación consigo mismo que termina en que la energía maldita comience a suprimirse hasta quedar guardada en el interior del chico

Aunque alzo una ceja viendo cómo el Hechicero hace una puse y la energía maldita comienza a arremolinarse a su alrededor dejando ver qué está a punto de utilizar su ritual maldito

—este mocoso es suicida no?– pregunta Tou-Kun de forma sarcástica

—ciertamente– concuerda Ten-Kun mientras que vuelve a guardar su marioneta. Viendo la situación vuelvo a guardar mi katana en el sello mientras me dirijo hacia Ten-Kun y Tou-Kun

Aunque una distorsión en el espacio llama mi atención viendo cómo un hombre alto de cabellera blanca con los ojos vendados aparece. Mis instintos me dicen que tenga cuidado con él

—"este debe ser Gojo Satoru, aquel que es llamado el Hechicero más fuerte"– le analizo

—vaya Megumi-Kun! Aquí hay mucha más gente de la que esperaba!– exclama de forma animada –por cierto, dónde está el objeto maldito?– pregunta confundido

—em disculpe, pero, me lo comí– responde el pelirrosa de forma nerviosa

—en serio?– pregunta incrédulo el albino

—así es– respondemos a coro

Luego de ello se prepararon para que el pelirrosa dejara salir nuevamente a la maldición y así dar lugar un enfrentamiento de 10 segundos entre está y el Hechicero más fuerte. Tou-Kun y yo estábamos emocionados por verla pero no pudimos ya que Ten-Kun prácticamente nos hecho sobre sus hombros y nos llevó a casa. Todo bajo la excusa de que no debíamos vernos demasiado involucrados en el asunto

Aunque esto al final no sirvió de mucho ya que al día siguiente el albino apareció en nuestra casa con tal de invitarnos a unirnos a la academia de Hechicería como estudiantes de primer año. Cómo tanto Tou-Kun como yo nos encontrábamos aburridos y nos daba curiosidad no pudimos mucha resistencia, al contribuir de Ten-Kun que estaba bastante recio pero que aceptó con la condición de ambos haríamos lo que el quisiera un día que él determinará algo a lo que terminó haciendo un trato conmigo para asegurarse de que no nos escaparamos

Ahora solo esperemos que no se le ocurra nada demasiado bizarro

Obligada a BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora