•USO DE SIGNOS•
- ( - ) = Una persona habla.
- ( - ) = Lenguaje de señas.
- ( " " ) = Pensamientos.
- ( _ ) = Voz lúgubre/enferma.
- ( [ ] ) = Eco de voz/objeto.
Era algo complicado el pensar que hay una guerra casi a la vuelta de la esquina, acechandonos, lista para atacar en cualquier momento; era preocupante y desalentador para la manada mantener a los cachorros dentro del perímetro de vigilia, no solo por el bien de los pequeños, si no también para evitarles el miedo a los padres, a las madres, a los hermanos, a la manada completa, de sentir ese miedo, esa inseguridad, de perder a sus pequeñas crías a manos de los pequeños salían fuera de la la mañana siguiente, despertamos antes de que salieran los primeros rayos de luz que iluminan las grandes montañas.
- Kiran, Kiran, - sentía como me sacudían bruscamente, tratando de despertarme de mi profundo sueño, el cual amenazaba con irse, por tales sacudidas, y su cómplice le era de mucha ayuda, los cálidos rayos de sol, daban de lleno en mi rostro, aunque en un inicio, no fueron tapados en su totalidad por la misteriosa presencia que deseaba interrumpir mi perfecto sueño.
- No,... 5 minutitos más, - me moví de tal forma que le di la espalda a los tan molestos rayos de sol, y a la presencia de quien osaba interrumpir mi perfecto sueño; en definitiva, por más que me tenga que acostumbrar a cumplir con las guardias nocturnas, no creo que pueda acostumbrarme a levantarme temprano.
- ¡¡KIRAN!!, ¡¡KIRAN YA DEJA DE HACERTE EL CHISTOSO Y LEVÁNTATE DE UNA BUENA VEZ!! - al parecer terminé de colmarle la paciencia a esa presencia tan misteriosa; por lo que me voltee, sujeté el brazo con el cual me estaba sacudiendo, y de un rápido movimiento lo derribé, cayendo boca abajo, me puse encima de él, doblando su brazo en un ángulo de 45° sobre su espalda - ¡¡YA, YA, YA!! - escuché como se quejaba ante mi dominio sobre el - ¡¡KIRAN, YA VASTA!!, ¡¡NO HAY TIEMPO PARA JUGAR!! - lo miré de una forma juguetona y burlona, me gustaba ver a mi hermano enojado.
- Niños, - sonó una débil voz en lo profundo del cuarto - ¿Por qué todavía están aquí? - al parecer, habíamos despertado a mi madre; quien venía con nuestro nuevo hermanito que aún dormía plácidamente en sus brazos.
- Nada mamá, solo aquí,... Jugando - solté el brazo de mi hermano, pero aún no me movía de su espalda, lo contrario, me acomode sobre ella.
- Niños, deben irse, su padre los debe de estar esperandolos. - dijo aún cansada.
- Si madre, no te preocupes. - dijo Ojos Azules con algo de dificultad, tratando de quitarme de encima suyo - Solo trataba de despertar a tu hijo,... - hizo una pequeña pausa para jalar aire por el esfuerzo que hacía para quitarme de encima - Que duerme y pesa como un tronco... - nos reímos ante el comentario hecho por mi hermanito, mi madre nos dio una mirada divertida, y no quise hacer que tuviera corajes o preocupaciones, por el reciente parto, así que me quité de encima de Ojos Azules, y lo ayude a levantarse.
- Bueno, creo que ya es hora de irnos, - solo eché un vistazo a los alrededores mientras me estiraba un poco, ya que aún no me terminaba de despertar muy bien, una pequeña mirada de mi madre, me dijo que algo andaba mal - Madre, no te preocupes, - posé mis manos delicadamente sobre la cabeza de mi madre, quien se veía que hacía todo lo posible por no derramar las traicioneras lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos - Todo va a salir bien,... - no pude terminar de calmar a mi madre, ya que mi hermanito me interrumpió.
- Descuida, lo menos que quiere padre es un enfrentamiento con esos humanos, solo... les vamos a dar una pequeña advertencia. - aún si las palabras fueron algo reconfortantes; ese brillo de preocupación no se desvanecería tan fácilmente de su rostro.
No pasamos mucho tiempo en silencio; tal parece que todos ya estaban reunido, y los únicos que faltaban éramos nosotros.
- Bueno;...padre estará enojado con nosotros.
- Ohh, no me digas, y... ¿Cómo te diste cuenta de eso? - se cruzó de brazos y me dió una mirada algo hastiada.
- Ehm, no lo sé,... - puse mi mano sobre mi mentón, haciendo una cara pensativa; sabía bien que lo desesperaba más, pero como buen hermano mayor que soy, decidí jugar un poco más con su paciencia. - Puede ser porque los demás simios ya se están reunidos en la explanada, preparando sus pinturas, están afilando sus lanzas, - en lo que hablábamos, me acerque al borde para observar a los simios prepararse; para luego girar para ver el seño fruncido de mi hermano.
Esto era lo único que necesitaba para empezar el día, me alejé un poco del borde, fuí en dirección de mi madre, deposité un suave beso en su frente.
- Shh, tranquila, todo va a estar bien.-sin más me apresuré a correr hacia el borde y saltar - Nos vemos lento.
- ¡¡¡ OYEEE !!! - mi hermano gritó, saltando al igual que yo, pero más lento; yo no tardé mucho en llegar hasta abajo, por lo que me apresuré a correr para evitar que mi hermano me cayera encima mío; me escabulllí entre la multitud de simios hasta llegar al centro de la explanada, casi al frente del montículo sobresaliente de piedra.
- Oye, - una mano se dejó caer pesadamente sobre mi hombro, volteo la cabeza lentamente, temiendo que sea mi hermano; pero era Maurice - Tienes que prepararte. - sin más opción, tuve que ir hacia donde me indico, me sentó en el suelo como si fuera un niño chiquito, sentándose en frente de mí con un cuenco de pintura blanca, me esparció la pintura por mi cara, bajando hasta mi abdomen, en donde me puso un diseño que parecía estar remarcando mis costillas, no tardó más de 15 minutos - Ahora, ve al centro y espera con los demás.
Después de unos cuantos minutos de espera, mi padre se alzó a la vista de todos, a su lado derecho estaba Koba y Rocket, a la izquierda, estaba Maurice, todos con un semblante cerio.
- Simios; hoy, iremos a dar, una, advertencia. Humanos, no ser, bienvenido, - conforme las palabras salían de su boca, el bullicio aumentaba, gran cantidad quería exterminarlos, pero otro solo tenían por el inicio de una guerrera, y otros creían que podíamos coexistir - Y,... Y si ellos, volver, simios, darle su, merecido.
Todos estallaron en alegría al escuchar las palabras que salieron de la boca de mi padre; digo, yo tampoco fui la excepción, no solo porque fuera mi padre, sino que por una simple razón, quería venganza por lo que le hicieron a Ash. Koba dió unos pasos al frente al término deo discurso de mi padre.
- Ustedes, a los árboles; grupo de César, ir en la... - era el encargado de distribuir a los simios; Ash y Rocket venian junto con los caballos, mi padre tomó el suyo, y con un grito empezamos la travesía por el bosque hasta la base humana.
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EL PLANETA DE LOS SIMIOS • _ NUEVA REALIDAD _ •
RandomEn una realidad alterna, donde Ojos Azules no es el primogénito de César, sino que es su hermano mayor, Kiran, quien es la copia exacta de César, no solo fisicamente, él piensa y actúa como su padre; pero, al igual que su hermano menor, es muy cerca...