Back to December

Capitulo II - The way I loved you

Charlie había pasado una noche terrible.

Después de su imprevisto encuentro con Nick y la reveladora sorpresa de su paternidad, se dió la media vuelta y desapareció entre la multitud, dirigiéndose directamente a casa. Sus padres lo llamaron cuando llegaron al mercadillo pero Charlie se excusó diciendo que había vuelto a casa porque se sentía enfermo.

Y era verdad. Charlie se sentía anímicamente peor de lo que se había sentido en muchísimo tiempo. Encontrarse con Nick había sido la gota que derramó el vaso sobre todas las cosas malas que le habían pasado en las ultimas semanas, y enterarse, además de que Nick aparentemente era padre de un niño, había sido un evento verdaderamente catártico.

Pensó que eso no debería haberlo hecho sentir tan mal, después de todo, el y Nick habían terminado seis años antes y era obvio que el seguiría con su vida. Durante la noche, no paró de darle vueltas en como había cambiado su vida en los últimos años y como todo parecía haberle salido mal, eso era lo que realmente debería ocupar su mente, pero no, su mente por completo la ocupaba su ex novio de la adolescencia.

Había pensado, durante los últimos años, que sus sentimientos por Nick habían quedado enterrados. Sabía bien que no habían desaparecido, pero pensó que podía tenerlos bajo control. Sin embargo, el revuelo en su estómago que sintió cuando vio a Nick le dejó claro que no era así.

Lo transportó directamente a sus días de adolescentes, cuando Nick era su mundo completo. Ahora se daba cuenta que realmente lo había perdido. Nick tenía un hijo, y seguramente una pareja y una vida perfecta. El pensamiento le hizo sentirse mareado.

Charlie estaba absolutamente destrozado. Sabía bien que al igual que el Nick seguiría adelante con su vida y siempre había deseado que fuera feliz. Sin embargo, el enfrentar la realidad había sido un duro golpe. Por años se había obligado a si mismo a tratar de olvidar a Nick. Les había pedido a su familia y amigos que evitaran mencionarlo, y el mismo había decidido cortar todo contacto con Nick a través de cualquier red social.

Pensó que así sería más fácil ocultar todos esos sentimientos que tenía por el. Pero estaba claro que había sido un error. Ahora se había tenido que enfrentar directamente a la realidad.

Cuando despertó, tuvo la esperanza de que todo había sido un mal sueño, sin embargo, rápidamente volvió la realidad como un golpe. Tenía muchos sentimientos revueltos, nada parecía real.

Se quedó un rato mirando el techo hasta que finalmente se decidió a levantarse de la cama con dificultad. Al menos estaba seguro de que nada iba a mejorar quedándose ahí todo el día dándole vueltas a su cabeza. Se dirigió a darse una ducha rápida y eso le hizo sentirse instantáneamente un poco mejor.

Al terminar se miró al espejo y observó su reflejo, viéndose exactamente como se sentía. Devastado.

Suspiró, mientras se vestía, usando la ropa más cómoda que pudo encontrar. Un pantalón deportivo y suéter de lana. Afuera estaba nevando ligeramente. El suéter cálido y apretado se sentía como un ligero abrazo, cálido y suave, que tanto necesitaba en ese momento.

Bajó las escaleras y se dirigió rápidamente a la cocina. Necesitaba con urgencia una taza de café. Por el completo silencio en casa, asumió que sus padres ya deberían estar en el trabajo. Miró el viejo reloj cucú en la pared y se sorprendió por lo tarde que era, cas la 1 p.m. La lluvia y el día nublado hacía que pareciera más temprano.

Mientras preparaba el desayuno, encontró una pequeña nota de su madre, pidiéndole que por favor comprara un par de cosas que le hacían falta para preparar la cena.

Charlie suspiró, no le encantaba la idea de salir a la calle con este clima, pero al menos sintió que tenía algo más que hacer que volver a su habitación a encerrarse hasta que llegaran sus padres.