- Hemos llegado - anunció Arkun.
El camino de regreso a los clanes fue silencioso por parte de Koter y yo. Arkun y Aurocla eran los únicos intercambiando palabras.
Koter mantenía una mirada apagada, Pero al mismo tiempo pensativa. Cómo si necesitara escarbar dentro de su cabeza para obtener una ayuda.
Ahora estábamos entrando al pequeño palacio, así que trate de enfocar mis pensamientos en Zafir. Al final estaba aquí por él y sólo eso debía tener en mi cabeza.
Cuando llegamos a la habitación dónde se encontraba Zafir, me adelanté para entrar, Pero antes de que pudiera abrir la puerta, alguien mas ya lo había hecho.
- Gosh - dije al ver que de quién se trataba era mi hijo.
- Hola, papá - intentó sonreír, pero su tristeza le ganaba.
Se hizo aún lado para que pudiera entrar junto al resto. Noté como miró con curiosidad a Aurocla, seguro tenía muchas preguntas por aquel nuevo integrante.
Pero eso quedó atrás cuando sus ojos conectaron con los de Koter, ambos se miraron y es como si quisieran explorar dentro del otro sin la necesidad de decir nada.
- Adelante, Alteza - dijo Gosh al final, haciendo una referencia con su cabeza.
Koter abrió ligeramente su boca, y luego la volvió a cerrar apretando la mandíbula. Ahora se mostraba molesto por esa acción de Gosh. Mi hijo le daba a entender que había aceptado alejarse. Koter aparto la mirada y termino de entrar a la habitación, ni siquiera le respondió a Gosh.
Gosh sólo volvió puño su mano, conteniendo de tal modo sus sentimientos.
Cuando mi mirada regreso al resto de los presentes, todos miraban asombrado a Gosh, sin duda nadie entendía que pasaba.
Karnas estaba en la habitación incluso, y él me miraba con asombro. Incluso mostró pena por la situación. Y yo, yo debía cargar con el peso de haber arruinado ese vínculo. Pero almenos se que estarán ambos a salvo.
- ¿Cómo te fue con las divinidades? - Gosh me preguntó una vez se acercó a mi.
Mi respuesta hacia Gosh fue señalar a la divinidad. Gosh le observó, Pero aún estaba confundido, hasta que poco a poco, empezó a comprender.
- ¡Su señoría! - dijo, haciendo una reverencia.
- Descuida, no es necesario la reverencia - negó - mi nombre es Aurocla, has crecido mucho Gosh.
- ¿Cómo sabe mi nombre? - las mejillas de Gosh se pusieron coloradas.
- No puedo ser una divinidad si no conozco a mi pueblo. Aun que soy de una raza diferente a la tuya, sigues siendo parte de mi pueblo - explicó la divinidad.
- Él es Aurocla, intercedio para que pudiéramos despertar a Zafir - le expliqué a Gosh - Pero para eso primero deberé vincularme con la magia negra del sello lunar. De esa manera apoyaré.
- ¿Vincularte con el sello lunar? - era Karnas.
- Así es - asentí - el sello lunar esta consumiendo a Zafir, si lo quiero despertar deberé unirse a la magia del sello para que Zafir no sea perjudicado.
- Zafir no sólo es consumido en magia, también tiene consecuencias graves despertarlo - habló Aurocla - Si Zafir es despertado en su condición actual, no despertará él, si no despertará una versión nada buena de él mismo. Algo devastador.
- Pero, la magia del rey Zafir se ha mostrado estable. Su magia blanca se protegió así misma - comentó Itsa.
- Pareciera eso, Pero no es así. La magia negra es conocida por ser manipuladora. Todo lo mueve a su manera y hace que el mago no se de cuenta de nada. Tal como Azafat cuando se transforma en alguien más.
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VALKAL: SELLO DEL ECLIPSE #3
FantasyLIBRO #3 TRILOGÍA SELLOS. Para poder poner fin a la guerra mágica, Solen viaja al submundo, lugar donde habitan los clanes desterrados por el bosque alba. Y también, donde existe la posesión sacra mas poderosa de todas, la cual le ayudara a encont...