Capítulo 16

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Creyó que podría. Tuvo esperanza en que Yuki lo escucharía y entendería.

Pero no fue así.

Ella no lo escuchó... no lo perdonó.

<¡Todo es culpa de ese maldito perro!.>

Ese... ese fue el pensamiento de Draken.Y porsupuesto, Draken echando culpas.

— Si ese idiota no nos hubiera interrumpido de seguro mi Yuu si me hubiera escuchado. — Se lamenta el Ryuguji tapándose el rostro con ambas manos.

Y como siempre sus más leales amigos escuchando sus penas.

— Creo que las cosas habrían terminado exactamente igual aunque Rindou no estuviera presente. — Y cómo siempre, Baji tirando por la borda el poco progreso que habían tenido al calmar al pobre pendejo de Draken. — Y no me miren así. No fui yo el que metió a una cualquiera en su cama haciendo que su novia lo dejara.-Intenta defenderse pateticamente ya que...

— ¿Eres pendejo?. — Pregunta irónicamente Draken mirándolo con el ceño fruncido.

— En realidad si lo hiciste. Arruinarte tu relación con Emma por meter a una cualquiera en tu cama. — Mitsuya lo mira con reproche.

... Lo único que termina por hacer es quemarse a si mismo.

— Jejjej...Y eso no fue lo único que lograste. — Se burla Mikey. — No debemos olvidar la paliza que esas chicas te dieron. — Menciona, refiriéndose a las amigas de Emma.

— ¡Agh!. Ni lo menciones. Cada que lo recuerdo siento escalofríos. — Hace una mueca. — Quedé en cama por días.

— Como podría olvidar ese momento... también terminaron pegándome a mí. — Murmura Takemichi mirando a la nada recordando aquel tenebroso día en el que él pagó el precio por andar de chismoso.

— Te pasa por andar de chismoso. — Rie Draken.

— Es cierto. Jajj. ¿Quien te manda a grabar como unas chicas furiosas golpean a un infiel?. ¿Ehhh?. — Habla Mitsuya recordando un poco también.

— ¡Fueron órdenes de Mikey!. — Exclama con un puchero pero luego, una sonrisa surcó sus labios y murmuró burlón. — Aunque valió la pena poner el vídeo en la televisión y verlo en pantalla grande como si fuera una película de acción.

Baji cansado de esto le tiró una almohada en la cara que fue detenida por Draken antes de que siquiera lo tocará.

— Creo que hemos olvidado el tema principal de la conversación.

— Claro que no lo hemos olvidado, amigo. Es solo que estamos cansados de oír lo mismo siempre y repetirte la misma cosa, "Ella no volverá contigo". — Habla Mitsuya mientras mira su celular y sonríe tiernamente, seguramente hablando con Yuzu.

— Como sea, el punto es que Baji, por más pendejo que esté, tiene razón. — Menciona Mikey mientras se come sus golosinas.

Draken suspiró profundamente, sintiendo el peso de la verdad en las palabras de sus amigos. La realidad era ineludible y cada vez que intentaba escapar de ella, se encontraba cara a cara con sus propios errores.

— Lo sé, lo sé. — dijo finalmente, dejando caer las manos de su rostro y mirando al techo del bar. — Es solo que... no puedo dejar de pensar en cómo sería si hubiera hecho las cosas de manera diferente. Si tan solo esa mujer no se hubiera metido en mi vida.

— ¡Por el amor del cielo, Draken!. Por una vez en tu vida deja de hechar culpas. — le señala Baji de forma seria. — No hables cómo si todo fuera culpa de esa tal Anacleta. — y toda la seriedad se le fue.

_ʏᴏ ᴛᴇ ʜᴀʀᴇ́ ғᴇʟɪ́ᴢ_♡ʀɪɴᴅᴏᴜ ʜᴀɪᴛᴀɴɪ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora