𝗖𝗼𝗺𝗽𝗹𝗶𝗰𝗮𝘁𝗲𝗱 || 𝐏𝐞𝐝𝐫𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐌𝐨𝐧𝐭𝐞

09 💙

No creo que estar en este lugar sea buena idea. Ese señor odia a tú familia —Sofia le recuerda a su cuñado mientras ingresan al lugar–

No te preocupes por eso, yo sé manejar la situación. —Matteo le dice con tranquilidad mientras busca un lugar disponible—

¿Ustedes que buscan? Ahuecando el ala —Chavita dice con la mirada fija en Matteo— Aquí no es bienvenido ninguno de los del Monte.

¿De plano? Porque en la entrada dice que no discriminan a nadie. Y yo traigo dinero para pagar.
—Matteo prácticamente se burla y se acerca a la barra ignorando al señor— Quiero una chela, la más fría que tenga.

¡Dije que para ti no hay nada!
—Chavita le grita ganándose la mirada de todos los clientes—

¿Se puede calmar señor? Le va a dar un infarto —Sofia se burla mientras se acerca a la barra—

Sofia Millan, desde niña siendo una malcriada irrespetuosa. Igualita a su esposo. –El hombre escupe su habitual veneno–

Oiga, no le hable así a mi cuñada. –Matteo dice con seriedad dejando su sonrisa–

–Sofia pone los ojos en blanco y mira al señor con fastidio– Chavita, usted siempre tan odioso.

Largo de aquí. Escoria del Monte. –El hombre expresa molesto mientras mira a Matteo–

¿Por qué odia tanto a mi familia? —Matteo le pregunta con confusión–

—Paloma se acerca con rapidez para calmar los animos— Apa, ya bajele, los clientes se están dando cuenta de todo el relajo.

—Matteo levanta las manos— Nosotros venimos en son de paz. Solo quiero una cerveza, nada más.

Papá, negocio es negocio. Sirvele la cerveza y ya. —Paloma le dice cansada de la situación—

Qué sean cuatro. Antes de que se arrepienta. —Matteo pide sin dejar la tranquilidad—

¿Cuatro? —Sofia le pregunta con seriedad y una mirada de advertencia—

Dos para ti, y dos para mí.
—Matteo se encoge de hombros restándole importancia—

—Chavita deja bruscamente las cuatro cervezas en la barra—

Gracias. —Dice Matteo sonriente y las recoge antes de que Chavita cambié de opinión—

Solo esas dos  –Sofia le advierte a su cuñado con determinación–

Claro, no te preocupes. –Matteo le afirma con una sonrisa–

...

Yo amo a Julieta pero ella siempre me castiga con el latigo de la indiferencia. —Mateo en medio de su borrachera le cuenta a Sofia. Después de las cervezas se pidieron unas botellas de tequila—

Te entiendo, lo mismo me pasa con Simón. —Sofia dice con aburrimiento mientras toma un poco de su vaso—

Por lo menos ustedes están casados. Julieta se va a casar con mi hermano –Mateo opina mientras recuesta la cabeza en la mesa–

–Sofia suspira un poco y toma el resto de su bebida– Un acta de matrimonio no lo es todo.

Tienes razón. Un papel de matrimonio no es más fuerte que el amor que siento por ella. ¡Voy a luchar! –Mateo grita risueño llamando la atención de algunos borrachos–

Lo mejor es que te olvides de mi hermana, la conozco perfectamente y se que jamás va a dejar a Juan. —Sofia explica con sinceridad al conocer la obsesión de su hermana con Juan. No le puede dar falsas ilusiones—