𝐇𝐄'𝐒 𝐍𝐎𝐓 𝐃𝐄𝐀𝐃

TWO

Era una total aberración lo que estaba a punto de hacer.

El aire se inundó con un olor pestilente que emanaba del cuerpo en plena descomposición.

Había hecho todo tal como se me indicaba.

Instrucciones:

1.Deberás extraer el corazón de dos personas puras.Uno será la ofrenda y el otro devolverá la vida al difunto.

Personas puras.

Fue tan difícil conseguir el corazón de aquellas personas.

La primera fue una novia el día de su boda.Poco antes de que llegara a la iglesia la asesiné.

El segundo fue un adolescente.Mientras salía de la escuela.

Estaba tan avergonzado de mi mismo.

Cometí un gran pecado matando a personas inocentes.¿Pero que más daba? Estaba hecho y no podría devolverles la vida.

Pero a Felix sí.

La herida había estado sangrando por mucho tiempo.Ardía con fuerza.

Tuve que cortar mi brazo con una navaja.Dejé caer la sangre y tracé dos circulos,uno un poco más alejado que el otro.Entre los círculos dibujé símbolos extraños como la página web me marcaba y al centro hice una estrella.

Coloqué velas alrededor del círculo y en estas hilo rojo.

Sabía que estaba debil,estaba perdiendo mucha sangre,pero todo parecía ir normal.Sabía que no estaba cerca de morir.Sentía que aún me quedaba vida por delante.

Aunque corta fuere.

Me coloqué de rodillas con el frío cuerpo de Felix en mis brazos en el centro de la estrella.

Dejé uno de los corazones frente a mí.

Me estaba empapando de sudor aunque el clima fuera frío.

Había memorizado esas palabras.

Era una especie de latín o árabe.Es lo que menos me importaba.

Coloqué el otro corazón sobre el pecho de Felix y vertí unas gotas de sangre sobre él.

Comencé a orar esas palabras.

Princeps tenebrarum, Tibi hoc cor praebeo, Ut hunc...

El círculo comenzó a encender un rojo intenso.El piso vibraba y el viento comenzó a correr rápido y las velas prendidas ni se inmutaban ante el aire.

Princeps tenebrarum, Tibi hoc cor praebeo, Ut hunc hominem reducas Ad vitam.

Lo dije tres veces.

El miedo zumbaba en mi cabeza.
Es una mala idea.
La frase se repetía en mi cabeza.

De los labios morados de Felix salió espuma blanca.El corazón sobre su pecho comenzó a ser absorbido por su pálido cuerpo.

- Carajo. -murmuré.

Todo a nuestro alrededor se detuvo.