Cartas en el asunto

14 4 32
                                    

Miércoles, 18 de junio de 2025.

—Takahashi, despierta.

La aludida abrió los ojos, incorporándose y sentándose al borde de la cama.

—Uaaah... —Bostezó—. No me acostumbro a que ahora me despiertes por las mañanas, Kanemaru.

Erika se encontraba de espaldas a la chica, sentada frente al escritorio y haciendo sonar el teclado de su ordenador.

—Debes acostumbrarte a mantener un horario de sueño decente si quieres estar en pleno rendimiento —respondió—. Entiendo que te pongas a patrullar a las tantas de la noche, pero también tienes otras responsabilidades de las que ocuparte por la mañana.

—Lo sé, lo sé —Volvió a bostezar la arácnida, secándose las lágrimas que le salían por el cansancio—. ¿Qué hora es?

—Las siete y media.

—Ay, me podrías haber dejado dormir más. Las clases no empiezan hasta dentro de una hora.

Arisa se levantó de la cama con cuidado de no darse con la que estaba sostenida encima y se acercó al armario para ponerse el uniforme de verano.

—He tenido piedad y te he dejado dormir una hora de más —El teclado dejó de sonar en lo que la chica con gafas se daba la vuelta para mirar a la otra—. Hazme caso, te irá mejor.

—¡¿Te despiertas a las seis de la mañana?! —vociferó tras quitarse la camisa del pijama.

Erika se quedó mirando a su compañera de cuarto, quien le estaba dando la espalda. No pudo evitar fijarse en cómo de marcado tenía el cuerpo, especialmente su espalda y, en ese momento, empezó a sentir algo de vergüenza por cómo la estaba mirando.

—Eres incorregible —contestó Erika, ajustándose las gafas y dándose la vuelta para seguir con el ordenador.

Arisa ya se había abotonado la camisa y ajustado el lazo rojo, habiéndose vestido por completo. Se colocó detrás de Erika, agachándose para ver el monitor.

—¿Qué estás haciendo? Esto parece un amasijo de jeroglíficos.

—Estoy retocando el código de los drones y haciendo unas pruebas con un nuevo diseño.

La de pelo corto entrecerró los ojos y asintió con la cabeza.

—Hm, hm. Comprendo —No lo comprendía—. ¿Y tú entiendes todo esto? Está en inglés.

—¿...Tienes dificultades con el inglés?

—¿Y-Yo? Pff, qué va.

—Dime una sola frase que no sea decir tu nombre y tu edad.

—Uhh... Okay, I am go school. I got the power!

Mantuvieron silencio durante unos cinco segundos.

You really suck at this and you call yourself Spider-Woman.

Thank you! —respondió solo habiendo entendido la última parte—. You are welcome.

La arácnida fue hacia la puerta de la habitación y salió, dejando a Erika tratando de contener la risa a solas. Mientras caminaba por el pasillo, Arisa miró rápidamente su móvil para comprobar la hora.

—Hoy es miércoles, así que toca educación física a primera hora —pensó en voz alta para sí misma.

Bajando por las escaleras hasta la planta baja de la academia estaban las taquillas de calzado donde, por norma general, todos los estudiantes deben de hacer uso de ellas incluso si forman parte del programa de internado.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 07 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La excepcional Tangled-WebDonde viven las historias. Descúbrelo ahora