Cautiva

cap 8

(######)

Desperté atada de nuevo a la cama, pasé la mirada por toda la habitación(Bueno,casi toda porque estoy atada y mi vista no es la mejor desde la cama)

no estaba completamente despierta hasta que sentí algo acariciar mi vientre,ese algo era una mano y esa mano es de Oliver me tensé al instante, él está recostado sobre mí mas no está durmiendo solo está ahí, demasiado relajado y cómodo para mí gusto,me removí intentando que se mueva de donde está

–Amor, no te muevas tanto porfavor–habló pesadamente,me moví de nuevo–estoy demasiado cómodo,no voy a moverme de aquí así que ríndete

Suspiro

Él comenzó a dibujar círculos con su dedo al rededor de mi ombligo,era muy relajante pero lo hacía Oliver entonces

–Porfavor deja de hacer eso–él levantó la cabeza,me miró y me dió una sonrisa,pero no era una sonrisa normal,lo conozco hace mucho y tan bien,es la sonrisa que pone antes de hacer algo que le habían prohibido

–¿Por qué debería?–dijo y siguió haciendo esos círculos con su dedo, comenzó a subir hasta llegar debajo pero muy cerca de mis pechos y me dí cuenta de algo a lo que no había prestado el más mínimo de atención:

Ya no tenía la ropa con la que había salido del baño,estaba en ropa interior de encaje negro

Ese miedo que tuve desde que desperté en esta habitación había vuelto,el miedo a que Oliver se le dé por hacerme algo, me secuestró porque le gusto obviamente, y si fue capaz de secuestrarme e incluso golpearme, es muy capaz de abusar de mí¿No?

Comenzé a temblar del miedo de que él quisiera hacerlo y yo estando atada no poder evitarlo, de pronto sentí frío

Bajé la mirada, ví a Oliver manoseando mi abdomen con su fría mano y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo

–Basta,Oliver– hablé firmemente
–No quiero – me respondió y continúo, estaba tan cerca de tocarme uno de mis pechos con sus manos que ahora me daban asco,me moví retrasando lo que sabía que era inevitable, comenzé a llorar de pura frustración,eran primero unas lágrimas y ahora de mí salían sollozos

–No me hagas nada, Oliver,te lo suplico,– le dije, entre lágrimas,el detuvo su mano y río por lo bajo

–Me tengo que lo ir, te veré más tarde, mí amor– Él habrá creído que no,pero yo sí ví la pequeña lágrima que se resbaló por su mejilla antes de salir y cerrar la puerta

En los minutos que siguieron después de que mi peor miedo casi se hiciera realidad yo me dediqué a tararear una que otra canción e inventando melodías, luego comencé a cantar en alto mi canción favorita porque sí, así reacciono a esta sensación se alivio absoluto cuando Oliver se va por esa puerta, cantando

Así me mantuve hasta que

–Por favor basta –la puerta se abrió dejando ver a Regan –harás que sangren mis oídos–dice  mientras finge una mueca de sufrimiento y se tapa los oídos

Lo observé detalladamente, al parecer los cortes en su cara habían cicatrizado

–¿Estás bien, melena?–preguntó mientras se  sentaba en la orilla de la cama 
–Si eso significa estar secuestrada,atada, y con una segura marca roja en la mejilla pues sí,estoy muy bien –él rió un poco
–Lo siento, sé que la pregunta fue muy estúpida–dijo levantándose
–Pues sí–respondí, él solo se quedó en silencio mirándome

Bueno en realidad no creo que esté mirándome a mí,sino que más bien está pensando, recordando o viendo una imagen en su cabeza y sus ojos solo se quedaron así,pero no está presente,su cuerpo sí lo está pero él no, él no está aquí

–Regan–lo llamé a dónde sea que su mente se encontraba pero no se inmutó–¡Regan!–lo llamé más alto, él ahora sí me estaba mirando pero como si apenas se diera cuenta de que yo estaba aquí

–Perdón ¿dijiste algo? –lo miré confundida y negué con la cabeza
–No dije nada,pero como que estabas ausente y me asusté –él solo asintió–¿Te puedo preguntar algo?–hablé luego de un silencio un poco incómodo
–¿Qué quieres preguntarme? –dijo él
–¿Alguna vez me voy a ir de aquí o Oliver me va a matar cuando se aburra?–esa duda se vino a mi mente luego de el casi abuso de Oliver
–Si te soy sincero,no tengo la menor idea de sí te vas a ir algún día,pero te aseguro que Oliver no te matará–acercó su mano a mí mejilla y yo recosté mi cara casi automáticamente–sé que él te golpeó,te ató y me sorprendería que no te halla tocado o intentado tocarte–Ja, sí lo estaba por hacer pero gracias al cielo no lo hizo y solo se fue–pero no te mataría– aproximó su boca hacia mi oído cómo si me fuera a contar un secreto–Yo jamás lo dejaría matarte

–¿Por qué no lo dejarías?–pregunté
–Porque me haces sentir–guardó silencio un momento, él estaba tan cerca de mis labios que pude oler su aliento,un aliento a menta, enloquecedor–me haces sentir mucha,mucha lástima–Reí

–Eso no me agrada–dije–no me gusta que sientan lástima por mí, además si me dieran a elegir entre quedarme viva solo para estar encerrada, atada y soportar los golpes de Oliver o morir, elegiría morir–hablé con toda sinceridad

–Lo entiendo,pero aún así no te dejaría morir,eres mí amiga–dicho esto me abrazó,claro está que yo no pude devolverle el abrazo

–Regan,esto es muy bonito,pero quisiera poder devolverte el abrazo–él rió y sus manos se fueron a mis muñecas para desatar las cuerdas liberando así mis brazos, ya libre de mover mis brazos lo abracé muy fuerte, él hizo lo mismo

Con aquella muestra de cariño,Regan me transmitió la calidez de una bella amistad,una amistad hecha de una forma muy peculiar y siniestra ligada a un secuestro,pero una muy bonita al fin